El hombre secaba su cabello mientras tomaba asiento, alistándose para hacer su habitual trenza. La ninja había concluido de vestirse hacia nada y hacía pocos segundos se adentraba en la habitación. La maga estaba feliz, probándose algunos collares y pulseras. -No me agrada- Habló primero el chico. -A mí tampoco- Compartió la ninja. La maga estaba desconcertada - ¿Por qué? Es un buen chico, podemos confiar en él- Protestaba sin dejar de sonreír la pelirroja. - ¿Como estás tan segura? Dijiste que lo conocías, pero es una de las personas más...más... No lo sé, simplemente me da asco- Refutó el medio Darkin. -No te hagas ideas raras. Él era un buen amigo, solo que luego de lo que me pasó perdí todo contacto con él- Explicaba la maga. -Un segundo. ¿Este no es el infeliz del que me hablabas? ¿El que perseguías como animal para que te echara a patadas tras usarte? – Consultó molesto el hombre. -Bueno, sí. Pero...- Intentaba aclarar sin éxito debido a la nueva interrupción de su amado. -Ah genial, este perro rubio no sirve para nada. Suerte que le sonsacamos la información antes sobre las armas. Porque seguro nos hubiese estafado- Dijo enfadado.
Tras esto se escucharon unos golpes a la puerta de la habitación prestada por el piltoviano, y el ya mencionado apareció. -El festival comenzara pronto ¿Quieren ir partiendo? – Sugirió, nadie le contestaba. - ¡Claro! – Vociferó la targoniana al percatarse de la incómoda situación.
Llegaron al centro de Piltover, nuevamente el trio estaba impresionado por la capacidades tecnológicas de la ciudad, los seres humanos por momentos parecían androides, Jonia y Noxus parecieran estar trescientos años atrasadas.
Las cosas se mantenían tensas en el grupo, la desconfianza por el rubio era bastante notoria, hasta el propio Ezreal se percataba de esto. -Muchachos, no puedo evitar notar algo de incomodidad con mi presencia- Comentaba durante el festival mientras les ofrecía comida. La charla estaba entre ellos tres puesto que Zoe se encontraba unos metros alejada embobada por los juegos y atracciones del lugar. -Nosotros no confiamos en nadie- Respondía de mala manera la pelinegra. -Vamos muchachos, conozco que en Noxus la vida suele ser muy agotadora. Relajémonos solo por hoy, luego nos pondremos de nuevo con la misión de recuperar las armas- Espetaba con confianza insistiendo con los aperitivos en sus manos, el dúo terminaría aceptando unirse a la diversión.
Akali estaba llamando la atención de buena manera al ganar en todos los puestos cuyo atractivo sean los juegos, la mujer del parche estaba pasándola bien. Kayn por su parte habría estado mas de una hora bebiendo diferentes licores que las tiendas ofrecían, debía de admitir que estaba de buen humor ahora, necesitaba desconectarse de todo ese peso que hace meses estaba sobre sus hombros, y la bebida estaba cumpliendo demasiado bien su rol.
La maga y el rubio terminaron jugando a algunos juegos juntos, separados de los jonianos. Ambos rieron divertidos por pasar el rato juntos. La noche estaba al acecho, pero a diferencia de la tierra triste de Noxus, aquí la noche prometía alegrías. La maga se recargaba en una pared, mientras que bebía algo de agua, Ezreal estaba juntos a ella. El rubio llevó a cabo un movimiento para apoyar su mano contra la pared y estar cara a cara con la muchacha, enrojeciendo a esta última. -Me he divertido mucho esta noche Zoe- Charlaba. -Yo también- Contestaba entre cortado la otra. -Desde que lux me hecho aquel día del castillo, las cosas solo han ido a peor para mi- Comentaba. -Lamento eso- Apenada agregaba la muchacha. -No te preocupes, ahora me agrada la idea de que lux no me haya aceptado- Dijo pícaramente, su amiga no comprendía. - ¿Por qué? – Dudaba incrédula. -Porque ahora que veo en que te has convertido, he aprendido lo que es la verdadera belleza- Concluyó, intentando acercarse.
En otro momento la mujer estaría cumpliendo su sueño, pero la imagen de Kayn y los momentos que pasaron juntos no se apartaban de su cabeza, impidiendo cualquier tipo de contacto con el rubio. El hombre local estaba algo pasado de copas, le daba igual lo que la mujer pensase, para él la pelirroja tenía una deuda carnal pendiente con él, todo culpa de haber frustrado su relación con lux. -Detente- Pidió la maga empujando al chico un poco hacia atrás, este hacia caso omiso, por el contrario, seguía recargando su cuerpo completo en la chica.
-Te he dicho que pares- Insistía la víctima, las altas horas de la noche y la basta y jubilosa multitud impedían que alguien se percatase de esto. El muchacho frustrado de la negación de la mujer opto por ser un poco más brusco, tomándola por la nuca por detrás y acercando sus caras -Amiga mía, me has costado la cogida de mi vida. Me alegra que ahora te veas así, tal vez puedas disculparte como es debido- Exclamaba morbosamente con tono agresivo en la oreja de Zoe, las lágrimas de miedo caían de los ojos de la pelirroja.
Suerte o milagro, pero Akali había estado atenta a ella desde que Ezreal se comenzaba a acercar. Al presenciar la escena, actuó por impulso y un kunai voló a toda velocidad, incrustándose en la mano del joven hombre, antes de poner un grito de dolor la ninja le atrapó discretamente por la espalda, tapando su boca -Eres el perro asqueroso que pensé que eras desde el primer momento que te vi- le susurró a la par que reposaba una daga que alguna vez perteneció a Katarina en la espalda del joven - ¿Sientes el frío acero? Es un regalo de una ex amiga, prometí que solo asesinaría a gente mala con ella, creo que entras en esa categoría- Finalizó mientras comenzaba a pinchar la piel del piltoviano.
El chico fue hábil dando un golpe con el taco de su zapato a la rodilla de la pelinegra, haciendo que esta afloje su guardia y zafarse. Tras escapar de la llave que le propinaba su agresora lo primero que hizo fue gritar - ¡Son ellos! ¡Los ladrones de las armas! ¡Los asesinos de mi abuelo! ¡Noxianos asquerosos encubiertos! ¿Quieren matarme a mí? ¡Cerdos! – Vociferó llamando la atención de todos los presentes.
Antes de cualquier movimiento Akali sintió algo reposándose en la parte posterior de su nuca, un cañón de arma de fuego. -Mas te vale que no muevas ni un solo músculo. No tengo ningún problema en volarte la cabeza- Exclamó seria una voz femenina -Quedas detenida por intento de homicidio, además de sospechosa de previo asesinato y robo de artefactos ilegales- Sentenciaba una mujer de cabello azulado oscuro. -Puedo sentir como tu pulso ni siquiera se inmuta, toda una profesional en el manejo de armas. Déjame adivinar, ¿Caitlyn? – Preguntó la mujer cuyas manos estaban en alto. -Al menos eres consciente de tu posición- Respondió soberbia la uniformada. - ¡Ellos no están solos, Cait! – Espetó fuerte el aventurero, la mujer captó el peligro en ese momento, pero para cuando viró su cabeza a un lado solo llegó a divisar como una guadaña rebanaba su brazo, separándolo de su propio cuerpo y, por ende, soltando su arma.
Una bomba de humo estallaba al instante, los gritos de la muchedumbre y de la sheriff eran la nueva orquesta del festival. Para cuando el humo pasaba y permitía recuperar la visión la imagen era poco agradable; una ambulancia asistía rápidamente a la tiradora, mientras que el cuerpo sin vida de Ezreal se recargaba en la pared, completamente lleno de puñaladas por todo su cuerpo dando a entender que ambos guerreros habían atacado sin piedad alguna al degenerado que intentó agredir a su amiga.
Nuevamente huyendo, nuevamente convirtiéndose en enemigos para la nación, la historia se repetía.
Las alarmas sonaban por toda la ciudad de Piltover, esto no era Noxus, aquí las fuerzas estaban armadas hasta los dientes, permanecer en la ciudad del mañana era imposible ahora. -Debemos bajar- Entendió la mujer del parche. - ¿Dónde? – Gritó Kayn. -Zaun-.
----Notas del autor
Dos capitulos en menos de una semana, golazo.
Nuevamente gracias por leer y apoyar esta historia, que queda no mucho para su final. La batalla final está acercandose de a poco.
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Hasta Que Los Darkin Nos Separen | Zoe x Kayn | Fanfic | Lemon
RomanceLos Darkin Varus y Aatrox se emprenden en una misión brutal para liberar a Rhaast de su portador, Kayn. El cual no dara el brazo a torcer y arrastrara la pelea por toda Runaterra junto con Zoe, una exiliada del monte Targon por incumplir su papel de...