El Sazón de la Moda©

Capítulo 31

Madelyn

ㅡ¿Han terminado?

Asentí por décima cuarta vez con el rostro pegado a la almohada, con cero ganas de despegar mi cuerpo de la cama, pese a tener a las dos miradas de mis mejores amigos sobre mí.

ㅡPero sólo llevaban cuatro meses, Madelyn ㅡEmma pellizcó mi pierna, que estuve a punto de lanzarle una patada si volvía a hacerloㅡ. Es más, Matthew y yo pensamos que sólo necesitabas que lo mantuviéramos tranquilo en su fiesta de bienvenida, pero no sabíamos que él iba a ir a buscarte, y bueno, ya sabes tú que sucedió después.

Sí, pasaron sólo algunos meses en el que decidimos intentar llevar una relación de manera oficial, aunque no pensamos que nos llevaría a una situación de la cual ambos estaríamos puestos con la espada contra la pared. No había mucho por hacer, no cuando el destino lo quiso así. Conocerlo en cierta parte para mí fue una de las mejores sensaciones, el generar una atracción luego de bastante tiempo hacia una persona, el poder disfrutar, y que cambiase la rutina de nuestro día a día.

Hemos decidido finalmente poner un fin a algo que a lo mejor duraría si los dos poníamos de nosotros para avanzar en nuestra relación. En cambio, nos quedamos estancados en un sitio imposible de salir de allí, reduciéndose así a proteger al otro más que a nada, sin pensar de que tal vez lo que nos faltaba era comunicación y contar con nuestro apoyo pese a cada adversidad, no sólo guardarse para sí.

El amor puede cegar a cada ser humano, incluso ser capaz de hacer perder la cordura a alguno; pero cuando se pasaba por alto aquello, tarde o temprano iba a acabar de una u otra forma. El actuar por impulsividad, el no ver más allá de los problemas de lo que acarrea estar en una relación podría ser hasta devastador si no poníamos límites a lo malo que se atrevía a cruzar frente a nuestros ojos. No sirve de nada salir con alguien si al final no se trataba de luchar juntos cada contratiempo. El estar con una persona se basaba desde el primer momento una responsabilidad rotunda, siendo varios motivos por el cual ambos debían ser capaces de atravesar y aún así mantenerse al lado del uno al otro pese a la desgracia o felicidad de la vida.

Para mí y Darren resultó ser todo lo contrario: vimos; nos imaginamos una vida juntos, cuando a la larga era más que evidente que no éramos capaces de continuar, no al saber que habitaba en cada uno cierta causa por la cual solucionar y sanar. No quería soltar su mano; pero si él también pensó que esto era lo correcto, ¿quién era yo para refutar aquello? Siendo así el aceptar y ser valiente para dejarlo ir.

ㅡYa déjala, de seguro tiene motivos para finalizar su relación.

ㅡEs que no entiendo ㅡMi amiga sacó un fuerte suspiro, levantándose de la camaㅡ. Hace unos días estaban bien, y ahora esto.

ㅡ¿Puedes dejar de hablar de ello, Emma? ㅡMe incorporé, quedando sentada, aun con las sábanas cubriendo parte de mi cuerpo. La cabeza me pesaba, y ni mencionar las ojeras que se formaron estos días por no poder dormir ya sea por mi situación familiar y por mi relación ya culminada con Darrenㅡ. Simplemente pasó, ¿vale? No hay explicación, no insistas.

Se cruzó de brazo, dando un bufido, ㅡEntonces, ¿lo dejarás ir?

ㅡSí. Sí. Sí. ¡Joder, ya basta con esto! ㅡAgarré una almohada cerca de la cabecera de la cama, y se lo lancé, recibiendo su mirada de indignaciónㅡ. Aunque no lo creas me es difícil hacerlo. Darren me gustó, bueno, lo sigue haciendo, pero esto era lo mejor para nosotros.

Emma abrió la boca para expresar otro descontento, siendo Matthew quien la detuvo, colocando una mano sobre su hombro.

ㅡMadelyn, te lo he dicho miles de veces, y, aun así, nunca me cansaré de repetírtelo ㅡSe acercó hasta donde me encontraba, atrapando una de mis manosㅡ. Toda decisión que elijas, y te sientes bien con ello, yo voy a apoyarte. Mientras no te abrume o te cueste hacerlo, estaré a tu lado para sobrellevarlo, así como tú también lo has hecho durante mi pasado. No hagas caso a Emma, anda muy quisquillosa porque Liam ya no le habla.