Cap 32

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Narra Lauren

-hola a todos- en cuanto llegué al restaurante saludé y abracé a mi familia, me senté y comenzamos a platicar, nos pusimos al corriente de todo.

-ammm, yo tengo que contarles algo- comenté un poco nerviosa.

-¿qué pasa Lauren? ¿Está todo bien con el intercambio, dinero y dormitorio?- preguntó mi papá.

-si, no hay ningún problema papá, lo que pasa es que estoy saliendo con una chica- comenté bajando la voz.

-ok, ¿y luego? ¿te gusta no?- preguntó mi mamá como no entendiendo.

-si, obvio, es de hecho quien contestó la llamada- dije y en automático razoné que eso significaba que dormíamos juntas.

-¿Es tu compañera de habitación?- cuestionó mi hermano Chris.

-¿Viven juntas?- continuó preguntando Taylor.

-no, y no, no vivimos juntas, tampoco es mi compañera- dije rápidamente.

-entonces ¿solo fuiste por la mañana para despertar a su lado o se vieron de madrugada y decidieron continuar durmiendo?- se rio mi papá.

-papá es en serio, si dormimos en la misma cama pero no pasó nada, ¡caray! yo no tendría por qué explicar esto- dije mientras me cubría la cara con las manos.

-tranquila Lauren, solo te estamos molestando porque entendemos tu punto, te gusta y a juzgar por tu cara te empiezas a enamorar, y esta bien hija, algún día tenía que pasar de nuevo, ¿tienes miedo cierto?- dijo mi papá con total serenidad.

-si, no quiero que me vuelvan a romper el corazón, pero me siento cómoda a su lado, le compartí de mi comida, pero me da miedo- contesté.

Mi mamá puso su mano en mi espalda y comenzó a frotarla.

-mi amor, la vida es asi, te enamoras, te rompen el corazón, juras no volverte a enamorar, pero pasa de nuevo, te vuelves a enamorar, pero ahora ya sabes que puede acabar, entonces solo te queda disfrutar el tiempo que dure- sus palabras me hicieron soltar 2 o 3 lagrimas.

-¿y si pasa como con Jess? no quiero volver a vivir lo mismo- dije un tanto frustrada.

-¿acaso esta chica te ha dado motivos para dudar?- preguntó mi papá.

-no, de hecho es muy espontánea, linda, amable, y sus caras reflejan todo- respondí sinceramente.

-ay amor, ves, disfrutalo y llevala un día a casa, para que nos las presentes, y si no funciona, por lo menos ya sabes si te rompen el corazón no se acaba el mundo- mi mamá siempre tenía razón.

Fuimos al cine y después me dejaron en el estacionamiento, me despedí de ellos y me fuí a mi habitación.

Me dispuse a hacer mis tareas, Ally no estaba y eso era mejor, podía apurarme y nadie me interrumpió.

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