Los Hilos del Dragón

Cap XXIX

Legítimo Targaryen

Dos días pasaron, todos en la Fortaleza Roja estaban muy ocupados y emocionados por la boda entre en la Princesa Rhaegan Targaryen y el Príncipe Aemond Targaryen.

En las profundidades del Palacio, en las zonas esta más oscuras estaba Rhys, quien escoltaba a los cuatro Targaryen, pero uno de ellos estaba un tanto incómodo por los largas y poco luminosos escaleras que parecía no tener fin.

Aegon Targaryen-- ¿A dónde nos llevas?... Esto está como que muy oscurito ¿No?. Dijo agarraba la mano de su hermana Helaena.

Aemond y Daeron trataban de contener sus risas por el como se estaba comportando su hermano, mientras que Helaena solo apretaba su agarre para que se sintiera más seguro.

Rhys Taylor-- No se preocupe mi Príncipe, que solo estoy cumpliendo con las ordenes de su Majestad.

Los hermanos se miraban entre sí, la poca luz que tenían era la antorcha que cargaba el caballero, jamás habían estado por esas partes de la Fortaleza Roja o más bien, nunca supieron que tal lugar existía.

Al llegar al lugar, los hijos de la Reina Alicent lograron ver a su hermano mayor gracias a la chimenea que estaba delante de ella, la platinada volteó para poder mirar a los ojos de sus hermanos menores y los miraba muy seria.

Rhaegan I Targaryen-- ¿Cuándo me iban a contar que Aegon tiene un hijo?.

Todos quedaron paralizados, ellos sabían que no podían olcutarle nada, pero no sabían que ella sabía cosas a ese nivel a excepción de Aemond desde su última conversación.

Aegon Targaryen-- ¿Cómo sabes de Gaemon, hermana?. Preguntó muy nervioso.

Rhaegan I Targaryen-- Nosotros somos Shadow Dragons.

Shadow Dragons-- Asechamos en las sombras, cazamos en las sombras.

Los hermanos quedaron estupefactos con lo que estaba pasando, además de que no sabían que había más gente en esa Sala, jamás se dieron cuenta de que había varios hombres alrededor de ellos, era como si estuvieran ahí para evitar que pasara algo malo o deshacerse de alguien.

Daeron Targaryen-- Había escuchado de Shadow Dragons, pero no sabía que estabas involucrada, hermana. Dijo nervioso.

Rhaegan I Targaryen-- Yo fundé Shadow Dragons, lo hice cuando tenía cinco años.. Ahora contesten mi pregunta.

Los cuatro hermanos Targaryen se miraban entre sí, pero el más nervioso era el Primer Príncipe quién en parte estaba muy avergonzado, el simple hecho de que tenía un hijo con alguien de las Calles de la Seda no era digno de un Príncipe y lo que lo avergonzaba más era de que la persona que considera su madre se hubiera enterado.

La mayor de los Targaryen lo miraba y entendió las cosas, había llegado la hora de decirle la verdad de una vez por todas, pero no sabía cómo.

Rhaegan I Targaryen-- Yo no me iba a enojar Aegon, no soy como Alicent, de hecho iba a estar muy feliz por tener un nuevo sobrino. Dijo sonriendo.

Aegon Targaryen-- Pero él es un bastardo. Dijo con ojos cristalizados.

Rhaegan I Targaryen-- Pero lo amas porque después de todo, es tu hijo, y sé que Helaena lo entiende. Dijo acariciando el cabello de su hermano.

Aegon miró a su hermanita, quien ya lo estaba mirando con una hermosa sonrisa como señal de que ella realmente lo entendía.

Rhaegan I Targaryen-- Crees que no se como ustedes se miran, niños enamorados.. En cuanto a la legítimidad de Gaemon no te preocupes.