El Camino Sigue [Furry Yaoi] [Terminada].

Nuevo horizonte.

[Damian]
Ya casi termino todos mis pendientes y aún quedan unas horas antes de salir del trabajo, no cabe duda que me he estado esforzando mucho, pero quise hacerlo para tener la tarde libre pues debo de cumplir una promesa con mi hermana menor.

Tocan mi puerta, parece ser la voz de Henrick:
— Damian, ¿puedo entrar?

Espero esta vez sea algo relacionado al trabajo:
— Adelante, entra y toma asiento.

Lo hace, se ve feliz agitando su cola, parece que a alguien le está yendo bien:
— ¿En qué te puedo ayudar?

Ni siquiera puede sentarse de la emoción:
— Tengo una noticia, que a la vez tiene que ver con el trabajo, pero eso es lo de menos, bueno, para Samir es igual de importante, no sé por dónde empezar.

Está acabando un tanto con mi paciencia:
— Solo dímelo, ¿necesitas un permiso con Samir? ¿Es su cumpleaños o aniversario? Según yo tengo recordatorio de las fechas importantes de todos, así que...

Me interrumpe dándome la noticia:
— ¡Samir está embarazado de nuevo!

Estoy sin palabras ante eso, es como... si hubiera movido algo dentro de mí... no lo entiendo:
— Samir... ¿qué?

Se acerca para tomar mi mano y ponerme de pie para abrazarme casi cargándome:
— Así es, mi esposo al fin se pudo embarazar de nuevo y está vez será más seguro que tengamos a nuestra pequeña niña omega, será parecido a él. Estoy muy feliz y quería compartir esto contigo. Debido a esto, también quiero pedirte si puedes darle incapacidad a él para que se pueda cuidar así como dedicar un tiempo a nuestra hija.

Después de que me suelta hago como si no fuera gran cosa tomando asiento de nuevo:
— Hago los tramites enseguida, para eso hay un área especial, no era necesario que vinieras hasta aquí.

Sonríe ampliamente:
— Lo era, porque es una noticia importante en mi vida, así como tú, quería que fueras de los primeros en saberlo, gracias por todo, Damian.

En cuanto sale dando algunos gritos de alegría yo empiezo a llorar apoyando mi frente contra el escritorio con mi rostro hacia abajo. Puede que sea una gran noticia, pero me duele que todos los planes que me hubieran gustado realizar a su lado se los lleva alguien más.

Trato de reponerme, no debo de actuar así, tengo a Zeus en mi vida, eso debería hacerme olvidar a Henrick por completo. Ahora me duele saber que aún guardo algo del lobo dentro de mí, pensé que ya lo había superado por completo, pero me sigue afectando lo que haga o no haga con Samir.

Adelanto algo de mi trabajo para no pensar sobre esta situación, al salir el canguro me está esperando fuera del lugar:
— ¿Qué tal le fue?

Siento decepción de mí mismo, ¿cómo puedo sentir ciertos celos por Henrick cuando soy novio de Zeus?:
— Perdóname.

Se nota confundido:
— ¿Por qué pides perdón?

Le doy la espalda estando triste:
— Porque... sentí celos de mi ex pareja... Él trabaja aquí, muy seguido no solo tengo que saber de él, también su pareja trabaja en este lugar. Ahora me dijo que estaban esperando una bebé... De eso fue de lo que sentí celos, que mis sueños se le cumplan con otra persona. Sé que estoy mal, perdóname por pensar de esa manera, yo debo de estar enfocado en ti, no es él.

Me abraza por detrás mordiendo suave mi oreja:
— ¿Sabes? No voy a negar que me hace sentir un poco mal, pero en realidad trato de entenderte. Es difícil superar a alguien cuando lo tienes cerca en todo momento, no te da un respiro para olvidarlo, la situación solo empeora sabiendo que ambos están aquí. Solo quiero que te quede claro, quiero mi vida contigo, quiero cumplir tus sueños superando las expectativas, te haré olvidar lo que te hizo sentir, crearé nuevos recuerdos para ti, solo quédate a mi lado.

Es demasiado romántico y muy lindo como para que sea su primer novio, me hace sentir toda su calidez, solo me aferro a sus brazos:
— No... ya basta de que pongas siempre de tu parte, yo debo de hacer lo mismo por ti, ser fuerte, brindar lo mismo que me das. Zeus, yo te prometo que sacaré todo lo que siento por él, tendré ojos para ti en todo momento, solo te pido que no me dejes nunca.

Besa mi cuello:
— Ten por seguro seguro que no lo haré.

Mi padre Bruce aparece enojado por la situación, parece que se está volviendo costumbre llegar en momentos así:
— Deja a mi hijo en este momento, no quiero ser abuelo todavía.

Mi padre Blake ríe un poco:
— ¿De qué hablas? Estás ansioso por tener nietos por parte de Damian, ¿cómo esperas tenerlos si siempre actúas así?

Se sonroja y mira hacia otro lado cruzándose de brazos:
— Olvida lo que dijo tu padre, solo vinimos para traer a tu hermana porque quería verte, al parecer un asunto que tienen pendiente.

Vaya, parece que solo me quiere por eso, pero al menos tiene cierto interés en mí, no creo que sea bueno del todo. Tomo la mano de Zeus, al verlo está sonrojado:
— ¿Pasa algo?

Responde nervioso:
— ¿Q-quieres... tener hijos conmigo?

Ahora yo me pongo rojo:
— No hablemos de eso ahora... apenas somos novios.

Mi padre Blake nos abraza:
— ¿Ves? No tienes nada de que preocuparte, se nota que ambos lo están tomando con calma. Además, después de lo que pasó creo que es el indicado, pero eso lo decidirán ellos en su debido momento.

Creo que esta no es la ocasión para hablar de ello. Se despiden para ir con mis abuelos mientras llevo a mi hermana para conseguir lo que quiere. Que aún no sé lo que quiere que le compre, espero que no sea algo demasiado caro, puede creer que tengo mucho dinero, hay veces que debo dejar algo extra para la empresa.

Mientras caminamos mi hermana va frente a nosotros mientras yo voy aferrado al Brazo de Zeus, tiene grandes músculos, como todo un bombero en forma:
— Damian, me gustaría decirte algo.

No quito la mirada de la pequeña pastor alemán para evitar que se meta en problemas:
— Puedes decirlo.

Solo escucho su linda voz:
— Me gusta esta escena, tú y yo con una pequeña niña jugando frente a nosotros. Puede que sea muy incómodo para los dos hablar de esto, pero me ha gustado la manera en que lo visualizo. Espero algún día poder casarme contigo para poder tener nuestros hijos, podremos pasear como familia, estoy seguro que serían igual de lindos que tú.

Me siento sonrojado, pero a la vez conmovido:
— Sí... también quiero eso. Algún día tener una familia feliz.

Debo aprender a soltar mi pasado si quiero tener la familia que tanto deseo, aprender que Henrick ya es parte de ese pasado que no me puede seguir a donde voy, porque en mi camino hay alguien especial que está luchando por mí, alguien que de verdad desea lo mismo que yo.

Ahora que recuerdo, lo hice sentir mal con lo que le dije, recuerdo las palabras de mis abuelos. Es mi turno de darle el apoyo que necesita, miraré hacia el mismo camino que él quiere para ambos, mi futuro se volvió más brillante desde que está en mi vida, tengo que hacerlo.

Muerdo suave su brazo:
— Zeus.

Acaricia mi cabeza con su otra mano:
— Dime, tigrecito.

Suspiro:
— No debes de preocuparte, solo tú puedes ocupar un lugar tan importante en mi vida, no habrá que supere la persona que eres. Ten por seguro que solo a ti te amo, puede que haya tenido una pequeña recaída, solo no supe como reaccionar. Eso no cambia en lo absoluto la manera en que te veo, no quiero perderte, menos por alguna tontería que haga, puedes decirme lo que sientes, me esforzaré por hacerte sentir bien porque te quiero a mi lado.

Se escucha un pequeño sollozo:
— Nadie había dicho algo tan lindo para mí, tengo fe en tus palabras. Sabía que hay algo muy especial dentro de ti, no es algo que esté a la vista, más bien es como el mundo que pocos pueden ver y tengo el privilegio de conocerlo.

Intentaba ser lindo o romántico con él, aunque de nuevo me quedo asombrado de sus palabras. Sentir que son reales es lo que lo hace tan especial. Antes de decir algo más interrumpe mi hermana:
— Damian, deja de ser tan cursi, se parecen a mis padres, que asco.

Río leve:
— Cuando tengas a alguien especial te diré lo mismo, ahora vamos rápido, hay cosas que hacer.

Mi nuevo aire ha estado a mi lado todo el tiempo, mi nueva visión camina conmigo y es algo que no dejaré ir, seré el fuerte esta vez.