Cap 90

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Narra Camila

Escuchaba voces, iba moviéndose, alguien me iba cargando, tenía frío, abrí un poco los ojos y ví a Lauren, ella me iba cargando.

-ho o la- traté de decir, me dolía mi garganta, mi cuello.

-¿Él me hizo algo? - pregunté, forcé mi garganta, necesitaba saber, así que hablé aún con el dolor.

-no bonita, estás bien, ese maldito no te hizo nada, llegamos a tiempo- respondió Lauren con la voz un poco cortada.

Se sentó en un sillón, estábamos en la planta baja, yo no me bajé de ella, y siguió abrazándome, vaya qué extrañaba sus brazos, su aroma, me apretaba hacia ella, necesitaba quedarme así.

Volteé hacia la piscina y allí estaba él, había un par de oficiales, que fueron hacia dentro de la casa.

-buenas noches oficiales- dijo Lauren y me movió hacia a un lado del sillón.

-señoritas, si ustedes presentan cargos el joven tendrá que pasar por un juicio y cumplir si así resulta una condena ya que es mayor de edad- explicó y asentimos.

-no obstante, esto no pasó a más y es una persona joven que podría perder muchas oportunidades de ser declarado culpable- objeto un oficial y fruncí el ceño.

Todos los de mi grupito estábamos molestos por el comentario que acababa de hacer este tipo.

-oficial soy Lucía Vives, le solicito de la manera más atenta que se tome este asunto responsablemente, me gustaría que él comience a cumplir su condena ya, creo que todo lo demás lo pueden hacer ustedes - escuchamos todos con atención a Lucy, su tono fue autoritario.

-lo lamento señorita Vives, yo verificaré que eso pase y hablaré con mi compañero, solo si se pudieran presentar lo antes posible a declarar- el oficial que respondió se mostró un tanto nervioso y el otro incluso parecía que tenía miedo.

Vimos cómo se llevaron a Jafet, los demás de la fiesta se habían ido.

-gracias Lucy- dijo Lauren y tomó su mano, volví a la realidad, yo no estaba con Lo.

-si voy a cargar con el apellido, puedo sacar beneficio mi amor- respondió Lucía y le dió un beso a sus 2 novias.

Comenzamos a arreglar nuestras cosas para salir, Lauren estuvo apoyándome con mucha delicadeza, me sentía especial nuevamente, pero sabía que solo lo hacía por lo que había pasado.

-vayan a casa y yo las alcanzo, iré a dejar a Camila- dijo Lauren a sus novias, se despidieron con un beso, primero Lucía le dió un beso mientras sujetaba su rostro y después Ariana, que igual pasó sus manos por detrás de su cabeza.

-te esperamos corazón - dijo Lucía y subieron a un carro.

-ammmh ¿Lauren, quieres que las acompañemos?- preguntó Ally con algo de tristeza.

-si quieren, para que Camila se sienta más protegida- respondió Lauren y sonrió un poco.

-ok- se limitó a decir Ally.

Llegamos a los dormitorios y nos despedimos todos me fueron abrazando y yo a ellos, así con Lauren, ella respondió el abrazo.

Normani, Dinah y Ally al abrazar a Lo fue algo más largo, supongo que una forma de disculparse, de decirle que la extrañaban, Lauren no las quitó, tal vez también las extrañaba.

Estábamos solas frente a la puerta.

-espero a que entres- dijo ella.

-pasa en lo que pides tu uber- sugerí y aceptó, se sentó en la cama de Lucy sacó su celular.

-podrías quedarte- comenté.

-no creo que sea lo correcto Camila- respondió.

-deja de decirme Camila, antes me decías Camz- se me comenzó a cortar la voz.

-antes- solo respondió eso.

-demonios, si pudiera regresar el tiempo, me voy a duchar- susurré para no llorar, me metí al cuarto de baño

Me costó quitarme el traje de baño y cuando lo hice me sentí expuesta, abrí la regadera y me metí, lloré…

-Camz, ¿Necesitas algo, quieres que pase?- escuché la voz de Lauren desde afuera.

-no te apures, ya salgo- terminé de bañarme, no quería salir pues no escuchaba nada, tal vez Lo ya se había ido y no quería extrañarla de nuevo.

Al salir ví a Lauren acostada en mi cama, traía un pijama mío, sonreí obviamente.

-entonces yo dormiré en la cama de Lucy- comenté con voz baja.

-tranquila, duerme aquí, no es como que sea la primera vez que lo hagamos- respondió sin más.

-¿Uy Lo haremos?- pregunté y levanté una ceja, me reí yo solita.

-bueno por lo menos ya te regreso el buen humor- sonrió al decirlo.

-gracias por estar aquí, de verdad lo aprecio - dije y sonrió.

Nos acomodamos cada una en una orilla de la cama, aunque no es como que fuera una enorme cama, por lo menos hoy podría volver a sentirla cerca, no sabía cuánta falta me había hecho.

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