MASTERMIND [Harry Potter]

Una Traidora Siendo Traicionada

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❝ Porque hay un lado de ti que nunca conocí. Todas las cosas que me decías nunca fueron ciertas y en los juegos que jugabas, tu siempre ganarías❞

La guerra había terminado para los que pensaban que Voldemort finalmente estaba muerto y no iba a regresar.

Pero no era así mientras Rhaella siguiera con vida y oculta en algún lugar.

Estaba en busca y captura por todo el mundo mágico y muggle también.

Medusa le había quitado la varita de sauco a Harry de las manos cuando este pensó que ella se estaba redimiendo, no fue mas que una mentira, otra mas.

Los había engañado nuevamente.

Cientos de serpientes habían aparecido de la nada, por medio de magia muy oscura desde luego y rápidamente se lanzaron a atacar a los magos que estaban alrededor de Harry o simplemente a asfixiarlos para desmayarlos.

El azabache había sido envuelto por los cuerpos de estas tomándole por sorpresa hasta que le quitaron ambas varitas, luego noto que una de ellas le dio la de sauco a Rhaella, para después esta desaparecer y con ella las serpientes se fueron dejando un humo negro tras ellas. Se había ido sin mas y nadie sabia donde estaba.

Había transcurrido un mes y todos armaban un plan para derrotar a Rhaella, o para encontrarla, no debían permitir que Voldemort regresara y debían asesinarla.

La varita de sauco era un peligro en manos de una bruja como Rhaella, una que era sádica, cruel, mentirosa y traicionera.

— Es inútil, no hay rastro de ella — soltó Regulus  en tono cansado —.. como si la tierra se la hubiera tragado.

— No puedo creer que se haya escapado con mas 20 magos rodeándola — soltó Harry con la ira teñir su voz.

— Es lo que pasa con ella, la subestiman y le creen — señalo Draco —.. y piensan que se volvió buena, pero nunca va a serlo. Siempre va ser una traidora y aun no nos queda claro.

— Es astuta, eso es lo que pasa — señaló Regulus — Ni siquiera los elfos la han podido encontrar.

— Y no lo harán porque tiene la varita de sauco y ha utilizado magia muy oscura — les recordó Harry — Estoy harto de ella, solo deseo asesinarla, no debi confiar en que se había redimido.

— Solo nos queda una opción y es el giratiempo — propuso Regulus, iba a continuar hablando pero en eso escucharon como Hermione llegaba.