Capítulo 6

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Darren

En lo que podía trataba de no echar un vistazo hacia la mujer que estaba en la cocina de mis padres, mientras preparaba todo para la cena.

Desde que me pidió que hiciera lasaña se mantuvo sin decir nada, viendo vídeos desde su celular, soltando alguna carcajada a medida que los veía. De verdad era un bicho raro, pero eso no tuve en cuenta al momento de volver por ella cuando me rechazó para llevarla a su casa, es más, me sorprendía las agallas que tenía para no dejar que nadie la insultara.

Sé que estaba cabreada por lo que pasó hace unas horas cuando mi madre la presentó a algunos familiares y a sus amigas. Cuando Amy vino a contarme lo sucedido, sabía que no iba a callarse e iba a defenderse, aunque luego se avergonzaría de haberlo hecho, pero dudaba que de verdad lo hiciera.

Era alguien bonita, y no podía ocultarlo. Sin embargo, no era razón para poder haberle dado como opción traerle a la casa de mis padres, no cuando no había traído a ninguna mujer desde hace tiempo. En estos momentos necesitaba algo como para poder despabilarme, y no podía beber, porque debía de esperar hasta llevarla a su casa.

Al parecer la tormenta no iba a cesar, cada vez aumentaba más, evitando que pudiéramos salir. ¿Pero por qué no me preocupaba aquello? Y por otra parte, daba por hecho sentirme tranquilo estando a su alrededor pese a no querer crear vínculos con alguien más.

Traté de no centrar mucho mi atención en Madelyn que tenía la mejilla recostada sobre la mesada, aun con el celular en mano, observando algo para pasar el tiempo. En ningún momento tuvo el ademán de querer salir de la cocina, tan solo permaneció sentada en el mismo lugar desde que apareció en la cocina, evitando cruzarse con algunas personas en especial.

ㅡ¿Qué son las estrellas Michelin?

De nuevo, fue ella quien interfirió con lo que estaba haciendo. Antes de contestar, saqué la bandeja de la lasaña para ponerla sobre la mesada, observando cómo se iluminaban sus ojos.

ㅡSon algo como para calificar a los restaurantes de manera a reconocer la calidad de los platos de comida y del servicio que ofrece. ㅡSaqué del cajón un cuchillo, para empezar a cortar un pedazoㅡ. ¿Por qué la duda?

Se encogió de hombros, con la vista puesta en la lasaña, ㅡEstaba leyendo un artículo de cocina.

Intenté no querer reír ante su curiosidad, sobre todo la cara que ponía cuando vio el queso estirarse.

ㅡDeja que se enfríe un poco antes de...

Sin terminar lo que iba a decir, Madelyn me sacó el tenedor, llevando un bocado de la comida a su boca, y aquella expresión que acababa de mostrar hizo sintiera algo dentro de mí.

ㅡVaya, ¡esto esta delicioso! ㅡLa veía llena de felicidad mientras seguía comiendo, sin sentir alguna vergüenza estando frente a mí. Bueno, ya tuvo suficiente como para tenerlas de nuevoㅡ. De verdad mereces todas las estrellas, realmente es la mejor lasaña que he probado.

Levantó ambos pulgares en aprobación. Tuve que pasarle una servilleta al ver que tenía un poco de salsa en la comisura de su labio, tratando de contenerme.

Su sonrojo se hizo presente, pero eso no fue algo como para que pudiera agregar nuevamente:

ㅡ¿Cuántas estrellas tienes hasta ahora?

ㅡDos.

ㅡEs muy poco, deberías de tener como unas veinte. ㅡEntrecerró los ojos.

Esta vez no pude evitar soltar una carcajada, a lo que su expresión cambió por completo a una de sorpresa. ¿Veinte? Por favor, Madelyn estaba viviendo en su propio mundo, era como alguien que indagaba muchas cosas hasta fondo cuando su curiosidad empezaba a ocupar todo de ella.

El Sazón de la Moda©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora