✨ Surreal ✨

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Miré a un punto muerto, no estaba segura cuanto tiempo hacia pasado, incluso podían ser días. A la niña le daba de comer 5 veces al día, o eso creía yo. Parpadie somnolienta, en ciertos momentos entraba y me inyectaba algo. Eso me constaba para poder medir el tiempo. Llegaba puntos donde simplemente dormía más que no sabía nada. Yo creía que más o menos una semana había pasado, tal vez un par de días más.

Volví a abrir los ojos mirando al suelo, Valentina me miraba casi con orgullo. Intenté parpadear un par de veces. Ella cuidadosamente acercó una silla y luego apilo una caja, subió algo insegura y estirandose lo más que podía me mostró un color azul con una punta muy afilada con una enorme sonrisa. Ella cuidadosamente empezó a picar la cinta americana. Mis brazos ya tenían sangre seca al igual que mis muñecas.

____: Valentina... Que haces? -Susurré-.
Valentina: Nos vas a sacar -Me sonrió-.

Iba a contestar pero mis pies tocaron el suelo, intenté no hacer ruido mientras lentamente dejé caer mi cuerpo al suelo. Ella rápidamente bajó, mientras me tomó de la mano. Empezó a retirar la cinta, mordí mi lengua por el dolor. Dolía como si algo me quemara y luego volviera... Podía perfectamente ver las cicatrices de los cortes. Mi cabeza de movía demasiado rápido, la habitación daba muchísimas vueltas.

Valentina: Vamos... Por favor -Susurró-.
____: Solo dame un segundo...
Valentina: Tengo la llave -Me la enseñó-.

Una pequeña llave plateada. Parpadie sin interés mientras cerraba los ojos y me dejé caer en el suelo por completo.
Sentí unos pequeños golpes en mis mejillas. Estaba segura que me había desmayado. Miré el rostro asustado de Valentina.

Valentina: Por favor... Por favor... Tienes que levantarte...
____: Vete tu... Puedes correr lo más lejos que puedas... Tu puedes, Valentina...
Valentina: No puedo... Solo soy una niña... No te puedo dejarte... Te va a matar -Susurró-.
____: No importa, vete.
Valentina: Por favor... Inténtalo.

Su dulce voz me dormía cada vez más, entreabierto mis ojos miré su rostro. Sus ojos estaban cristalizados, su cabello sucio, sus labios secos, su piel pálida, podía ver los huesos de su clavícula... Y lo intenté. Después de ayudarme con la cama y bastante paciencia me pude levantar. Me tambalee hasta la puerta, y Valentina me dio la llave. Teniendo el mayor cuidado posible metí la llave y abrí la puerta. Valentina se asomó mientras yo me recargue en la pared, camino un poco y volvió por mi. Ella tiraba de mi y yo me movía lo mejor que podía. No podía ver nada, los ojos me dolían muchísimo.

Valentina: Está es la puerta de la cocina, pero está cerrada... Tal vez pueda abrir la ventana...
____: Está bien, amor -No sabía que decía-.

Me recargue sobre la pared torpemente mientras ella hacia algo que no podía ver. Me sentía tan débil y inútil, no podía pensar en nada. Después de unos minutos que sentí eternos sentí unas pequeñas manos en mis manos.

Valentina: Lo logré... Pero es muy pequeña, podrías intentarlo... O si rompo la ventana tendríamos que correr.
____: No creo que pueda hacerlo, amor.
Valentina: Está bien, esta bien.

Ella empezo a mover unas cosas para que fuera mas fácil para mí salir, mire el suelo y está la primera vez que podía ver qué estaba descalza y tenía un short bastante sucio que empezaba a deshacerse. No pude mirar más cuando Valentina me guío hasta la ventana. De reversa salí de la casa.
Desde afuera le estiré mis brazos a Valentina y la tomé en brazos, mientras caminaba demasiado lento. Ella me guiaba y me decía cuando debía girar. De vez en cuando giraba la cabeza cuidando también mis espaldas. Cada paso que daba me costaba más. Ni siquiera sabía cuánto había avanzado pero se sentía un horror.

Valentina: Puedes bajarme, soy muy pesada.
____: De que hablas? Eres una pluma -La abracé un poco más paga cubrirla del frío-.
Valentina: Puedo caminar.
____: Amor, estás descalza, no puedes.
Valentina: Ahora es césped, pero pronto pisaras suelo...
____: Está bien, amor. Todavía te puedo cuidar, solo necesito un poco de ayuda, podrías hacer eso por mi?
Valentina: Que necesitas? Gira un poco a la izquierda.
____: Sigue así, eres mis ojos -La obedecí-.
Valentina: Puedo hacer eso.

Sin saber cómo pude, seguí. Sin saber cómo, pude cargar todo el tiempo con Valentina. Sin saber cómo empecé a abrir los ojos lentamente. 

Mis ojos se clavaron en el genio (Spencer Reid y tu )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora