En la otra vida (Ichiji Y Tú) [FINALIZADA]

56 - Sanando lazos

(Tn) luchaba constantemente por no quedarse dormida, pero cada vez le resultaba más difícil esa tarea.

El cansancio, el malestar y la preocupación se habían unido terminando así con las pocas energías que le quedaban.

La oscuridad de la noche que entraba por la ventana de aquella habitación de hospital y la ligera luz roja de emergencia encima de la cama iluminando las constantes vitales de la paciente, creaban un ambiente tranquilo que invitaba a descansar. Y por más café que consumiera, parecía ya no hacer efecto en su cuerpo.

Cerró un poco sus ojos sintiendo como Morfeo la comenzaba a llevar a un profundo sueño, pero la joven volvió a abrirlos al sentir eso y se levantó torpemente negándose a dormir.

Sentía que si se quedaba dormida, no se daría cuenta si su abuela despertaba o si empeoraba su estado y a pesar de estar atendidas en todo momento por los enfermeros y médicos, ella quería estar presente y no dormida.

Caminó por aquella habitación tratando de despejarse.

Tratando de mantenerse despierta.

El sonido de las sábanas moverse provocó que su cabeza girase de forma casi automática y corriera hacia al lado de la cama.

(Tn) - Abuela... -susurró con un tono de voz ronco producido por el cansancio.

Kureha abrió sus ojos al escuchar aquella voz. Trató de ver en la oscuridad de la habitación, pudiendo distinguir una silueta que se movía a su lado.

(Tn) - Abuela... ¿me escuchas...?.

Kureha - No estoy sorda, mocosa... -se quejó cerrando sus ojos. - ¿Qué haces aquí? Te dije que esperaba no volver a...

(Tn) - ¿Cómo puede seguir siendo tan cruel...?

La mayor cerró sus labios al oír el tono de voz de la joven, sintiendo una sensación amarga extenderse por su pecho.

(Tn) - Vine todo lo rápido que pude para estar contigo a pesar de tus últimas palabras y de que no quisieras volver a verme... y ahora que al fin nos vemos sigues con esa actitud.

Kureha - Nadie te pidió que vinieras.

(Tn) - Pero no podía quedarme en París sabiendo que estabas mal...

Kureha - Elegiste marcharte, no tenías que haber regresado.

(Tn) - Te quiero y estoy preocupada...

Kureha - Lo que digas. -dijo de forma desinteresada. - Ya viste que estoy bien, largo.

La joven apretó sus labios comenzando a sentir una rabia y un enfado subir por su garganta.

Encendió la luz cegando a la mayor por aquel resplandor y antes de que volviera a quejarse, la joven salió de la habitación hablando en voz alta permitiendo escuchar lo que ella decía.

(Tn) - ¡Kureha ha despertado con un brote severo de alucinaciones, adminístrenle una cantidad considerable de antipsocóticos!.

Kureha - ¡Mocosa!.

Horas más tarde...

Judge se encontraba sentado en su despacho observando la planificación y los nuevos archivos que le habían sido entregados acerca de su empresa junto al ayudante que le hizo entrega de aquello.

Se encontraba revisando los nuevos datos hasta llegar a la planificación de las próximas 4 semanas, las cuales sufrieron modificaciones realizadas por parte de sus hijos.

Comenzó analizando las tareas que cada uno llevaría a cabo hasta que sus ojos se detuvieron sobre las tareas de Ichiji.

Frunció el ceño y volvió a revisar nuevamente esperando haber visto mal, pero no fue así.