Capítulo 47: Nunca es tarde para adquirir nuevos traumas

2.4K 230 141
                                        


Arte: yoquierodibujar

Aclaración: De acuerdo con las reglas actuales de Wattpad, se afirma que todos los personajes (implicados en situaciones sentimentales y eróticas) tienen 18 años o más, son mayores de edad.


Los ojos azules se abrieron de forma perezosa ante el movimiento a su lado y la urgencia de la voz que lo acompañaba. De inmediato todo el cuerpo de Eric reaccionó ante el sentido de lo que Kyle decía. Su conciencia se sintió lúcida al instante, pero eso al mismo tiempo lo hizo consciente del dolor muscular general que no recordaba haber experimentado antes.

— Carajo —se quejó con suavidad. Una jodida noche de ejercicio continuo era bastante nuevo para él y su condición física de mierda. Si seguían así Kyle iba hacer que bajara de peso con tanto movimiento.

El ruido de cierre en la puerta principal le recordó el problema actual. Se obligó a levantarse para ver el caos en el que estaban metidos. La cama estaba tan deshecha que aún se sorprendía que hubiesen podido jalar una cobija para cubrirse, todo el piso tenía sábanas y almohadas alrededor, mismas que habían caído a lo largo de sus actividades nocturnas.

Volteó a ver a Kyle y sus ojos se abrieron de más al empezar a reír. Aunque hizo todo lo posible por no ser ruidoso, no había podido evitar la reacción. El cabello pelirrojo se extendía de forma extraña sobre su cabeza producto de la manipulación continua, era un friz extraño que hacía mucho que no veía en él.

— En realidad me sigue gustando —comentó sin explicaciones y se inclinó para besar sus labios sin dudar. Eran suyos de nuevo, o al menos eso creía. Podía ver sus marcas por todo el cuello y pecho del judío. Sabía que él mismo las tendría. Gerald no era estúpido, pero seguro podían postergar un poco más el choque si se movían con rapidez.

Kyle estaba por golpear al pendejo que se reía de la absoluta nada cuando tenían asuntos más importantes que atender. Sin embargo, el beso aminoró toda su intención violenta y volvió a probar una minucia de la noche de ensueño que habían tenido. Tendría ser muy cabeza dura si se ponía a negar que eso fue todo lo que había esperado en esos días de retención y ahora sentía una relajación muy contraproducente para el momento que se les venía encima.

— Métete a bañar, hueles completamente a sexo —dijo Eric sonriendo con orgullo, como si fuese una marca que había dejado en el otro—. Y usa cuello alto o una bufanda —agregó mientras se estiraba como si fuese un gato perezoso—. Me encargaré de tu cuarto para que Gerald no enloquezca.

Kyle abrazó la almohada que había sobrevivido sobre el colchón y observó al castaño. En este punto podía... admitir que le atraía su físico. De no ser por la llegada de su papá hubieran tomado un baño reparador en la bañera. A juzgar por el día era evidente que era tarde para hacer otras cosas dentro de su itinerario.

Se levantó con precaución, con tirones en su espalda y cierto escozor en las rodillas, pero en general bastante repuesto con el sueño recuperado. Fue a escoger su ropa, con la prenda con cuello que recomendaba Eric y una bufanda roja para el castaño, porque estaba en una situación similar.

— Con que no nos vea así estará bien, él no es tan atento como mi madre. No tardaré, para que te metas en cuanto salga —le dedicó una última mirada a ese cuerpo desaliñado y marcado por culpa suya y se giró antes de mostrar una sonrisa tonta—. Por si acaso vístete, por favor.

Salió y fue directo a la puerta del baño, tratando de permanecer un segundo en el pasillo. Se encerró y puso la regadera, poco antes de escuchar un toquido que le puso el corazón en la garganta.

¿EL KYMAN ES REAL?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora