La Hija de los Muertos (La hermana de Naruto)

50 Los Examenes Jounin

Eran aproximadamente las seis de la mañana cuando alguien tocó la puerta de Mina.

Esta se levantó medio dormida y no se preocupó por arreglarse en lo más mínimo por arreglarse para atender la puerta.

Frente a Mina se encontraba un chico de ojos negros, al verlo Mina abrio los ojos como platos y le estrello la puerta en su cara, corrio por toda la casa poniendose algo decente y arreglandose el pelo, unos segundos más tarde abrio la puerta y pronunció agitada:

-¿Shikamaru...? ¿Qué...Qué haces aquí?- <Tan temprano> termino Mina en su mente

-Solo recordándote que el examen empieza en unos minutos fue una molestia levantarse tan temprano, pero supongo que piensas igual.- Por un segundo Mina se puso roja -De todas maneras tenía que ir para allá ¿Estás lista?-

-Este...- hizo un movimiento rápido y completo de arreglarse y ponerse su conjunto de siempre junto con una coleta alta.-Sí-

En ese momento Mina se extrañó por el comportamiento del pelinegro, no había dicho nada fuera de lo normal, solo estaba siendo amable ¿no?, si no fuera por él se habría perdido el examen... Entonces ¿Porqué había tanta tensión entre ellos?.

Mina estaba tan absorta en sus pensamientos, que de repente inició a caminar de manos, no era por una cuestión de preparación o algo parecido, era un simple instinto que de vez en cuando tenía y algo que había usado, inconscientemente, para librarse de la tensión.

Por otro lado Shikamaru estaba confundido... MUY confundido.

Desde que Mina había llegado había iniciado a pensar en cosas que normalmente no le preocupaban.

¿Qué le diría?¿Cómo haría esto o aquello?

Incluso cuando ya se había librado del trabajo de Tsunade, este decidió inscribirse para estar supervisando los exámenes.

<Es una molestia> pensaba mientras contemplaba la mano de la pelirroja.

Y justo cuando se vio a sí mismo tratando de alcanzarla, Mina se paró de cabeza.

Por un momento Shikamaru pensó que era obra del destino, como si el universo le dijera que aún no era el momento, y cuando volvió a la realidad dijo:

-Este...¿Mina?¿Que haces?-

La pelirroja volvió a caminar normal después de haber hecho una pirueta para levantarse.

-Etto..Pues.. Solo quise. Era como si mi cuerpo me lo pidiera, así que lo hice. ¿Nunca te ha pasado? ¿El que cada célula de tu cuerpo te pida hacer algo y sientes una necesidad de hacerlo? Y no hablo de cosas que se hacen normalmente como comer, es una necesidad extraña, es algo que al hacerlo todo tu cuerpo se enciende, te da más energía, más fuerte-

Mina volteo a ver al pelinegro con un deseo de ser entendida.

-Sí...- respondió Shikamaru bajo su aliento mientras contemplaba los hermosos ojos de Mina junto con el brillo que le daba los colores del amanecer a su pelo rojizo. La pelirroja sonrió.

Era increíble como una sola sonrisa de esa chica hacía que el cerebro de Shikamaru dejara de procesar información.

Mina agarró la mano de Shikamaru y corrió a la puerta de la aldea. Y cuando se separaron sentían el fantasma frío que generaba la ausencia de la mano a la que antes sujetaba.

Entonces Mina noto algo, alguien, en el grupo que la hizo saltar a abrazarlo.

Sasuke.

Antes de que este pudiera decir algo, Mina le inició a contar todo lo que había pasado y lo mucho que había entrenado con Naruto.

La pelirroja notó que algo tenía, hablaba menos que normalmente y su mirada era más fría que nunca, sin embargo trataba de sonreír para la pelirroja.

-Tengo un maestro, pero no fue él quién me recomendó...-

Después de unos minutos escuchando la historia de Sasuke, Mina se dio cuenta de que él se había vuelto considerablemente más fuerte; ahora dominaba el uso del rayo de manera más eficiente y era notablemente rápido (aunque no tanto como ella). Tras conocer todos los detalles de las hazañas de Sasuke en el último año y tres meses, y sin tener información sobre el nombre de su maestro, aparecieron Iruka, Kakashi y otros dos maestros acompañados de algunos genin.

Entre ellos se encontraban Konohamaru y sus amigos, junto con Hanabi, quien estaba acompañada por dos chicas un año mayores que ella. Una de ellas tenía el cabello azul, ojos oscuros, y llevaba un lazo de color azul marino, combinando con un traje del mismo tono. La otra poseía cabello negro, ojos azules, piel pálida, y vestía una camiseta azul cielo, acompañada por una falda negra y botas altas del mismo color.

Entonces un tipo de cara rara hablo:

-Mi nombre es Yamato, bienvenidos a los exámenes Jounin, para esta etapa del examen se les otorgará un equipo provisional de genins, todos participaran en un evento de captura la bandera- <¿Captura la bandera?¿No es eso un juego de niños?> pensó Mina- Tal vez piensen que es juego de niños, pero esto puede llegar a ser una verdadera guerra. A cada equipo se le asignará un color, estos tendrán que usar una tela en el brazo de ese mismo color. Hay tres maneras de reprobar el examen, que uno de los participantes no tengan un pedazo de tela en el brazo cuando haya acabado el examen serán eliminados, si su bandera es robada contará como misión fallida y reprobaran inmediatamente, y si no roban una bandera para cuando acabe el examen, no importa si tienen su propia bandera perderán. En otras palabras su misión es robar la bandera de otro equipo y eliminar la mayor cantidad de participantes. El examen durará tres días-

-¿Eso no significa que al menos la mitad de nosotros vamos a reprobar?-

-Si, así es- afirmó Yamato y procedió a nombrar los equipos, hasta que llegó a Mina:

-Mina, tú estarás a cargo de: Hanabi Hyuga, Skyo Hoshitora y Soda Umiyo.-

Así empezaron los examenes Jounin.