Ágape ||• Charlos •||

21. Pierre y George.

Unos insistentes toques en la puerta interrumpieron el sueño del español, quien se incorporó rápidamente, con un poco de confusión, ¿en que momento de la noche se había dormido?

Observó a Charles aun recostado, abrazando su abdomen, mientras su respiración era pausada y tranquila, como desearía que estuviera así de relajado siempre, sin nadie que lo molestara.

Pero la puerta seguía sonando y Charles despertó, tomándose algunos segundos para adaptar su mente, el tampoco sabía cuando se había quedado dormido y en realidad estaba sorprendido con eso, desde lo de Mark, no podía dormir sabiendo que había alguien mas con el, pues temia que le hicieran daño de nuevo.

— Lo siento. — murmuró, retirando su brazo del abdomen del mayor.

— No puedo creer lo hermoso que luces al despertar. — le sonrió Carlos, demostrándole que nada iba a cambiar entre ambos, robándole una sonrisa con ello.

Carlos se levantó de la cama al notar que los golpes en la puerta no cesaban, yendo a abrir y siendo casi derribado por un remolino de ojos azules, junto a su acompañante de ojos verdes.

— ¿Que haces aquí? ¿Donde está Charles? — preguntó el de ojos verdes a la defensiva.

— Está en la habitación. — se limitó a responder.

Fue ignorado después de eso, pues ambos hombres se dirigieron a la habitación, encontrándose con Charles saliendo del baño.

— Oh Char, ¿como estas? Estaba muy preocupado, no respondiste mis llamadas y ambos vimos lo que pasó anoche. — Pierre lo abrazó, apretándolo con fuerza.

George por el contrario fijo su vista en el labio roto del menor, sintiendo la ira subir por su sistema.

— ¿Te lo hizo ese imbécil? — preguntó, visiblemente enfadado, señalando su labio.

Charles se sintió agobiado por un segundo, conocía a George, iba a romperle la cara a Mark si se lo decía, pero tampoco podía ocultarlo, así que solo asintió.

— Lo voy a matar, lo haré Pierre, le advertí que no podía volver a acercarse. — soltó molesto, concentrándose en el monegasco. — ¿Te hizo algo mas? Dime, ¿te golpeó?

— No George, estoy bien. — negó el menor, dándole una pequeña sonrisa.

— Mira como te dejó. — murmuró apenado. — Debería golpearlo hasta que muera por esto.

— Irías a la cárcel. — sonrió el menor, tratando de aligerar el ambiente.

— A veces podemos sacrificarnos por un bien mayor Char. — le devolvió la sonrisa.

Carlos sonrió también al ver la interacción entre los tres, se notaba que ellos se preocupaban por el y Charles no les temía, le gustaba eso.

— ¿Tu eres Carlos cierto? — el francés se acercó a el. — Hola, mucho gusto, soy Pierre y el es George.

— Un placer. — sonrió hacia ambos, estrechando sus manos.

— Lamento lo de la entrada, estaba preocupado. — George se disculpó.

— Lo entiendo. — Carlos asintió hacia el, podía comprenderlo perfectamente, no sabía cuanto habían grabado las cámaras, pero para ellos debía ser una completa alerta que Mark se acercara a Charles.

— Sebastian llamó a Fernando, Mark violó la orden de restricción, ese tipo va a ir a la cárcel. — le informó George. — No volverá a molestarte, Fer va a tratar de hundirlo lo mas que se pueda, por suerte hay pruebas de la agresión hacia ti, va a estar encerrado un buen tiempo.

— ¿Que tanto grabaron las cámaras? — preguntó tímido.

— Todo. — Pierre respondió con pena. — Pero no te preocupes, tienes el apoyo de muchas personas, tus fanáticos hicieron sus propias conclusiones con las estupideces que Mark dijo, así que la comunidad entera está mostrando su apoyo hacia ti.

— ¿Conclusiones? — preguntó aun mas apenado.

— Si, ahora todos saben que el ejerció abuso sobre ti, lo dijo el mismo. — hizo una mueca. — Lo siento Charles, se que querías mantener todo en secreto...

— No es tu culpa Pierre, el lo gritó frente a todo el mundo, quería humillarme. — cerró los ojos avergonzado.

— Haremos un comunicado sobre esa situación, aclarando todo lo que dijo, Charles, el habló de unas cicatrices... Las personas comienzan a hacer teorías respecto a que nunca te quitas la camisa. — suspiró.

— No quiero hablar de eso Pierre. — negó el menor.

— Y no tienes que hacerlo, llamaré a Lando, veremos que puede hacer el para distraer a todos. — le sonrió. — ¿Quieres ir al doctor? Tu labio se ve un poco feo.

— Estoy bien, solo es un labio roto. — se encogió de hombros, había pasado por cosas peores y nunca había ido al doctor, eso era un detalle pequeño.

— ¿Ya desayunaste? ¿Cenaste anoche? — el francés insistía.

— Pierre, pareces Pascalé, ya basta, estoy bien. — Charles rio, frunciendo un poco la nariz. — Acabo de despertar, pensabamos desayunar antes de volver.

El monegasco dirigió su mirada hasta Carlos, quien asentía con una suave sonrisa.

— ¿No tendrás problemas por lo que sucedió anoche? — Pierre dirigió su atención a él. — No nos gustaría que recibieras algún tipo de sanción por ello.

— Está bien. — Carlos asintió, aunque sabía que era muy probable que así fuera, después de todo era un escándalo de dominio público y lo habían grabado golpeando como una bestia a Mark, definitivamente no iba a gustarle al equipo.

— Si necesitas algo, no dudes en pedirlo. — le sonrió el francés, volteando nuevamente hacia Charles. — George y yo vamos a ir a desayunar, no los molestamos mas, ah, y llamaré a Lorenzo, el está muy preocupado por ti y no me importa si no quieres que lo haga, es tu hermano mayor y tiene derecho a saber que estas bien.

— Pierre. — el menor giró los ojos.

— El vuelo es a las 12, debes estar listo ¿si? — siguió dando indicaciones, mientras George tomaba su mano para sacarlo de la habitación. — 7 grammys en una noche, es fantástico, mi chico es muy talentoso.

— Nuestro chico. — George corrigió, soltando una risita. — Te vemos a las 12 Char, no lo olvides.

— Lo siento. — el monegasco se disculpó cuando ambos salieron, dandole una pequeña sonrisa.

— He escuchado mas de mil veces esa frase salir de tu boca angel y ninguna ha sido tu culpa. — rio el mayor. — Dame un segundo y te invito a desayunar, tu escoge el lugar.

— Aun me debes helados de celebración. — Charles señaló, hablando fuerte mientras Carlos entraba al baño.

— Cierto, te los pagaré en Florida. — le sonrió. — Y tambien quiero presentarte a alguien allá.

— ¿Alguien? — preguntó con duda, no era bueno conociendo personas nuevas.

— Si, un viejo amigo. — sonrió, mirándolo a los ojos, estaba decidido, iba a ayudarlo a sanar, sin importar cuanto lo odiara y le gritara en el proceso.

¡Gracias por leer!❤

Los amo, besos ✨

Haciendo un paréntesis aquí, si notan que Charles de cierto modo justifica a sus agresores, el en realidad cree que todo es su culpa, cree que es el único responsable por todo lo que le ha sucedido
Eso lo incluí, porque bueno, es que leí mucho sobre este tema y descubrí que ese es uno de los principales síntomas de alguien que fue abusado toda su vida, no saben como manejar las emociones y creen que todo los que les pasa es “porque ellos se lo buscaron”.