Capítulo Dieciocho: Mal entendido.

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«Mierda, ¿él que demonios hace aquí? No se supone que este aquí» se dijo en su mente el ahora sorprendido y sobre todo, aterrado teniente, pues la persona que estaba delante suyo era nada más y nada menos que un viejo conocido que el joven hombre juro haber olvidado después de un percanse que tuvieron en el pasado; pero que ahora estaba delante suyo, haciéndose pasar por su actual pareja.

Piers estuvo apuntó de hablar cuando de repente, su mejor amiga intervino, diciendo — Oigan, que les parece si nos encargamos de los bichos que intentan matarnos — Piers agradeció lo que hizo su amiga, y más cuando ella lo tomó de la mano, alejándose de Chris, quien le dedicaba una cara de muy pocos amigos al joven chico que tenía en frente de él, y claro fue para Valantine, que si no mantenía a su amigo concentrado en lo importante, muy seguramente habría una fuerte confrontación en una situación que no lo amerita.

Por lo que poniéndose delante de Andrew, la mujer le ordenó a Redfield ir a apoyar a su equipo, y de negarse se encargaría personalmente de hacerle saber al alto mando que él no estaba cumpliendo con las órdenes; por lo que sin más alternativa, el pelinegro se retiro, siendo algo que la mujer aprovecho para voltear y decirle al muchacho con una expresión poco amigable — Bien Andrew necesito que me digas si en realidad eres el novio de Nivans o pretendes hacer algo con él — El chico trago grueso, y sin ocultar nada, dijo — En realidad soy parte del pasado del teniente, quiero decir, soy mas bien su ex novio — Y ahí estaba la razón del porque el teniente se puso pálido después de verlo, y del porque su amigo actuó como si viera a un zombie o algunas de los BOW. Fue entonces que ella le menciono brevemente — Bueno pues, será mejor que arregle este desastre, y que tu no te hagas nada — El chico asintió con la cabeza, varias veces, para luego ver a la rubia retirarse mientras él analizaba lo que tendría por decirle a su ex novio, quien por lo que vio, parecía que mantenía una relación con su propio jefe.

Mientras tanto, el joven Nivans, quien estaba concentrado en repeler el ataque de las criaturas arácnidas a las que tuvo que hacer frente durante su estadía en los laboratorios subterráneos, trataba de pensar en una razón lo suficientemente válida para ver a su ex pareja trabajando en la B.S.A.A, pues hasta donde él sabía, su anterior amado no tenía ni la más mínima intención de unirse a alguna organización anti - bioterrorismo, pues para él resultaba muy arriesgado unirse a una agencia que este dispuesta a derramar sangre por un bien mayor para la humanidad.

Recordar las discusiones que ellos tuvieron meses antes de que su capitán y mejor amigo Chris Redfield lo reclutara del ejército, no era para nada agradable, por lo que sacaba su frustración mediante los disparos certeros que le propinó a esos insectos mutados que trataban de matarlo.

— ¡Hey, Piers, quiero que te mantengas concentrado en matar a estos bichos! — Exclamó Woods a su amigo, quien salió de sus pensamientos, para luego mirarla por unos breves segundos y después concentrarse en matar a las bestias arácnidas que se esparcian por todos lados, al punto de considerarse que su peligro era inminente. Pero pronto eso empeoró, luego de que algunas puertas se abrieran, dejando que los infectados salieran de sus escondites, provocando que los agentes tuvieran que retirarse de la entrada este de aquel complejo de oficinas.

— ¡Carajo, tenemos que irnos, ya! — Grito con bastante miedo el querido Jacob, quien dio unos diaparos a los infectados, matando a tres de ellos, mientras que al resto sólo los hirió, para luego aquellos infectados avanzar, manteniendo un aspecto intimidante que aumentaba cuando éstos emitían gritos agudos que parecían terminar en gruñidos.

Mientras Delta y el equipo de extracción huían de los zombies y las criaturas arácnidas, un fuerte golpe en la cortina metálica que cubría una de las puertas del lado oeste del edifico se escucho, para luego ver como un fuerte puño azulado atravesaba la cortina, logrando que el equipo suba a los pisos superiores mientras Jill lanzaba una granda a aquel descomunal puño que se despedazo luego de la detonación de aquel artefacto explosivo.

MÁS QUE AMIGOS (NIVANFIELD) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora