¡Eres mía, mi pequeña mate!

Capítulo 43

-¡Esto si que es una fiesta! -dijo Rocky cuando entramos.

Era mucho su estilo, bebidas y casi que teniendo sexo en todos lados.

-No te pongas cómodo Rocky -dije muy serio.

-Relájate un poco Ross, necesitas unas vacaciones, estás muy tenso.
Lo vi amenazante.

-Buscamos a Star y nos vamos.

-¿De verdad quieres buscarla aquí? Lo más probable es que te teniendo sexo.

-¿Y por qué lo haría?

-La pregunta es, ¿por qué no? -se burla y ruedo mis ojos.

-No todos piensan solo en sexo como tú Rocky, y si sigues bromeando en vez de ponerte a trabajar, acompañarás a los tipos que siquiera hayan pensado en tocar a mi estrellita, les daré una paliza a cualquiera que se quiera pasar con ella.

-Eso no lo veo justo, ¿por qué recibiría una paliza? Yo ni siquiera la tocó, solo quiero cambiar el ambiente.

-Rocky...

-Además, ni que pudieras golpearme realmente, me amas tanto que no puedes. -Me guiña el ojo.

-Rocky.

-Veo tus labios moverse, pero no te escucho bro. -Se va alejando un poco de mi mientras baila-. La música está muy alta.

-Rocky, debemos buscar a Star.

-Si la tocó, estaré en la lista de las palizas.

En estás fiestas humanas nadie tiene control de sí mismos y eso me estaba volviendo loco, mientras viva, nadie le pondrá las manos encima a mi estrellita, ¿mientras viva? Eso es muy corto, haré lo que sea para prohibirlo incluso después de muerto, le partiré la cara a cualquiera que lo intente.

Camino entre los jóvenes olores a sexo y alcohol, a lo lejos, la veo subiendo las escaleras, no distinguía su olor entre tantos olores, había muchos como para distraerme, pero sé que era ella, estaba usando mi ropa, pues la suya ya estaba rota.
La sigo y la sujeto la mano a tiempo antes de que se me vaya, cuando nota que soy yo, pues entiendo que aquí no pudo percibirme, esto es prácticamente una trampa, una música tan fuerte que aturde.
Nosotros los lobos tenemos buen oído, no necesitamos tanto estruendo.

En lo que me ve, me abraza, ¿acaso me buscaba? Imposible nunca le dije que vendría.

-No puedo creer que hayas venido -estaba un poco molesto.

-¿Y acaso crees que vine a disfrutar de la fiesta con esta ropa? -Se ríe mientras me muestra su conjunto.

-Es la ropa perfecta -le sonrío y ella rueda sus ojos.

-Meg me llamó y dijo que Super la había invitado, y me preguntó dónde estaba, la escuché ebria, creo que discutió con Damon, solo vine a buscarla.

-¿Y por qué no le dijiste a Rocky en vez de escapar?

-¿Bromeas? Estaba en urgencia y la verdad, no creo que me hubiera escuchado, estaba muy ocupado en una llamada erótica -responde malhumorada.

-Ese Rocky... -golpeo mi mano con mi frente.

-Creo que ya no tengo que buscar más. -Mira detrás de mi y volteo para ver hacía dónde veía.

Era Meg, bailando con Rocky.

-Parece que está en buenas manos -comenté.

-Estoy segura que de las manos de Rocky se puede esperar todo, menos buenas cosas.

-Lo dices como si te ha hecho algo malo. -La veo alzando una ceja y se veía enojada viendo a la pareja.

-A mi no, a Meg si... -se interrumpe a sí misma-. No te enojes.