La Hija de los Muertos (La hermana de Naruto)

24 Entrenando para la etapa final

El interés de la búsqueda de Mina por información estaba saciado. De hecho había tenido demasiada información por un tiempo, por lo tanto Mina decidió seguir con su entrenamiento, después de ver un par de entrenamientos de Naruto, (el cúal estaba aprendiendo un jutsu de invocación), Mina decidió hablarle a Jiraiya y preguntarle si la podía entrenar, sin embargo Mina llegó en un mal momento al parecer. Mina vio como Naruto caía en un gran abismo el cual solo le esperaba la mente, Mina trató de saltar para rescatarlo pero el sabio pervertido le detuvo, Mina tuvo un dolor punzante en la espalda, como cada vez que reaccionaba al chakra del zorro de nueve colas de Naruto. Trató de luchar contra el dolor, y esta vez logró estar consciente por más tiempo, incluso, cuando estaba apunto de quedar inconsciente vio como cuatro rayos de luz que salían de su espalda estaban apunto de bajar al gran abismo detrás de Naruto. Antes de cerrar los ojos, la pelirroja vio como una rana enorme salía del gran abismo, en ese momento quedó inconsciente.

Momentos después Mina despertó gracias a Naruto que gritaba fuertemente su nombre, para asegurarse de que estuviera viva. A las tres de la tarde, cuando el entrenamiento de Naruto fue concluido, el viejo pidió unas palabras a solas con Mina.

-Mina, tu no sabes nada de tu familia ¿verdad?-

Esta se preguntó porque todos le preguntaban sobre eso mientras esta asentía con la cabeza, afirmando la negación del peliblanco.

-Esta bien, no esperaba más. Niña, tú tienes un poder muy especial, no se como lo obtuviste o si es algo genético, o por otra razón, pero parece que se activa cada vez que Naruto usa el chakra del kyubi. Y cada vez que lo utilizas, quedas agotada y terminas inconsciente. Este jutsu es llamado Jutsu de cadenas de diamantina, el cual sirve para sellar.- El nombre del jutsu le sonaba a Mina pero no sabía de donde. -Pero no te preocupes, con el tiempo y con entrenamiento, tu cuerpo se adaptara al jutsu y lo podrás usar como una extensión de tu cuerpo. Por eso tu entrenamiento comenzará mañana a las cinco am, no llegues tarde.- Los ojos de Mina se iluminaron, al final si iba a entrenar con el maestro Jiraiya, sin embargo no quería levantarse temprano.

Mina vio la hora y salió corriendo, Naruto le preguntó si quería ir a comer ramen, y aunque a Mina le dolió el no comer ramen rechazó la oferta, ya tenía planes con otra persona.

Ese día Mina tenía su primera clase de shogi, en si no le interesaba la parte estratégica, pero quería descubrir nuevas formas de pelea incluso si fuera una batalla mental.

Shikamaru esperaba a Mina junto a una mesa en el parque mientras observaba las nubes, al contrario de como era normalmente Shikamaru parecía más relajado y calmado de esta forma, todas las preocupaciones se le escapaban. En cambio cada vez que Mina veía una nube esta se preguntaba cómo sabrían.

Mina llego diez minutos tarde después de la hora acordada, ya que dobló dos veces mal en una calle y terminó perdida, pero de alguna manera logró llegar. Shikamaru se quejo como normalmente, pero la verdad no le había molestado en lo mínimo su tardanza y le quito importancia.

Así Shikamaru inicio a explicarle el tablero y las fichas, los movimientos de cada una, etc. Mina tardó uno o dos días en aprenderse todo, lo básico le parecía difícil, y era inutil tratar de ganarle a Shikamaru, a los diez días MIna dominaba los principios del juego, pero Shikamaru le dijo que aún le faltaba mucho. Mina no pudo evitar notar una o dos sonrisas de Shikamaru, que mostraba cada vez que Mina hacía una buena jugada aunque fuera sin querer. De alguna manera le alegraba el que Mina haya aprendido algo de él.

Mientras Mina iba a jugar shogi con Shikamaru en las tardes esta se levantaba temprano e iba a entrenar con Jiraiya, entrenaba fuerza física y mental lo suficiente para soportar las cadenas de diamantina. Mina inico a ver más lentos los movimientos de Jiraiya con cada entrenamiento, no solo su cuerpo se movía extremadamente rápido gracias a las pesas de Lee que solo se quitaba para descansar en la noche entre otras cosas, si no que ahora su vista se adapta a los movimientos de los otros y podía poner más atención en los detalles muy rápidamente. Después de que Jiraiya entrenará a Mina en esa parte Mina se unió a Naruto en su entrenamiento y cada vez que Naruto se expedía con el chakra del Kyubi Mina podía mantenerse despierta y pero si perdía la concentración las cadenas desaparecían y caía inconsciente dependiendo del tiempo que las hubiera usado. Mina vio como Naruto también avanzaba en su entrenamiento, ahora podía invocar una rana. Mina quería usar un jutsu de invocación , pero no quería invocar ranas, quería algo más original, la pelirroja trató de no insultar a Gamakichi con esta información, pero por dos días la rana no le habló.

Un día Mina quiso hacer una invocación, esta no sabia que se necesitaba hacer un contrato, por lo tanto al tratar de invocar a alguien la misma invocación la jalo a ella y terminó viajando a otro lugar, Mina se encontraba tirada sobre una extraña piedra circular, frente a ella había una entrada a un templo, y sobre esta un hermoso zorro blanco con formas naranjas que brillaban sobre el cuerpo la observaban. Al conectar miradas con ella, Mina sintió como si le hubieran dicho un montón de cosas que no pudo entender, sin embargo Mina no tuvo tiempo de hablar, este se bajó de su posición y subió la montaña, el zorro era tres veces más rápido que Mina y lo hacía sin esfuerzo alguno. Mina llegó al final del camino donde un montón de ruinas de templos la rodeaban, el zorro se colocó en un espacio marcado en el piso con una extraña formación de rocas que estaban en el piso, poco a poco muchos zorros de todos los colores y tamaños la iniciaron a rodear, hasta que por detrás de las ruinas, sin hacer ruido un gigantesco zorro blanco como la nieve se paro enfrente de ella.

-¿Por qué has venido aquí humana?- Preguntó el gran zorro. Para este momento Mina ya estaba acostumbrada a escuchar a los animales hablar, pero la voz de este le puso más nerviosa de lo que ya estaba.

-Esteee... bueno.. Estaba entrenado y vi como mi amigo invocaba una rana, este se hizo amigo de las ranas que invocaba y tuve la necesidad de tener un vínculo con alguien como él lo tenía con las ranas, por lo tanto intente hacer el jutsu de invocación y termine aquí.-

-¿Así que intentaste hacer una invocación sin un contrato y terminaste en este mundo?-

-Así es, asi que si fuera tan amable y me enviaran a mi mundo...-

-¿Y qué te hace pensar que te enviaremos al otro mundo?, hace mucho que un humano no nos visitaba ya que le tienen miedo a ese tal kyubi. Mina escucho un bufido que provenía de algún lado de la habitación pero no vio que nadie más lo escuchara y mis hijos no han comido nada en días.-

Mina se puso tensa, trato de pensar que haría cada una de las personas que concordia y entonces pensó:

-Ya se, y si hacemos una carrera, si yo gano me dejas ir pero si pierdo tienen el derecho de hacer lo que quieran conmigo.-

-Tonta humana, nadie es tan tonto para hacer esta clase de apuesta, eligo a Lorillis, nuestra mejor corredora.-

Mina vio como el zorro que la había recibido en la puerta caminaba hacia ella, lo hacía con tanta elegancia, y tenía una cara tan tierna que Mina lo considero de las cosas más bonitas que había visto en su vida.

La pelirroja se quitó las pesas de las piernas, mientras que el gran zorro daba la expoliación de las reglas, estaba confiada pero Mina lo estaba más. Así la carrera empezó, las dos concursantes eran apenas visibles al ojo humano, y en un par de segundos ambas estaban en la línea de meta, Mina había ganado por diez milisegundos, Loris tle dio las gracias por la carrera. Todos estaban plasmados por lo rápido que Mina había corrido, ella era alguien diferente a un humano normal, Mina logró firmar su contrato y regresar a su mundo.