Ágape ||• Charlos •||

5. Fotos

La carrera había sido emocionante, tuvo bastantes adelantamientos y peleas en pista, pero lo mejor sin duda había sido que Arthur había quedado en p1, era el primer gran premio que ganaba y sabía porque había sido, tenía mucha motivación, sus hermanos estaban ahí, Charles lo había ido a ver y quería hacerlo sentir orgulloso.

Para Charles ver a su hermano celebrar en lo alto del podio fue increíble, la sonrisa que adornaba el rostro del menor era de felicidad pura y el ojiverde se perdió en sus pensamientos, ¿como se sentiría ser así de feliz?

El había cumplido su sueño, su música era escuchada, pero aun así estaba vacía por dentro, su sonrisa nunca había brillado tanto como la de su hermano menor y se vio de pronto añorando eso, esa felicidad.

Charles se quedó ahí hasta que la celebración se terminó, despues observó a Pierre y le pidió irse, no estaba listo para hablar con su familia todavía, las heridas seguian abiertas y temía arruinar todo de nuevo, volver a romperlos.

El francés lo llevó hasta el auto, pero se quedó ahí, iba a explicarle todo a Arthur y de algún modo excusar a Charles.

Justo cuando lo vio irse, Pierre se acercó hasta el garaje de Ferrari, ahí se encontró con los dos Leclerc, quienes lo miraban con duda, ¿por qué su hermano no estaba con él?

— Te vio en el podio Arthur, pero se fue despues de eso. — lo miró con pena. — Lamento no haberlo convencido de venir aqui.

— El aun no puede perdonarnos ¿cierto? Sigue molesto con nosotros. — la tristeza cayó en los ojos de Lorenzo, quien negaba. — Tal vez yo podría hablar con él...

— No está listo Lorenzo, Charles aun tiene muchas culpas en su espalda, no ha podido liberarse. — negó.

— Es nuestra culpa, no lo ayudamos, lo dejamos solo, yo lo dejé solo, soy su hermano mayor, debí haberlo cuidado. — se lamentó. — El no va a perdonarme nunca.

— Lo que pasó no fue culpa de nadie. — suspiró el francés.

— Ese es el maldito problema, ni siquiera sabemos que pasó. — Arthur negó molesto. — No sabemos que le sucedió y por eso no podemos ayudarlo, ¿tu lo sabes? Se honesto Pierre.

— Se que debió ser algo grave, pero el no habla conmigo de eso, no habla con nadie en realidad. — negó. — Tal vez Pascalé... Quizá ella si lo sepa.

— Mamá cree que Charles la odia. — el menor de los tres negó frustrado.

— No es así, solo está avergonzado por todo, por no haber estado presente cuando lo necesitaron, por alejarse tanto tiempo y no saber como regresar aún. — suspiró. — Yo, hablaré con el, lo convenceré de acercarse de nuevo, lo prometo.

Sonrió apenado, dando la vuelta para marcharse.

— Pierre, solo... Cuidalo ¿si? No lo dejes solo. — pidió Lorenzo.

— Lo haré. — asintió, marchándose al fin.

•~•~

— ¿Podemos parar aquí? — Charles pidió a su chofer, quien obedeció, deteniendose en un pequeño mirador.

El monegasco bajó del auto, la brisa fresca lo hizo estremecerse, pero aun así se sentó sobre la banca que estaba ahí, quedándose en silencio, observando el horizonte.

— John. — llamó al hombre. — ¿Si pudieras ir a cualquier lugar del mundo, a donde irías?

El señor se acercó, sentándose en el otro extremo de la banca, sonriendo ante la atenta mirada del joven a su lado.

— Mis hijos están en México, tengo 6 nietos, no conozco a ninguno. — sonrió con nostalgia. — Tengo 20 años desde que vine a trabajar a este país de forma ilegal, gracias al señor Gasly me dieron papeles hace un par de meses, tiene 20 años que no veo a mi esposa y a mis hijos, si pudiera ir a cualquier lugar del mundo, iría a México, volvería a verlos.

— Hace 4 años que no hablo con mi familia y me fui de casa. — le contó Charles. — En realidad solo viví 4 años con ellos, pero yo no fui lo que esperaban, fui grosero, desagradecido y los decepcioné.

— ¿Quien te dijo eso? — preguntó con una suave sonrisa. — ¿Tú padre?

Charles negó, suspirando.

— Yo lo supongo... — murmuró apenado.

— Estoy seguro que no están decepcionados de ti Charles, eres fuerte y valiente, te has enfrentado al mundo tu solo desde hace años, si yo fuera tu padre, estaría muy orgulloso de quien eres. — sonrió. — Estoy seguro que lo está, desde donde quiera que esté.

El monegasco lo miró, con sus ojos brillando, dandole una pequeña sonrisa.

— Cuando regrese a México, puedes ir conmigo, seguro que te encantaría donde vivo. — le sonrió. — Es en una montaña y las vistas son mucho mas hermosas que estas.

— Gracias John. — sonrió, mientras ambos regresaban al auto.

•~•~

Era lunes por la mañana, Charles se había despertado, como siempre, antes de que el sol apareciera.

Se había dado un baño y preparado una especie de desayuno, un jugo natural y fruta con yogurth y granola, para despues ir a la sala y encender el televisor, buscando uno de esos programas de chismes para distraerse.

Aunque claro, jamas pensó que el sería el tema de conversación, estaban hablando de la entrevista que Lando le había hecho, por supuesto solo colocando pequeños fragmentos, unicamente para hablar de él.

Suspiró molesto, ¿enserio estaban leyendo su lenguaje corporal? ¿que demonios? La mujer hablaba y parloteaba sobre si estaba incómodo, cohibido, cualquier cosa, hasta que llegó a la pregunta de si tenia pareja.

“Si pueden observar aquí, cuando el entrevistador le hace la pregunta de si tiene pareja o no, el desvía la mirada y sonríe incómodo, antes de hacer un chiste negandolo. — comenzó a explicar. — Esto en especifico es señal de que está mintiendo, está nervioso y evita mirar a los ojos del entrevistador, mantiene la mirada baja y su entrecejo se arruga delicadamente, señales de evasión.”

— No estoy mintiendo. — reniega Charles.

Suspiró ruidosamente, girando los ojos, pero su semblante cambia al ver las fotos que de pronto aparecen en la pantalla.

“Pues mientras son peras o son manzanas, ayer se le captó muy cómodo, tomando de la mano al tres veces campeón de la formula 1, Carlos Sainz, mientras ambos entraban a su motor-home. — la presentadora sonrió. — ¿Se trata acaso de un romance secreto?”

— ¿Que? Por supuesto que no. — negó rapidamente, había conocido al castaño el dia anterior y esas fotos habían sido sacadas completamente de contexto.

Por supuesto las redes habían explotado con la falsa noticia, mientras sus fanaticos comenzaban a crear teorías y las fotos eran compartidas por miles y miles de personas.

Estaba metido en problemas, unos muy graves en realidad.

¡Gracias por leer!❤

Los amo, besos ✨🏎