Capítulo 44

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Darren

ㅡ"Ahora que has regresado con él, es mejor que lo obligues a pagar lo que me debe" ㅡAndrew vuelve a leer el mensaje que le habían enviado a Madelyn esta mañana. Baja el celular y lo deja al costado del sofáㅡ. De seguro fue la loca de Keira.

ㅡAndrew ㅡLo regañó Liam desde la cocina, asegurándose de preparar su batido de frutas, yogurt y avena, y él le respondió con un encogimiento de hombros.

La noche anterior lo disfruté como nunca antes. Dormir al lado de la mujer que me volvía a sentir enamorado, alguien con el que podía despertar y sonreír por el simple hecho de saber que ella estaba conmigo me hacía feliz.

Después de tantos años, aferrándome a la agonía de que tal vez no podría dejar mis miedos atrás, jamás pensé que cierta felicidad sería capaz de sentirla. Tener a alguien con quien compartir cada parte de ti y, confiar que no te hará daño era lo mejor. Mi vida se tornaba de una manera más agradable. El pasado dolía; pero una vez que lo aprendes a soltar, es cuando te das cuenta de lo cegado que has estado. Aquellos recuerdos que encadenaban toda parte de ti, sin dejar que puedas salir de sus garras, dolía tanto, que, la sensación de ahogo se tornaba cada vez más repulsiva.

Durante esos cinco años en el que me atreví a dejar todo atrás para poder encontrarme a mí mismo, bastó para darme cuenta de lo perdido que estuve desde la última vez que viví con Ian. Alguien que me ayudó a crecer, a mantenerme recto ante mis objetivos y sueños; sin embargo, el haberlo perdido, el saber que ya no volvería a estar en nuestros encuentros de amigos, o que tal vez el escuchar el toque de la puerta de mi habitación para encontrarme con su presencia, nada de eso iba a regresar.

A pesar de ello, sé más que nadie que él estaría orgulloso de mí. El darme un respiro a la ajetreada vida. Descansar un momento de lo que finalmente me agobiaba, ha sido una de las mejores decisiones que tomé. El seguir en medio de un círculo sin salida, en donde sólo me perdía ante una oscuridad llena de miedos. Sé que por más que haya sido mucho tiempo en el que me aferré a eso, estos años quizá no sean suficientes; pero pudieron bastar para mirar a mi alrededor y saber que puedo salir adelante pese a cualquier adversidad.

Tengo a mi familia y mejores amigos, ahora, tengo a una maravillosa mujer que hace unos años atrás pudo mostrarme que estaba dispuesta a darme su amor; no obstante, mientras duró ese lapso de tiempo, tanto ella como yo no podíamos ceder a la confianza necesaria para ofrecer. El sentimiento era mutuo, sí; aun así, tarde o temprano uno de nosotros íbamos a dañar al otro: ella con los problemas de su familia que la consumían más de la cuenta, y yo con la oscuridad con la que debía de ser capaz de superar. Al final, la vida nos premió una vez más con encontrarnos.

Quería tanto a Madelyn, y saber que ella, después de esos años en el que estuvimos separados, se quedaría a mi lado, no necesitaba otra respuesta más que esa. Sé que la vida puede ser dura a veces, pero creo que la felicidad tarde o temprano va a llegar. Es por ello que la quería proteger sin importar qué, y aquel mensaje, hizo que una molestia recorriera todo mi cuerpo. Lo único que deseaba era poder estar bien, en cambio, a alguien no le importaba aquello.

ㅡAunque pudo haber sido un Miller ㅡAndrew levantó la vista de su ordenador portátil para encontrarse con la míaㅡ. Juro que si sé que Jacob está detrás de todo esto, tendré que gastar más de un puñetazo en su cara.

ㅡ¿Por qué todo tiene que ser tan drástico contigo? ㅡsuspiro, Liam, tomando asiento en el sofá. Estiró las piernas luego de haber dejado su batido sobre la mesita. Se lo notaba cansado, y por supuesto que lo estaría, después de haber trasnochado en uno de sus proyectos que quería llevar a cabo que, según él, construiría uno de los mejores edificios de Californiaㅡ. Keira es más probable, la verdad.

El Sazón de la Moda©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora