Pottervigilancia

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Lia lo miro confundida, no entendió a la que se refería hasta que este dejó su arma a un lado, no parecía feliz ni enojado sólo extrañamente seguro de lo que hacía.

-No... -susurró Lia negándose a disparar tanto que dejó su arma a un lado- es...
-Hazlo antes de que me arrepienta

Lia no iba a hacerlo y Regulus no iba a arrepentirse ya lo había decidido, pero aún así debía decirlo para que ella actuara ya.
A regañadientes se levantó de la butaca junto a su arma, mirándolo nerviosa, se sentía peor que cuando disparaba las flechas de la ballesta aunque Regulus estaba parado frente a ella con suma tranquilidad esperando impaciente por el disparo casi mirando mal a Lia por no disparar.

-Mmhm -decía dudosa cuando sin esperarlo este se acercó y hizo que apretara el gatillo de la arma- ¡Ah!
-Una menos -dijo este apretando los labios aguantando el momento del láser que por lo menos para él pasaba más rápido siendo apenas unos segundos de dolor- bien, continúa
-¿Qué? -dijo Lia consternada dejando su arma en la butaca con suma rapidez

Regulus suspiro arto y fue a la butaca tomando su arma y sin ni una pizca de indecisión o miedo se disparo a sí mismo, Lia lo observo consternada, camino hacia la entrada de afuera y pegó su oído a la puerta esperando oír al señor del local pero no oyó nada, al parecer se había marchado, otros veinte puntos se sumaron a su cuenta entonces supo que ya solo faltaban cuatro tiros para terminar el juego, otro disparo más y entonces al fin Regulus tomó un descanso sentándose en el sofá, Lia se apoyo en la pared a un lado de la butaca, observaba sus pies los cuales movía con nerviosismo sin saber que decir.

-¿Puedes con dos? -preguntó sentándose a su lado
-Tres y sí, sólo necesito unos minutos esta cosa adormece el... -no dijo nada más pues miró a Lia como sí estuviese loca, se había disparada sin decir nada, se reclinó en la pared fingiendo estar bien entonces sí comprendió a lo que Regulus se refería con adormecer sólo que a ella le había pasado con su segundo tiro y claro era como hacer horas de ejercicio y como su cuerpo no estaba nada acostumbrado lo sentía el triple- ¿Estas bien?
-Uhmjum -asintió cerrando sus ojos con fuerza

Lia le tiro los últimos dos tiros pues el hecho de que Regulus se tirara así mismo entorpecía el punto donde debía caer y dónde a él le dolía menos. No le fue fácil pero se reconfortó con la idea de que hacer eso le facilitaba todo a él, cayó en la butaca cansada al igual que él en cuanto se abrió la puerta, o la cerradura que los tenía presos. Salieron varios minutos después y aún así no encontraron al señor que debía atenderlos, sólo la cámara de seguridad vigilando su mostrador, dejaron las pulseras, chalecos y armas ahí y sin más salieron.

Ya era de noche, el auto aún seguía afuera por lo que entraron pero más que claro era que no podrían manejar en ese estado lo que más querían ambos era dormir o por lo menos descansar.

-No... sólo buscaré unos segundos... -decía Lia que recostada en su sofá movía las manecitas de la radio- McGonagall -dijo pero realmente no confiaba en que esa fuera la clave

Continuó unas pares de veces más, Regulus estaba apoyado en la mesa del comedor tomando su bebida con calma, Lia casi se dio por vencida cuando el "Black" que dijo funcionó abriendo una línea en la que por ahora no se oía nada pero había entrado a la línea, lo que quería decir que había pottervigilancia.

-Ah, si es Black...
-¿Le tienen mucho cariño a Sirius no? -preguntó Regulus observándola por unos segundos pues al rato llegó la mariposa entreteniéndolo
-Si, si es muy querido

Ahora era tiempo de oír lo que pasaba, no lo quería hacer antes porque sabía que se sentiría mal, eso le mostraría el tiempo que corría, las noticias malas, pero ahora más que nunca necesitaba oírlos, quería saber si su padre estaba herido, bien o mal lo que sea.

Inefable - SerendipiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora