-Tsunade... Le tengo que decir algo...
Sasuke... el... Nos traiciono-
Mina se despertó entre sollozos, llena de sudor...
Miró a su alrededor. Konoha estaba semidestruida, todos sus amigos estaban ayudando en las reparaciones y ella acostada en una cama.
La capa del cuarto hokage estaba colgada frente a ella. Por un momento se sintió confundida, pero unos segundos después sonrió y no dudo de tomarla.
La gente se volteaba a verla confundida, pero eso no era uno de sus tantos problemas.
Sasuke si lo era.
Hacía un mes atrás cuando Mina volvió de ver a Itachi, Sasuke le pidió a Mina que lo consideran como un traidor, y por más que le doliera, eso hizo. Guardando la verdad para ella...
Pero sus amigos no reaccionaron tan bien... En específico Naruto, aunque había tenido tanto tiempo para pensarlo, tuvo que dedicar toda su mente en enfrentar a Pain, pero...
Ya no había ninguna amenaza, claramente estaba deprimido, pero todos lo estaban apoyando.
-Y entonces nos dieron estas orejas de gato- empezaba a decir Sakura.
-Me veía muy bien con esas orejas- dijeron Mina y Naruto a la vez.
-¡Mina!- exclamaron sus amigos.
-¿Estas bien?...- inició a decir Shikamaru, últimamente, desde que Sakura lo había regañado, se tomaba constantemente la molestia de ir a verla, le daba un poco de charla y se iba, pero no era el único que la visitaba, Naruto y Hinata también eran caras concurridas, Sakura era su médico a cargo, e Ino le ayudaba a la pelirrosa, Lee traía de su medicina que "le había dado el poder de ser un mejor ninja", Choji se encargaba que estuviera comiendo bien y nunca le sobraba un pequeño dulce que regalarle, Shino y Kiba iban de vez en cuando acompañando a Hinata, y a Akamaru le encantaba dar vueltas a su alrededor, por alguna razón, esta era una manía que le había agarrado a la pelirroja, pero a Mina la hacía feliz, todos sus amigos la hacían feliz.
-Esta bien Shikamaru, yo la deje salir, era hora que dejara ese cuarto, y tomar aire fresco nunca está demás, con que no se exceda... estará bien- le dijo la pelirrosa.
Así los trece ( incluyendo a Sai que no había hecho acto de presencia, así que todos se espantaron al saber que estaba ahí) hablaron de misiones pasadas, como la de los gatos, en la que Mina había participado con el equipo siete, fue muy divertido, se perdió la mayor parte de la misión y terminó en un cuarto lleno de gatitos, la verdad no se quería ir, pero llegó con su equipo y terminaron la misión.
También se encontraron al viejo constructor de puentes y su nieto, a quien habían conocido en la aldea de las olas y los habían protegido de Zabuza y tiempo despues de Gato, un cazarrecompensas que había contratado a Zabuza para matar al viejo, pero al final el espadachín se volvió contra él y terminó muriendo junto a Haku.
Entonces una imagen vino a la mente de Mina, un chico de pelo blanco y ojos claros.
¿Qué le habría pasado a Uka?.
Entonces llegó Konohamau, estaba hablando entretenidamente con el nieto de Tazuna sobre lo genial que era Naruto...
-yo también soy genial...- murmuró Mina.
-¿Celosa?-
-Nunca-
-¡Naruto, Mina!- inició a decir Konohamaru -los está buscando el hokage.
<¿El hokage?> preguntó Mina en su cabeza.
-Larga historia, luego te explico-
Así llegaron a la mansión hokage, Shikamaru estaba presente en la habitación, pero eso ya era de esperar, Mina estaba acostumbrada a su presencia en reuniones y cosas hokagenses, pero lo que le sorprendió fue con quien estaba teniendo la reunión...
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La Hija de los Muertos (La hermana de Naruto)
ActionMina es una chica alegre sin embargo vivió apartada de la sociedad hasta conocer Konoha, donde conoció a personas que cambiaran su vida. Narrador: tercera persona Algunos eventos de la serie original serán alterados Faltas de ortografía y/o puntuaci...