Armas, esa era mi cancha, bueno... nada era mi cancha cuando me ponía nerviosa pero las armas muggles se me daban mejor que otras hasta con un poco de presión y vergüenza, la debida, había hecho ya dos prácticas y las había ganado las dos con mucha ventaja, bueno no MUCHA pero si un poco, Regulus no eran tan malo con las armas como creía el mismo, yo por otro lado nunca subestimó a nadie y es por eso que gane. Primero estaba la puntería con las dagas, yo di todas en el blanco, nada de halagos, soy una persona humilde. Ah, claro que Regulus dio unas cercanas al blanco, más que todo las últimas pues iba mejorando cada vez más, nada fuera de lo común, era muy bueno en lo que se proponía a serlo. Seguimos con las espadas en duelos, no fue sin la funda, era muy peligroso así yo fuera una experta, tratar con novatos era ser más cuidadosa por eso el uso de la funda, aparte yo habría recibido dos tajos en los pies y uno en la cintura, pero Regulus habría sido degollado así que ambos nos salvamos de muchas desgracias.
—Es absurdo —dijo el reusándose a lanzar una daga
—Vamos, se puede hacer hasta con los ojos cerrados —dije tratando de retarlo pero no fue así, en cambio elevó las cejas como diciendo "¿A sí?"
—Pruébalo —me trato de dar la daga pero me negué
—Es de mala suerte eso, y no
—¿Por qué? ¿No le darás? —sonrió maliciosamente
—Si le daría —mentí fingiendo gran seguridad y hasta burla de que se atreviera a decir eso— pero no me toca a mí, podrías llegar mínimamente un poco cerca del punto blanco y...Me detuve pues se puso en frente muy concentrado mirando al árbol y el punto blanco, realmente estaba concentrado se le notaba, dio un paso atrás y lanzó la daga dando cerca al blanco.
—Cerca al blanco, vas
—Okey —acepté yendo al árbol a tomar mi daga, en cuanto volví y me puse en posición de tiro, este me freno
—A ciegas ¿No recuerdas? —preguntó con un poco de sarcasmo, respire profundamente tratando de no mirarlo mal aunque es probable que lo hiciera
—Bien —acepte disimulando mis nerviosEste colocó su varita sobre mí, entonces sentí un pañuelo sobre mis ojos impidiéndome ver, trate de agarrarlo para saber dónde posicionarme pero pude sentir perfectamente como este se alejó, solo para que no tuviera un punto de referencia, iba a cambiar mi punto blanco de no ser porque la daga no tenía funda, trate de guiarme por su alejamiento y mi posición, me preparé lanzando como pude la daga esperando que diera en el blanco, no escuché ningúna risita o regocijo de burla por lo que rápidamente me quite el pañuelo pensando que había dado en otro blanco, Regulus, lo busqué rápidamente con la mirada y fue ahí cuando vi que estaba vivo observando el árbol algo insatisfecho y internamente sorprendido, giré con velocidad a ver el árbol viendo como mi daga tocaba el punto blanco apenas pero lo tocaba, volteé con emoción y reí sorprendida de mí misma.
—¡Viste! ¡A qué si se puede! —dije para luego reír de emoción viendo mi daga y el árbol— Ves —agregué yendo hacia él aún sonriendo por mi triunfo masivo— y aún no crees en mí —agregué dejando la sonrisa no porque lo regañara solo le confesaba un poquito desilusionada el hecho lamentable de que no creyera en mí y no por lo de la daga
—Si creo —murmuró apenas y no dije nada no quería que lo negara o simplemente no dije más por qué lo estaba mirando muy centrada repitiendo esas palabras— aceptare —dijo y no hubo más palabras por unos segundos
—¿Eh? —apenas susurre confundida
—Lo del Patronus —explicó mirando al lado no sé si al árbol o otra cosa, yo no le quite la vista aún estaba confundida con lo que había dicho
—No...
—¿Ya no quieres... —preguntó girando y mirándome confundido algo temeroso de la respuesta por lo que intervine sin siquiera darme cuenta
—No —respondí rápidamente pero creo que no se entendió a lo que me refería— no de no..., este..., digo, sí, sí quiero pero... no, no creo que... no es... —suspire nerviosa por las trabas que estaba teniendo— ah...
—¿Crees que no debo aceptar por lo que dijiste? —preguntó en un intento de ayuda y asentí
—No me molestare o... no tendré rencor por eso, nunca lo tuve en realidad... —murmuré lo último y este sonrió
—Entonces... sí aún así quiero... tal vez... y... claro sólo si tú... pero... a menos... —no terminaba las oraciones a propósito cosa que hizo que riera, dentro de todo si lo había entendido, aunque le di un golpe en su brazo justo por eso, no era justo que imitara mis "No términos" y se saliera con la suya
—Sí y lo último —dije señalándolo acusadoramente
—¡Oh! ¡Si no dije nada!
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Inefable - Serendipia
Teen Fiction¿Qué pasaría si Regulus Black no estuviera muerto como aparentemente se creía? Petrificado en la cueva por 18 años hasta la llegada de la hija de su hermano, Lia Black. ¿Dos Black's juntos? Imposible... "En todas las realidades, universos, lo que se...