Diablos, sentía como si estuviera desnuda, los ojos de los chicos estaban fijos en mi o al menos eso pensaba.
-Puse un short en la mochila agarrarlo-dijo para que yo tomará el short-tu tía me lo dio- cuando lo agarre me lo puse en ese lugar-Dejen de verla.
-Es su culpa por estar tan guapa-dijo uno de los chicos.
Después de eso acabe exhausta y sentía como toda la frustración había acabado, no soportaba el baile, me sentía muy vulnerable pero a la vez lo amaba, era tonto, muchos lo odiarían de ser yo pero aunque fue mi sufrimiento en muchas ocaciones también fue mi salvación y desahogo. Y no me había dado cuenta de lo mucho que lo extrañabas, aunque en realidad no es que solo baile eso, no yo podía bailar distintos estilos, siempre fui a muchísimas clases de baile y soy buena, al menos no me caigo, pero en parte era por mi masoquismio que lo amaba, me gustaba la sensación de completo agotamiento, de saber que había dado más de lo que me pedían, el único problema era cuando me exponía a otros, cuando dejaba ver mi alma, bueno lo que quedaba e ella, no me gustaba que me vieran, que vieran lo rota que estaba, no me gustaba, es mas, lo odiaba con toda mi alma.
Pero por desgracia mía al bailar por tantos años le adquirí un gusto, porque con tanta presión que acumulaba necesitaba un escape y la podía liberar en ese arte.
Aunque también estaba lo otro...
-¿Estas bien?- me pregunto
-Estoy muy bien, gracia-dije alegre de evitar pensar en eso-¿Y tu?-dije el verlo rendido. Me dedico una sonrisa y nos fuimos de ahí.
Seguía con el uniforme porque me negaba a cambiarme sin una ducha, pero si me puse la sudadera aunque esta me tapara toda el uniforme.
Cuando llegamos a casa lo abrace con todo y sudadera para evitar el contacto, el me había sido útil hoy, y le agradecía seguirme el juego. Al terminar el abrazo alce el rostro y me encontré con sorpresa en sus ojos.-Eres muy delgada.
-Lo sé-conteste sacándome del abrazo y caminando hacia mi casa-esta en mi genética- conteste como si fuera lo más normal del mundo.
-También ha de ser todo el ejercicio que haces-dijo alzando una ceja-¿por qué no te metes en algún deporte escolar?
-Tengo muchas cosas que hacer, además me he metido en algo fuera de la escuela...-dije sin darme cuenta quien era el, bien hoy nos habíamos llevado bien pero por lo general teníamos una guerra interna donde entre mas se avergonzara el contrincante mejor, y si se enteraba del baile... Bueno no sería bueno. Yo y mi gran bocaza.
-¿En que te metiste?
-Voy a ser niñera de la hija de.... De una de las maestras de mi primo, no me acuerdo de quien.- dije soltándolo, estábamos frente a mi casa-¿quieres entrar a ver si esta mi primo?- dije volteándome para llegar rápidamente y cuando di un paso sentí una punzada en mi pie derecho, el rápidamente llego y me abrazo evitando que mi rostro besara el piso-gracias-dije mascullando, mis mejillas se pusieron rosas y mi corazón se aceleró, algo muy raro, tal vez me iba a enfermar.
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Mi vida desastrosa
RandomEstrella es una chica con pensamientos únicos, un tanto grosera por si sinceridad, y no hay nadie que tenga un rencor tan grande como ella si es que lastimas a alguien de los suyos, pero por desgracia su fachada de muñeca de acero se vendrá abajo c...