Ágape ||• Charlos •||

57. Mi buen amor.

Nota: Dejé una canción en multimedia, recomiendo que la pongan para la lectura, así tal vez podamos comprender mas a Carlos :)

Regresó a la sala, encontrándose con el monegasco mirando el ventanal de su casa, tal y como esa noche, como aquella primera noche en que lo descubrió.

Lentamente se acercó hasta llegar a su lado, observando el bosque y el lago frente a ambos, agudizando mas sus nervios.

— ¿Es curioso no? — Charles sonrió, volteando su mirada hacia el. — La primera vez que me besaste fue aquí, en esta casa, y yo estaba tan asustado, cuando ese vaso resbaló de mis manos, que te temí, temí que pudieses lastimarme, temí que me hicieras daño...

Hizo una pausa, acortando aun mas la distancia entre ambos.

— Y fui yo quien te lastimó... — llevó su mano hasta su rostro, acariciándolo con delicadeza. — Lamento tanto haberte lastimado amour, pero siempre supe que ocurriría, algo dentro de mi siempre lo supo, sabía que terminaría por hacerte daño, porque era la única forma de amor que conocía, aunque no pensé que te dañaría más al irme.

— ¿Por qué volviste? ¿Por qué ahora? — preguntó directamente, sintiendo como su corazón se aceleraba con su toque, lo odiaba, odiaba que tuviese ese efecto en el, odiaba sentir su piel calentarse ante sus caricias. — ¿Que quieres de mi Charles?

— Te quiero a ti, te amo a ti, pero se que es egoísta volver así como si nada hubiese pasado, como si no me hubiese ido. — suspiró, alejandose solo un poco, dándole el espacio que necesitaba. — No quiero estar lejos de ti, pero tampoco quiero estar cerca si mi presencia te lastima, yo solo quiero que tu seas feliz...

— No es justo, no es justo que me hagas esto ahora mismo, no después de todo lo que pasé. — soltó las lágrimas que tenía contenidas. — No me merezco que sigas jugando con mis sentimientos.

— No espero que me perdones amour, se lo que hice, se cuan mal estuvo, pero tampoco quiero resignarme a perderte para siempre, no cuando tu aun me amas y yo te amo mas que nunca. — tomó su rostro nuevamente, limpiando las lágrimas. — Se que no estas listo para que yo vuelva a tu vida, pero te prometo que no soy la misma persona, yo ya no soy él, yo no voy a lastimarte otra vez, solo necesito una oportunidad, una última oportunidad, solo esta noche y mañana puedo irme si así lo quieres o podemos ser solo amigos, solo... Solo quiero intentarlo.

— ¿Amigos? No puedo creer que me pidas eso Charles, no después de todo lo que pasamos, de todo el amor, de las terapias, de todo lo que compartimos. — lloró aun más. — ¿En realidad estás diciendome eso? ¿Realmente nos ves como solo amigos?

— Prefiero eso antes que nada, tal vez es un pensamiento egoísta, pero es mi sentir. — tomó sus manos. — Te amo Carlos, yo solo quiero hacer las cosas bien esta vez...

— ¿Como vas a desaparecer todos los problemas que nos rodean? — preguntó entre lágrimas. — ¿Como lograras que vuelva a confiar en ti? Porque ya no lo hago, te amo mas que a mi vida, pero rompiste mi corazón y te llevaste las partes contigo.

— Desapareceré el pasado por ti, amour, yo estoy listo para ti, al fin, estoy listo para que seamos felices juntos. — secó lentamente el rastro de lágrimas, besando sus mejillas con dulzura. — Curaré tu corazón, aliviaré todo el dolor y te prometo que ya no habrá mas días nublados, solo habrá sol, atardeceres hermosos, así como tu lo eres para mi, mi bello amanecer, solo seremos tu y yo...

El español rompió a llorar aun más, permitiéndose ser débil y abrazándose a el, no podía evitarlo, era Charles, su gran amor, su único amor.

— No podemos ser solo tu y yo, Mar y Oli
estarán conmigo siempre, son mis bebés. — recordó.

— Lo se, son nuestros bebés. — sonrió. — Además, te volverías loco tu solo con Mar, ella es mi chica, yo la nombré.

El español titubeo un poco, tal vez no era momento de dejar a su corazón decidir, podía equivocarse de nuevo, podía salir lastimado otra vez y tal vez ya no podría soportarlo, porque perder a Charles había sido devastador, pero perderlo por segunda vez, eso lo llevaría a la muerte.

— Solo esta noche, puedo irme al amanecer. — murmuró en voz baja, invadiendo su espacio personal, apenas rozando sus labios.

— No quiero que te vayas al amanecer, no quiero que vuelvas a irte jamás. — subió sus manos hasta el rostro del monegasco. — Prometeme que no volverás a hacerlo, promete que no vas a abandonarme de nuevo.

— Te prometería el mundo entero si me lo pidieras amour. — asintió, robándole un pequeño beso. — No voy a irme, no voy a volver a huir, yo estaré contigo por el resto de mi vida, no es una promesa, es un juramento.

El español asintió, dejándose envolver por el aura romántica de la situación, dejándose envolver por el, por sus dulces palabras, por su amor.

— Te amo ángel. — lo miró con completa dulzura y adoración, acariciando su rostro.

— Te amo mucho mas mi rayo de luz. — se acercó lentamente hasta sus labios de nuevo, permitiéndose tomar la atribución de besarlo otra vez, pero ahors de forma dulce y apasionada, suave y tranquila, sin prisas, solo disfrutando del contacto.

— Yo te amé primero. — sonrió al separarse, juntando sus frentes.

— Y yo te amaré hasta el final.

~• Fin •~

¡Gracias por leer!❤

Los super amooooo✨🫶🏻

Y espero verlos en mis otras historias ;)

Ah por cierto, hay epilogo y respuestas sobre todas las dudas que dejen en este apartado :)

Ágape fue mi bebé, se llevó mi corazón, así que espero que les haya gustado tanto como a mi me gustó escribirla.