Sin duda, aquel viaje estaba siendo de lo más extraño. Seguíamos de pie enfrente a aquella mujer que parecía saber mucho más de lo que aparentaba. Ya que habíamos llegado hasta aquí, no íbamos a marcharnos sin saber la realidad de lo que estaba ocurriendo.
— Por lo que veo, hay muchas cosas que no sabes - hizo un pausa leve - Mira, sé que todo esto puede resultar una locura, pero tiene una explicación. Yo puedo dártela. ¿Vas a confiar en mí lo suficiente? - una sonrisa sincera se formó en su rostro.
— Me prometí salir de aquí con respuestas y no pienso largarme sin ellas - asentí firmemente, aunque seguía desconfiando.
— Bien - nos indicó que podíamos sentarnos ya que, al parecer, iba para largo - Corría el año 1973. Nací en el seno de una familia bastante conservadora y cuyas normas eran muy estrictas. Debía cumplir con mi objetivo de acudir a las misas que se organizaban cada viernes. La religión que profesaba mi familia era poco común y tenía un nombre de lo más extraño. Años después nacieron mis dos hermanas, Ava y Dafne, y mi madre acabó falleciendo tiempo después tras una larga enfermedad. En la comunidad a la que pertenecíamos, siempre justificaron que su muerte no fue en vano, sino que fue producto de un castigo divino. Algunos eran capaces de llamarla ramera y yo, con a penas 7 años, no podía escuchar hablar a otros así de mi madre. La comunidad era muy amplia: había gente venida de todos lados y yo siempre había sospechado del origen real de Ava. A pesar de ser hermanas, era la más diferente de las tres. Empecé a sospechar de mi padre, quien llegaba tarde alegando que había estado ocupándose de limpiar el bar antes de cerrar. Así que decidí seguirle varias noches para salir de dudas. Él, en cambio, jamás sospechó que yo estuviera siguiéndole, pues continuaba con sus visitas habituales a Filippa, la mujer que regentaba el hostal del pueblo y que también pertenecía a la comunidad. Cuando observaba a aquella vistosa dama, de cabello rojizo como el fuego, de tez oscura y ojos verdes, sabía que era idéntica a Ava - tomó aire y prosiguió - Años antes del fallecimiento de mi madre y cuando él no estaba en casa, la escuchaba sollozar en su habitación mientras se encontraba a solas. Ella siempre lo supo pero, aún así, nunca se lo echó en cara, porque sabía que eso hubiera supuesto el divorcio de ambos y mi padre nos hubiera echado de casa quitándonos todo. No teníamos a donde ir y necesitábamos seguir aprovechándonos de él, de algún modo.
— Pero hay algo que no acabo de entender - estaba muy confusa por estos datos que acababa de darnos - Dices que sois tres. Entonces, ¿cuál es la relación entre ellas?
— ¿Te refieres a Dafne y Ava? - sabía exactamente a qué me estaba refiriendo - Digamos que, cuando la comunidad se enteró de que existía una relación amorosa entre ambas hermanas, las expulsaron directamente. El incesto está mal visto en esta sociedad y, de hecho, es un pecado. A pesar de todo, trataban de ser discretas y, tiempo después de demostrar ante un tribunal supremo de nuestra orden que lo suyo se había acabado, fueron readmitidas. Pero, como norma número uno de la comunidad, todo error tenía sus consecuencias. Todo cambio traía consigo un precio a pagar por ello. Si realmente era cierto ese cambio, debían hacer lo imposible por demostrar que era así.
— ¿Que ocurrió entre ellas? ¿Dafne jamás se cuestionó que realmente Ava era producto de una infidelidad? - pregunté suspicaz.
— Siempre había creído que no se había dado cuenta pero, en realidad, tenía sus propias formas de enterarse de las cosas. Ella, a diferencia de mí, era más impulsiva. Necesitaba usar el engaño y la manipulación para llegar a la misma solución que yo.
— ¿Encontró algo de valor cuando ambas tenían sus encuentros privados? - preguntó Jungkook.
— Desde el principio supo algo que yo no. Nos habían tratado de convencer de que la comunidad era un lugar apacible y magnífico, donde todos trabajábamos unidos. El hecho es que, eso, estaba muy alejado de la realidad, pues estábamos siendo usadas con fines poco éticos. Por ese motivo, cuando me enteré del funcionamiento de todo y descubrí que estábamos dentro de una secta, decidí que debía huir de allí. Dafne siempre me alentó a quedarme, pero supe que lo mejor era poner tierra de por medio y empezar una nueva vida lejos de aquel infierno - parecía visiblemente emocionada.
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Cuando la luz te encuentre
FanfictionLo que parecía normal realmente no lo era y no fue hasta los 18 que pude descubrir que vivía en una completa mentira. Todo aquello que creí real era fruto únicamente de mi imaginación. Sin darme cuenta, mis decisiones no eran cosa mía sino de esos q...