A Song for You | Harry Styles.

Amarillista

La noticia de la amarillista y escandalosa historia de Arabella Anderson había sido publicada en todos los tabloides de chimentos del país.

Gran Bretaña se había dormido con el surgimiento de una nueva ídolos y se había despertado con el culebrón más grande de los últimos años. Los Styles, los Anderson y los Browns, estaban metidos hasta el cuello.

Los detalles sucios estaban en todas partes.

Algunos medios habían levantado la noticia real, sin embargo los más amarillistas habían cambiado la versión por algo más perturbador, algunos otros tenían la estúpida teoría de que Arabella era una busca fortunas y otros que había escapado con parte de la fortuna.

Muchas de ellas eran absurdas, por supuesto. Sin embargo era imposible aclarar los tantos sin que ellos se involucrarán en el desastre y confirmaran parte de las teorías.

Todo aquello podría haberse arreglado y quedar como un simple chisme sin sentido de la alta sociedad si tan solo la noticia de aquella falsificación de identidad hubiera quedado en la oscuridad.

Ahora el mundo entero no sólo sabía del triángulo amoroso de las gemelas Anderson, la huida, la mala relación familiar y una herencia transferida a la hermana menos, si no que también de aquella falsificación de identidad que ponía a Arabella como una Maxwell; esto último conllevaría grandes problemas legales.

Harry desayuno la noticia mientras leía aquellas "fuertes cercanas" y cuando creyó que aquello había sido más que suficiente para arruinar su día, pudo sentir su teléfono celular vibrando en una llamada que se hacía rogar: "Des Styles".

Respiro profundamente y mientras bebía la taza de café pudo ver a su sirena salir de la cama, con aquel pijama que nunca llegaba a usar, y mientras la veía acercarse hacia él y besar sus labios; Harry se preguntó si alguna vez podrían estar tranquilos sin que el mundo se derrumbara por el amor que sentían.

— ¿Cómo te sientes? —, el tomo su cintura y ella se sentó en sus muslos, escondiendo su adormilado rostro en el que siempre había considerado su hogar y mientras él la sentía respirar contra la sensibilidad de su cuello, se encargó de acariciarla con suavidad, pensando en la posibilidad de huir juntos y protegerla de todo lo malo de lo que aún era inconsciente.

— Me siento bien, solo quisiera que mi cumpleaños hubiera sido tan hermoso como lo habíamos planeado —, murmuró y él asintió, besando su frente y acariciando su cabello rojizo con suavidad.

Ella se levantó luego de unos minutos y se sirvió café, sentándose frente a él y notando como la llamada de Des volvía a caer en casilla de voz por quinta vez en menos de diez minutos.

— Bebe , deberías responderle a tu padre. Quizá es algo de la empresa —, le dijo, mientras se untaba una tostada y miraba nuevamente la llamada caer.

— Necesitamos hablar —, él dijo aquellas palabras y ella se sintió desfallecer.

Dejó con suavidad el cuchillo en la mesa y la tostada sobre el plato, permitiéndose tener las manos libres para poder frotar sus muslos desnudos en un claro indicio de ansiedad.

— ¿Es sobre ayer? —, el miedo estaba hablando en su voz y aunque él quiso explicárselo de la mejor forma, no hubieron palabras que pudieran concretar aquel deseo — Harry, me estás asustando

— Sirena, debes leer esto. Pero necesito que me prometas que te sientes mejor.

— ¿Leer que? Harry, no estás ayudándome —, sus manos suaves y blancas temblaron y mientras él le pasaba el iPod, se encargó de ver cada una de sus acciones, estando alerta a cualquier pista de que pudiera volver a caer.

El silencio se hizo carne entre ellos mientras ella pasaba entre los diferentes portales abiertos, leyendo las historias más versionadas de lo que había pasado y aunque su sueño siempre había sido ser públicamente conocida, jamás creyó que aquello sería en base a una historia contada para que su imagen fuera ensuciada.

"Arabella Maxwell: falsificación de identidad y una herencia de millones de dólares"

" El triángulo amoroso más escandaloso de la última década"

"Los Styles enredados en una historia de amor bochornosa: cambio de identidad, mentiras y más"

"La historia real de la ex promesa de la música pop"

"Harry Styles es embaucado por su novia, Arabella Anderson"

" ¿Juego de gemelas? Versión adulta"

"Columbia Récords desmiente contrato musical con Arabella Maxwell"

Trago saliva y alzó la vista al hombre, quien intrigante estaba observándola también y aunque el deseo poder decir algo para calmarla, ella realmente estaba en el pozo más oscuro de perdición.

Las lágrimas cayeron por sus mejillas mientras dejaba con suavidad el dispositivo en la mesa en la que compartían el desayuno. Él se levantó y se arrodilló a su lado, tomándola en un abrazo que ella no pudo corresponder, con ausencia completa de su alma dentro de su cuerpo.

Todo lo que había hecho para protegerse, todo lo que había vivido y creía que estaba enterrado, ahora había surgido desde la oscuridad y todo el mundo podía servirse de ello.

El teléfono volvió a sonar y un sollozo rompió la garganta de la cantante, haciendo que Harry la sostuviera entre sus brazos mientras ignoraba el teléfono y se hundían en la miseria conjunta.

Él la sostuvo entre sus brazos hasta que los sollozos se convirtieron en llanto.

Toda su burbuja se había hecho trizas.

Aquel evento se podría convertir en el punto más fuerte de su relación o aquel que finalmente destruyera todo lo que habían construido con tanto esfuerzo y dedicación.

Aquellos meses de amor y felicidad, de éxitos y triunfos, no habían sido más que la calma antes de la tormenta final; aquella que se llevaría todo y a todos a su paso.

El teléfono volvió a sonar y aunque esta vez ya no había sollozos en la habitación, eso no impidió que Harry volviera a ignorar a su padre, quien luego de una hora parecía haber desistido de la idea de obtener una respuesta de su heredero y finalmente había dejado de marcar.

Cuando Arabella se descompensó ligeramente, el hombre se encargó de llevarla nuevamente a la cama y servirle el desayuno, aunque ella ni siquiera puedo pasar algo más que no sea el café que dejó a medio terminar.

El silencio era el tercer fantasma junto con ellos y aunque sabían que el problema no estaba en aquella habitación o en aquella casa,el hecho de que Harry hubiera perdonado sus mentiras no significaba que el mundo lo hiciera.