Parte VI: Faro.

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A veces es fácil notar el paso del tiempo cuando las cosas más visibles o tangentes a tu alrededor se transforman; como una calle de tierra que se adoquina, o una pequeño puesto de comida cambia a un local en el centro de la ciudad; o cuando lo que antes habían sido grandes mansiones ahora eran lugares de rehabilitación para personas con problemas mentales o sanitarios. Bien, eso y muchas más cosas habían cambiado en Duskwood, denotando el año y medio desde que todo ocurrió.

- ¿Y que te parece, Jake? –me preguntaba Lilly, mientras observábamos la fila de árboles que había hecho plantar a los lados del camino principal –no eran estos precisamente los que quería pero servirán para el verano.

- Es un gran trabajo –afirmé con una pequeña sonrisa –todo el lugar en general lo es.

Giramos y ahora teníamos frente a nosotros el Cetro de rehabilitación de salud mental y espiritual Jennifer Hanson, donde antes había sido la casa de los Donfot, anexado a las ex casas de Lilly y Hannah.
Todo ese complejo sistema arquitectónico fue idea y obra de Lilly, aprobado por Hannah. Ella vendió tierras, y sus negocios, para construirlo, y la mayor parte de su herencia la utilizó para ayudar a todas las personas de Duskwood en sus peores momentos. Así, fue como, se convirtió en la prestigiosa dueña del mejor hospital en toda la zona, y la candidatura para ser alcaldesa de la ciudad.

- Ni que lo digas, pero gracias a Nevian tengo inversionistas interesados en hacer más cosas.

Olvidé mencionar cierto detalle: después de mi juramento y que el rey Nevian se coronara rey, él y Jan estuvieron pendientes de mí y mi vida, al punto de involucrarse con mi familia. Lilly conoció al rey en una de mis entregas de perfumes en la que le permití ir conmigo, y desde entonces se comunican constantemente através de cartas. 

- No puedo creer que te dirijas al rey por su nombre, Lilly.

- Tengo que aprovechar cada oportunidad que tengo, y que mejor que ser una buena amiga del rey –dijo levantando los hombros –tú podrías intentar hacer lo mismo y no solo hacer tu trabajo.

- Lilly, lo que menos le interesa al rey es que yo haga mi trabajo, él solo quiere que me mantenga quieto y no destruya nada mientras él negocia con los otros reinos.

Luego de la dichosa reunión, me llevó un tiempo comprender lo que Nevian quería de mí. No solo era mi promesa de serle leal, si no mantenerme bajo control para no iniciar una guerra sin sentido. Pero en aquel entonces estaba tan furioso y ciego de ira, que lo único que hacía era poner en peligro a todas las personas. 

Creo que temían, o todavía temen que pierda el control y destruya todo si no encuentro a Scarlett. Por que de eso se trataba todo,  de hallarla sin importar las consecuencias.
Sin embargo, al regresar a Duskwood con Lilly, me di cuenta que si me dejaba perder en la ira y la locura, todo el trabajo que ella estaba haciendo quedaría reducido a cenizas. Porque si de algo estoy seguro es que podría destruir todo a mi paso si se trata de hallar a Scarlett, pero no lo haré…puedo demostrar que no lo haré, o eso he intentado todo este tiempo.

 
- El rey puede ser drástico, pero quiere lo mejor para el reino. En fin, no creo que hayas venido a hablar de trabajo ¿Qué sucede?

- He venido de visita –dije sin más.

- Bien, estoy algo ocupada ahora, pero puedes esperarme en por el jardín, y luego iremos a beber algo en el Rainbow.

- En realidad vine a ver a Hannah, si es que puedo verla.

-  ¿Estás seguro?

- Sí, creo que es momento de hablar con ella ¿crees que me lo permitirán?

- Eso creo –dijo algo desconcertada –le diré al señor Barret que le de permiso de salir.

Había una vez en DuskwoodDonde viven las historias. Descúbrelo ahora