En su momento.

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[Alexander]
Se acerca año nuevo, espero que Damian me invite a pasar de nuevo la noche con él, su familia y sus amigos, ojalá que ya haya arreglado las cosas con Zeus. Estimo mucho a ese tigre, se ha vuelto alguien especial para mí pues antes sentía que ya no podía encajar en ningún lado, y por primera vez en mucho tiempo siento que formo parte de algo.

Después de ver lo bien que se ven Zeus y Damian pienso que ya es hora de tener algo formal, no de la manera en que suelo acercarme a hablar con alguien, puede que no sea la mejor manera de buscarlo. Le preguntaré al tigre cómo hizo para tener al canguro como pareja.

Me dirijo a su casa, espero que se encuentre ahí, de paso podría estar con el pequeño Damus, me encanta ese niño, siento la alegría que pude tener si no me hubieran hecho perder al mío.

Mientras voy de camino un oso omega se topa conmigo, yo no me muevo en lo absoluto por lo grande que soy, pero él cae al suelo, le ofrezco la mano para levantar lo a lo cual la toma:
- ¿Estás bien?

Se sonroja bajando la mirada:
- Oh, lo siento mucho, no estaba mirando atentamente al frente, tengo algunas cosas que hacer y estoy tan presionado que...

Lo interrumpo dando palmadas suaves en su hombro:
- Tranquilo, no tienes porque alterarse de esa manera, solo te pregunté si estabas bien, no estoy molesto en lo absoluto.

Suspira de alivio aun sin verme a la cara:
- Creí que podría haberle hecho daño, no quiero causar problemas. No puedo quedarme a conversar, si alguna vez quisiera conversar yo trabajo en esa cafetería que está cerca. Que ridículo soy, ¿por qué quisiera hablar conmigo? No molesto más, me retiro.

Se va muy apresurada, vaya que tenía cosas por hacer si es que tiene que ir corriendo de esa manera, he de admitir que eso fue un tanto extraño, me imagino que no todos en esta ciudad tienen una vida tranquila.

Sigo mi camino pensando en lo difícil que sería verlo de nuevo, quiero decir, en ningún momento me miró a los ojos, aunque lo tuviera frente a mí estoy seguro que no podría reconocerlo.

Al llegar a su casa tarda un poco en abrirme, cuando lo hace veo que está Zeus con Damus intentando hacer que camine sin soltarlo, me pierdo un poco en esa escena hasta que escucho a Damian:
- Alex, ¿estás bien?

Agito un poco la cabeza:
- S-sí, claro.

Se cruza de brazos:
- ¿Seguro? Parecía que no estabas escuchando cuando te estaba saludando.
- No te preocupes, solo estaba distraído.
- Muy bien... ¿quieres pasar? Sigue haciendo frío todavía, no querrás enfermar, ¿cierto?

Le agradezco al dejarme entrar a su casa, me siento de lado opuesto a Zeus mientras sigo viendo con una sonrisa como se esfuerza el pequeño Damus en caminar. Damian se sienta entre nosotros:
- ¿Querías hablar de algo o necesitas ayuda?

Vuelvo mi mirada al tigre:
- Ya que están los dos, ¿podrían decirme la manera en que se conquistaron el uno al otro? Me gustaría saber sobre cómo nació su relación, si Zeus hizo algo que te gustara, o de sus parejas anteriores, algo que les haya funcionado.

Zeus ríe leve:
- Diría que no sé exactamente cómo hacerlo, de hecho Damian es mi primer novio. No he estado en una relación que no sea con él aunque sé que si ha tenido otras relaciones.

Damian solo sonríe leve:
- La pregunta es algo inesperada, no creí que quisieras venir hasta aquí solo para hablar de eso.

Tomo una de sus manos entre las mías:
- Por favor, suena algo tonto, pero quiero un consejo para poder encontrar a una persona con quién salir. Ya que ustedes son novios... si han regresado, ¿cierto? El punto es que podrían decirme sobre ello.

Damian suavemente pone su otra mano sobre las mías:
- Quisiera poder decirte algo que pueda funcionar para que encuentres a la persona con la que tienes que estar, pero la verdad es que ni teniendo una gran experiencia podría asegurarte alguna técnica o palabras que cautivan a los demás porque todos son mundos diferentes, no a todos nos gusta lo mismo, a algunos le puede parecer atractivo algo que para los demás no lo es.

Me desilusiona un poco soltando sus manos:
- Creí que podría encontrar algo claro, como una guía para intentarlo y tener éxito en la próxima persona que llame mi atención.

Sigue con una sonrisa en su rostro:
- Mereces alguien bueno, que te trate con respeto, no solo alguien que llame tu atención en ese momento. No puedo darte una respuesta fija, pero si un consejo para ello. Lo más importante es que no dejes de ser tu mismo, deja que se enamoren de ti por quien eres en verdad, no tienes porque fingir ser alguien diferente.

Zeus se junta más a Damian:
- Eso es cierto, cuando Damian captó mi atención ni siquiera eramos conocidos, pero siendo él mismo es que pude notarlo, algo en él me hizo darme cuenta lo diferente que era de los demás.

Vamos avanzando haciendo que suba mi interés:
- De acuerdo, no dejar de ser yo mismo, ¿algo más que deba saber?

El tigre asiente:
- No te desesperes por encontrar a alguien. Las cosas pueden no salir muy bien a la primera, creo que eso es algo en lo que los dos tenemos experiencia, sabes que no todo es color de rosas en una relación. También debes de tomar en cuanta la manera en que te hace sentir la otra persona, su forma de ser, cómo te sientes al estar a su lado. Es algo que tal vez no se dé a la primera, o tal vez sí, pero la conexión entre ustedes es lo que hará que te des cuenta sobre la persona indicada.

Suena más complicado de lo que debería:
- ¿No hay una manera más fácil? Esperar a que suceda todo esto me hará ir más lento y la persona indicada se habrá ido para cuando termine todo este proceso para que resulte que estaba equivocado.

Damian se recarga en el hombro de Zeus:
- En lo personal no creo que haya atajos en el amor, todo es tan impredecible, con todo respeto a Zeus yo nunca pensé que llegaría a mi vida. Creí que mi primer novio era con el que estaría el resto de mi vida, me enamoré de alguien más que no creí que se mereciera ser una segunda oportunidad, y pensando que el amor no era lo mío apareció mi amado canguro, las cosas no se dieron de manera convencional puesto que nuestra primera conversación se dio en un hospital. A lo que quiero llegar es... la vida da muchos giros, pero cuando estás con la persona correcta no importa qué tantos obstáculos puedan tener, si ambos luchan por estar juntos te darás cuenta que has encontrado al correcto, ¿no lo crees, cangurito?

Le besa la frente a Damian:
- Sí, estoy de acuerdo contigo, incluso cuando pensaba que ya no había nada que pudiera hacer para ser tu novio la vida nos volvió a unir. Agradezco haberme encontrado con quien podría darme el amor que yo buscaba, y enseñarme que si quería ocupar el lugar de ser tu pareja debía esforzarme. Por eso te puedo decir Alex, también busca a alguien que se esfuerce por ti, no tienes que esperar a hacer todo en la relación, lo que hagas tiene que ser mutuo, Damian hubiera tenido todo el derecho de rechazarme si ya no lo hubiera buscado o mi actitud hubiera sido de desinterés, pero sabemos que somos el uno para el otro.

Ojalá pudiera entender algo de todo lo que me hablan, suena demasiado cursi también:
- ¿No te enamoraste de Zeus por algo en especial? Tal vez la manera en que te hace el amor o algo.

Ambos se sonrojan, Damian solo desvía un poco la mirada:
- Estás frente a un niño, al menos no te entiende. Y creo que eso es lo menos importante en nuestra relación.

Creí que la menos con eso podría lograr un avance, pero es como lo dijo él al inicio, todos somos diferentes, tal vez deba encontrar a alguien que sea más parecido a mí:
- Gracias por eso, quisiera haber aprendido más, tendré que hacerlo funcionar a mi manera. ¿Me puedo quedar para cuidar de Damus? Saber que lo aprecio mucho.

Ambos asienten:
- Solo trata de no hablar cosas malas frente a él, ¿de acuerdo?

Si supiera que soy más contenido ahora, bueno, solo quiero estar aquí un rato, volveré a lo mío después, me gusta la compañía, ¿cuándo llegará la persona indicada en mi vida?

El Camino Sigue [Furry Yaoi] [Terminada].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora