41. Possibility.

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— Apuesto que tu estarías mejor sin mi también, no estarías encerrado en esta enorme y vacía casa. — murmuró, acariciando la cabeza del perro. — Tal vez serías un buen compañero para el futuro hijo de Pierre y George, ellos te cuidarían bien, si, ellos lo harían mejor que yo, espero que Carlos permita que estes con ellos algunas veces.

Terminó la botella, levantándose para ir nuevamente adentro de la casa, yendo directamente al baño, dejando caer el chorro de agua fría sobre su cabeza, en un intento en vano de alejar las ideas de su mente.

Aunque consiguió lo contrario, las ideas se afianzaron mas en su cabeza, tanto así que cuando salió del baño, fue directo a su escritorio, sacando su tan preciado cuaderno.

Sonriendo al leer todo lo que tenía en él, las canciones que había escrito para Carlos, lo que había escrito para su padre, lo que escribió para George y Pierre, aquella vez que lo salvaron, ese cuaderno era su historia, lo que había escrito para el mundo.

Y merecía un ultimo escrito, la despedida de un sueño amargo, el adiós.

Tomó un lapicero de su escritorio y se acercó hasta la ventana, estaba atardeciendo, era la vista mas bonita que había tenido en mucho tiempo, era la primera vez en un mes y medio que se percataba del paisaje.

— Es tan bonito como tu sonrisa. — murmuró al aire, pensando sólo en Carlos.

Sonrió, después de mucho tiempo, comenzando a escribir.

“Yo, Charles Leclerc, plenamente consciente de mis facultades mentales y físicas, quiero dejar escrito que todos mis bienes y cuentas bancarias, a excepción de las casas ubicadas en Florida y Mónaco, pasaran a manos de el o la primogenita del matrimonio Gasly-Russell.

La casa ubicada en Florida, pasará a manos de Carlos Sainz Vazquez de Castro, así como también las regalías de todas mis canciones, incluso las no publicadas.

La propiedad ubicada en Mónaco pasará a manos de Pascalé y mis hermanos, Lorenzo, Arthur y Amelie”.

Tomó su teléfono, llamando a Fernando.

— Hola Fer. — saludó.

— Hey Char, ¿como está mi cliente favorito? — escuchó la voz del español tras la línea.

— Bien, muy bien, en realidad llamaba para darte conocimiento de una situación. — soltó una suave risa. — Estoy planeando unas vacaciones, algo largas, pero antes quería hacer unos ajustes en mi testamento.

— Charles tienes 22 años, no deberías estar haciendo un testamento. — rio, haciéndolo reír también.

— Lo se, solo es precaución. — mintió. — Te lo enviaré por escrito, solo llamaba para que no te preocuparas al verlo llegar.

— Entiendo.

— Bien, te veré luego, adiós Fer.

— Cuidate Char y llamamé si necesitas algo.

Colgó después de eso, centrando su atención en el cuaderno frente a el, dando vuelta a la pagina antes de volver a escribir.

“Hola a todos, soy yo, Charles.

Me siento extraño al escribir esto para ustedes, pero es necesario, debo disculparme.

Fui tonto, grosero y cruel, ustedes no lo merecían, nada de lo que dije.

Pierre, nunca voy a olvidar que tu fuiste de los primeros en confiar en mi talento, me abriste miles de puertas y cuidaste de mi en todo momento, se que nunca lo dije, pero realmente te quiero, eres como un hermano mayor para mi, siempre supe que podía confiar en ti para cualquier cosa, nunca me defraudaste.

Ágape ||• Charlos •|| Donde viven las historias. Descúbrelo ahora