La noche estaba cerrada, las nubes lo cubrían todo y solo caminé...
Transcurrido algún tiempo, la casa de Marcel apareció frente a mi, y no supe ni cómo llegué allí.
El sonido de la música seguía demasiado alta y los jóvenes perdedores continuaban desparramados por todos lados, aunque en aquel momento el estado en el que se encontraban era aún peor que antes de irme con Azul. O eso creía, mi propio estado era tan lamentable cuando ella me sacó de allí, que era imposible estar seguro de algo.
Había vuelto a ponerme mi ropa en el camino y tiré por ahí el short que me dio ella luego del baño.
Me sentía casi libre de los efectos del alcohol y eso resultaba desesperante, tenía la conciencia real de todo lo que estaba sucediendo en el mundo.
Había estado tan cerca de aquellos labios y seguía sin probarlos, y peor aún, había visto lo buena que ella había sido conmigo, lo desinteresado de su ayuda, y la culpa golpeó mi pecho con fuerza.
Sabía que no había estado bien, pero las cosas comenzaban a volverse extrañas cuando la tenía cerca.
Tenía que cortar de raíz cualquier tipo de confusión al respecto.
Y ya...
Sentí unos dedos moverse por mi espalda y me giré.
Dana sonreía satisfecha y el rojo de sus labios recién pintados disfrutaron del roce de su lengua.
Su sensualidad podía enmudecer a cualquiera, ella lo sabía y actuaba dejando al resto de los mortales con la boca abierta. Y yo, en aquel instante, me encontraba gozando de su entera atención, algo que inflaba mi ego y algo más...
Pero...
Mi cerebro se encontraba tan libre de alcohol que mi deseo sexual se quedó dormido y mi ego se tomó vacaciones.
Necesitaba dejar de pensar, necesitaba volver una hora atrás y vivir nuevamente las atenciones de Azul.
Ella me había cuidado, me había tratado bien...
Y aquella sensación en el estómago de estar haciendo todo mal, que no se iba.
Tantos problemas, tanto sufrimiento y estaba haciéndola participar de mis días oscuros, aquello me convertía en un egoísta.
Tenía que dejarla en paz, tenía que mostrarle lo mierda que podía ser para que vuelva a su vida.
¿Con qué derecho me había sentido así de mal al saber que existía la posibilidad de que se acostara con Ulises?, ¿Con qué derecho?.
Con ninguno.
Pero qué fácil decirlo y qué difícil dejar de sentir.
Miré a los ojos a Dana y vi el fuego en los suyos, exigían el pago de lo adeudado.
-¿Has vuelto?-
-Ajam...-
¿Cómo explicarle que no tenía ni puta idea de cómo había llegado allí?.
-Ya te has convencido de que aquella niña jamás podrá darte lo que yo si?.-
-¿De qué hablas?.-
Cambió de pose haciéndose la misteriosa.
-No te hagas el tonto.-Así me sentía.- Esa chica tiene desde hace años al novio con los cojones casi explotando por no darle lo que necesita.-
Su "metáfora" me tomó por sorpresa y me encontré imaginando los cojones de Ulises, algo que me generó un revoltijo en el estómago, casi instantáneo.
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Suéñame despierta.(Completa ✔️) (2)
RomanceLlegó el momento de conocer la historia de Gabriel. (Secuela de "Soñándote despierta") Azul irrumpirá en su vida convirtiéndose en un problema más, de los miles que ya tiene. Toda su realidad se encuentra de cabeza luego de un hecho poco claro y gra...