˚₊· ͟͟͞͞➳❥ 𝐌𝐄 𝐄𝐍𝐀𝐌𝐎𝐑𝐄 𝐄𝐍 𝟐𝐃 | Izuku M x Femɑle! Reader
─ ___ García Martínez vive una vida miserable, sin embargo, con ayuda de un villano que la lleva a su dimensión, todo eso cambiará.
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「🦸🏻♂️」 Fɑnfic Boku No H...
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Estabas tranquilamente dormida entre los brazos de Izuku. Su presencia te hacía sentir tranquila, logrando que pudieras dormir con tranquilidad, sin embargo, hoy sería la excepción. El grito de Izuku diciendo "¡All Might!", te despertó.
—Izuku... -murmuraste algo enojada por haberte despertado.
Él volteó a verte sorprendido y rápidamente te acarició la espalda.
—Lo siento, cariño... -murmuró con pena- Te desperté sin querer -sonrió apenado.
—Ya no importa -bostezaste tapando tu boca con tu mano- Tenemos que levantarnos de todos modos, hay clases -te sentaste en la cama.
—Sí, pero antes -te sujeta de los hombros y te acuesta en la cama, para seguido subirse encima de ti y apoyar sus brazos a cada lado de tu cabeza.
—¿Q-Qué sucede? -preguntaste nerviosa.
—Tú sabes que es lo que quiero, preciosa -acerca su rostro más a ti.
—No lo sé, coquetear conmigo no te llevará a algún lado -sonreíste nerviosa.
Narra Izuku:
—¿Ni siquiera me conseguirá un beso? -le susurro mientras ella niega con la cabeza.
—Tengo aliento matutino -me responde como si eso nunca me hubiera detenido antes. Lo dice como si fuera asqueroso.
—Yo también tengo aliento matutino. Se cancelará, confía en mí, soy como un profesional o algo así -se ríe un poco de la broma antes de levantarse para sentarse sobre mí mientras mis manos descansan en sus caderas.
—Lindo -tiene una cara divertida mientras me levanto para darle un beso antes de que su mano me empuje hacia abajo mientras me quejo juguetonamente- No lo suficientemente lindo para un desagradable beso matutino. Buen intento, sin embargo -ella sonríe ante mi miseria.
—Me babeaste cuando estabas durmiendo, creo que eso es digno de besar -ni siquiera puedo terminar mi oración mientras me río, viendo la cara ofendida de mi novia antes de que agarra una almohada para arrojármela mientras la atrapo antes de que golpee mi cara para arrojar el arma lejos de ella.
—¡Tú babeas Izuku! ¡Yo no! -ella me responde. Ella no se equivoca, yo si babeo. Sin embargo, a ella le encanta porque la escuché llamarlo adorable cuando pensó que estaba durmiendo.
Dejé mi juego peleando con ella y me acosté debajo de ella, mirando por la ventana de la habitación antes de fruncir el ceño ante algo.
—¿Qué es eso? -murmuro, todavía tratando de concentrarme en mi ventana antes de que ella también gire la cabeza.
