El trabajo estaba demandando demasiado tiempo y durante varios días me mantuve alejado de casi todo, empezaba a entender el ritmo del bufete y hasta a disfrutarlo, claramente no hacia el trabajo de los profesionales, pero me estaba sintiendo muy cómodo.La secretaria, Alicia, continuaba acercándose cada vez que yo aparecía por allí, y su sonrisa se hacía cada día más amena y casi automática al verme.
Se sentía bien aquello de recibir atención femenina, extrañaba muchísimo el contacto y ni hablar de la intimidad, pero mi decisión se mantendrá firme, casi tanto como mi pene por las mañanas.
-¿Tienes planes mañana por la noche?, es el cumpleaños de Tomas de finanzas y ha organizado una salida al boliche que abrió en el centro. Cada uno paga sus gastos.-
Alicia habló sin pausa y mirando alrededor con nerviosismo.
Me dio ternura su comportamiento casi infantil y sonreí.
-Mañana no tengo planes así que creo que podría darme una vuelta por allí.-
Ella sonrió satisfecha con mi respuesta y se acomodó el cabello de un lado del hombro al otro. Sus pestañas espesas y coquetas se movieron mientras sonreía de lado mostrando unos dientes muy blancos.
-Excelente, entonces quizás nos veamos allí.-
-Si, asi parece.-
Alicia era bella y parecía dulce, sobre todo cuando tomaba coraje para hablar, se notaba que era algo que le costaba trabajo.
Mis técnicas de seducción, que tanto usaba en el pasado, habían pasado a estar casi dormidas. Era algo que no hacía ya, y me encontraba muy lejos de volver a usar.
Pero realmente quería ser feliz, lo necesitaba.
-Gabriel, la cena esta lista.-
Informó Sabrina al tiempo que abría la puerta de mi cuarto.
-Voy.-
Me senté a la mesa y observé mi plato, ella sabía que odiaba las salchichas y sin embargo, allí estaban. Dos fu..ing salchichas con un puré mal pisado.
-Sabrina...-
Usé mi mirada asesina y me mantuve en silencio.
-El supermercado cerró temprano y no tuve tiempo de comprar otra cosa.-
Se justificó ignorando mi mirada y comenzando a comer.
-¿El supermercado cerró temprano?.-
-Bueno, he llegado tarde hoy a casa, y no pude comprar.-
Su mirada fija en su plato mientras masticaba con rapidez.
-¿Y dónde has ido, si es que puedo saberlo?.-
Tragó saliva y evitó con esfuerzo verme a la cara. Algo ocultaba.
-Tengo una amiga y salí con ella.-
-¿Y por qué tengo la sensación de que hay algo que no estás diciéndome?.-
Sus ojos se clavaron en los míos de golpe y se mantuvo seria.
-Porque no tengo por qué contarte todo, así como tú no confías en mí para contarme tus cosas.-
Su reclamo me sorprendió y me cerró el estómago.
-¿De qué estás hablando?.-
Tiró el repasador que tenía en las manos con fuerza en la mesa y se puso de pie.
-Hace semanas que no hablamos de otra cosa que no sea mi tratamiento y lo que tenemos que hacer en la casa o lo que vamos a comer. Llegas, te encierras en tu cuarto y si no hablas con Azul, ves televisión, o simulas hacerlo mientras en realidad miras el techo durante horas. Estás raro y lejano, ya casi no me siento cómoda contigo.-
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Suéñame despierta.(Completa ✔️) (2)
RomanceLlegó el momento de conocer la historia de Gabriel. (Secuela de "Soñándote despierta") Azul irrumpirá en su vida convirtiéndose en un problema más, de los miles que ya tiene. Toda su realidad se encuentra de cabeza luego de un hecho poco claro y gra...