Cap 4

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Narra Camila

Estaba sentada en el pasto tomando un frapuccino de mocca, y escuchando música, cuando llegó alguien y me quitó un audífono.

-¿QUÉ TE PAS..? osht Ally eres tú- dije mientras comenzaba a levantarme.

-te extrañé tanto Mila- dijo mi amiga mientras me daba un abrazo.

-y yo a ti, creí que llegarías hasta la próxima semana- respondí.

-recibí un correo de que cambiaría de habitación asi que vine para mudarme sin prisas-

-¿en serio? Si te toca sola quiero que me invites eh- la interrumpí.

-no ja ja me enviaron a una doble, y la chica que esta dice que a ella le dijeron que estaría sola, de hecho solo hay una cama ja ja- mencionó mientras levantaba las cejas sugerente.

-uy dormirás con una extraña, tal vez termine siendo tu novia- dije y me reía -sabes que yo te respeto como seas eh amiga- le hacía burla a Ally.

-pues la verdad es guapa, bueno atractiva ja ja, la verdad no me molestaría si me toca dormir en sus brazos ja ja-

-uuuy las novias- me reí con mi amiga.

-solo que se ve muy ammm seria, reservada, hasta me soltó que ella había pedido una habitación sencilla, ve tu a creer que no quiere mi compañía- dijo fingiéndose ofendida.

-no te preocupes ya llegará la indicada ja ja- rió.

-tranquila que aquí la única lesbiana eres tú mi amor- respondió Ally mientras le tomaba a mi frappuccino.

-pero ya te dejo Mila que debo arreglar este asunto- se despidió de beso en la mejilla y caminó.

Yo me dispuse a ir a mi dormitorio, el cual compartía con Lucia, una chica un poco fiestera pero responsable, no era de notas perfectas, pero vaya que era inteligente pues siempre entregaba todo a tiempo, tal vez no todo, pero si la mayoria de proyectos.

No he entendido cómo le hace si los fines de semana se la pasa saliendo, es parte de lo que me agrada, casi no está en la habitación solo para dormir y a veces ni eso, así que mis amigas pueden pasar a visitarme sin problema alguno.

Llegué a mi destino, busqué la llave y abrí, me quité los tenis y la ropa y me coloqué una pijama, aún era temprano para dormir, pero por si me ganaba Morfeo y caía rendida en sus brazos.

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