Honestidad.

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[Zeus]
Me he quedado a dormir en otro lado, al contarle a Damian no dudó en transferirme algo de dinero para ello, yo no quería, pero tampoco es que me haya preguntado mucho, solo lo hizo, amo la manera en que me cuida, aunque yo debería de estarlo cuidado al no saber exactamente cuando nacerá nuestro bebé.

Quiero regresar a casa, solo que mi tigrecito creyó que sería mejor intentarlo una vez más ya que estaba aquí, a pesar de decirle lo que pensaban de él no le dio tanta importancia, solo quiere que pueda arreglar las cosas con mi familia.

Antes de hablar con ellos hay alguien con quien debo de hablar, sé que mis padres estarán aferrados a su idea, por eso es mejor que yo tenga que disculparme con Beth, se le veía muy ilusionada, pero yo ya estoy comprometido con el amor de mi vida, no quiero a nadie que no sea él.

Voy por las calles sin rumbo, no sé por dónde empezar a buscar. He de decir que no es una ciudad grande, aún así me puede tomar algo de tiempo encontrar a la mujer canguro.

Siendo medio día ya no tengo señales de ella, al menos hice una parada para comer, lo necesitaba. Mi celular suena, es de mi padre:
— Papá, espero que sea para algo bueno, sigo molesto por lo de ayer.

Habla calmado, aunque no por eso dejo de sospechar que algo pasa:
— Tranquilo hijo, queremos hablar contigo, ¿por qué no vuelves a casa? Te aseguro que las cosas van a mejorar.

Sin estar del todo convencido acepto, voy a la casa de mis padres pensando en lo que puede suceder y en lo que les quiero decir. Si no aceptan a Damian tampoco me están aceptando a mí, ahora es mi familia, es parte de lo que soy, no puedo dejar que lo traten mal o le hagan sentir menos, tiene su lugar y es a mi lado, espero lo puedan entender.

Al entrar a casa de mis padres mi madre me recibe de manera amable tomando mi mano llevándome con ella:
— Al fin llegaste, debes de pasar a ver a alguien muy especial, creo que tienes cosas que hablar, nosotros saldremos de cada mientras ustedes se conocen mejor.

Ahí estaba sentada Beth, vaya, todo era una trampa, aunque ahora la tengo de frente y al dejarnos solos puedo hablara con ella de la situación:
— Ustedes ganan, pero solo hablaré con ella hasta que nos den privacidad.

Sin dudarlo se van de la casa, tal vez imaginen que quiero conocerla de verdad, lo único que espero es no herirla.

Me siento al lado de ella:
— Hola, puede que hayamos empezado con el pie izquierdo, ¿qué te parece si iniciamos de nuevo?

Sonríe estando sonrojada:
— De acuerdo, en verdad me gustaría conocerte, desde que tus padres me contaron de ti empecé a interesarme, siento que algo lindo puede nacer entre nosotros.

Suspiro profundamente, ojalá no sea complicado tener que explicarle esto:
— La cuestión es... no sé desde cuando te han estado hablando de mí, pero en realidad no te dijeron todo, hay algo que ellos saben y no te hicieron mención.

Me mira un tanto confundida:
— Yo los miré muy dispuestos a decirme cada detalle de ti, eres un gran hombre, no hay muchos de esos aquí y es por eso que quisiera intentar algo. Parece que no quieres nada conmigo... si no te parezco linda puedes decirme, tal vez no te agrade, ¿sabes? Lo entiendo, alguien como tú merece a alguien mejor.

Pongo mi mano en su espalda dando suaves caricias mientras trato de buscar su mirada:
— Beth, lamento que mis padres hayan intervenido haciéndote creer algo que no era. No es que me parezcas alguien poco agradable, no puedo juzgar sin conocerte, es solo que para empezar nunca me dijeron algo sobre ti, no tenía idea de que mis padres hablaban contigo. Lo más importante que debes de saber es...

Le enseño mi brazalete:
— Yo estoy comprometido, no hay nada de malo en ti, la cuestión es que yo estoy enamorado de alguien desde hace un tiempo y mis padres lo sabían así como tenían conocimiento de mi boda, no solo eso, voy a tener un hijo. Esas son las razones por las que no quiero intentar algo contigo, yo ya tengo mi lugar, no es contigo, tampoco es en esta ciudad.

Baja más su mirada llevando sus manos a tapar su rostro llorando:
– Sabía que era demasiado bueno para ser cierto, ¿por qué creí que alguien como tú podría estar con alguien como yo?

Me acerco para tratar de abrazarla:
— Solo tienes que tomar más tiempo, el amor llegará cuando menos te lo esperes y podrás vivir una historia de amor que muchos podrían envidiar.

Trata de safarse:
— Para ti es fácil decirlo, antes de tu pareja debieron haber muchas personas detrás de ti, eres guapo y un cuerpo bien construido, tendrías a quien quisieras a tus pies.

Niego con la cabeza:
— Yo no había tenido pareja antes de mi futuro esposo, pensé que mi vida se basaría solo en cuidar de los demás, pero él llegó para motivarme, cambió mi visión de la vida así como estoy seguro que en cualquier momento habrá alguien especial dispuesto a dar yodo por ti.
— ¿Estás seguro de eso?

Le sonrío calidamente cuando nuestras miradas se encuentran:
— Lo estoy, hay alguien esperando a conocerte. Por cierto, perdona lo que te hicieron mis padres, no entiendo por qué te hicieron eso, deben de ser más conscientes sobre las consecuencias de sus deseos egoístas.

Niega suave con la cabeza:
— Debo decir que los entiendo, creo que tienen miedo.

Eso me confunde:
— ¿De qué podrían tener miedo? Tal vez no vaya a seguir con la tradición de solo canguros en la familia, pero tengo hermana y hermano, puede que ellos hayan seguido lo que mis padres desean.

Me vuelvo a sentar escuchando a Beth:
— No sé si deba de hacer esto, pero igual lo haré solo para que entiendas. Resulta que ya se casaron ellos, no fue con alguien que fuera canguro. Tus padres me dijeron que querían romper con la tradición para que fueran felices, pero que ellos dejaron de recibir visitas o llamadas de sus hijos, eso les rompió el corazón, así que ahora quieren que salgas con alguien de nuestra especie, imagino para sentir una mayor cercanía además, quieren evitar que les hagas lo mismo.

Vaya, nunca lo había visto de esta manera, tampoco supe de mis hermanos, tampoco es que nos llevamos bien es especial, pero pudieron darse la molestia de invitarme:
— Creo que fui demasiado duro con ellos, pero si hubieran dicho la verdad antes de empezar con todos estos planes lado cosas pudieron resultar de mejor manera.

Sonríe secando sus lágrimas:
— Entiende que ellos solo quieren amarte y protegerte, estar solos les pudo provocar esa reacción por su parte, pero no creo que tuvieran malas intenciones. Recuerdo esa tarde en que ellos estaban sensibles por mirar una foto de ti, me empezaron a enseñar esa foto y otras tantas. Te aman, solo que a su manera trataban de demostrarlo. No les voy a guardar rencor a tus padres, si algún día pueden necesitar algo quédate tranquilo que yo me encargaré de ellos.

Es más linda actuando de esa manera;
— Te agradecería mucho que lo hicieras, ahora yo hablaré con ellos para tratar de calmarlos, ahora que entiendo más su razón de ser puede ser más simple. Gracias por decirme esto, aunque más que nada reconocer que estás siendo muy fuerte para decir la verdad y aún así ser buena persona, eso habla mucho de ti, apuesto que no tardarás encontrar a alguien que sea digno o digan de tenerte.

Se levanta:
— De momento no quiero saber nada de nadie, no es que me esté encerrando en mi mundo, es solo que estaba tan ilusionada y el amor no se va de un momento a otro, pero cuando esté lista lo volveré a intentar, gracias también a ti por decirme la verdad, si hubiera llegado más lejos hubiera dolido en gran manera, ese hombre que está en tu vida es muy afortunado, espero les vaya muy bien.

La abrazo:
— Igual espero te vaya muy bien, y puede parecer algo raro, aún así, si quieren venir a mi boda estás invitada. Puede que entre los invitados encuentres a la persona de tus sueños.

Se aferra un poco a mí:
— Gracias, sería un honor.

La acompaño a la salida, mientras me despido de ella y la veo salir me hace pensar en el regreso de mis padres, ya entendí sobre ellos, es momento que sepan algunas cosas que quiero decirles.

El Camino Sigue [Furry Yaoi] [Terminada].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora