STEPFATHER (TOM KAULITZ)

part 14

Tom se acercó al cuerpo de Lucy, quien estaba de espaldas a ella. Abrazó su cintura por detrás y la atrajo a su cuerpo, dejando su espalda apoyada en el pecho de este.

Estaban unidos, completamente. Pecho y espalda. Sus pieles desnudas rozaban constantemente, haciendo que ambos sintieran la locura inundar sus sistemas nerviosos.

El culo de la joven estaba contra la pelvis de Tom, quien evitaba moverse y crear fricción innecesaria. Sin embargo, fue Lucy quien se acomodó al cuerpo de Tom, creando esa fricción. Un jadeo salió de la boca del castaño, sorprendiendo a la joven.

— Lo siento —se disculpa este, carraspeando su garganta— Descansa.

Lucy no dijo nada. No hizo falta. Su temperatura corporal comenzó a subir de inmediato, al igual que su excitación. Sentía su centro humedecerse ante el incesante ritmo de recuerdos que tenía del cuerpo desnudo del más alto.

Debía conseguir dormir.

Minutos más tarde, conseguía sin poder conciliar el sueño. Mantuvo sus ojos cerrados todo el tiempo, esperando caer dormida. Sin embargo, el cuerpo de Tom contra el suyo la mantenía bien despierta.

Excitada.

Mordió su labio inferior, siendo incapaz de controlar sus impulsos. Volvió a recolocarse, haciendo fricción de nuevo con el miembro de Tom. Este gruñe entre dientes, quien tampoco podía dormir.

Ambos sabían que había sido mala idea. Pero los malos hábitos son muy difíciles de evitar.

Podía sentir su miembro contra su culo. Ninguno decía nada aún, quedando en silencio.

Lo hizo una vez más, esta vez presionando su cuerpo aún más contra el de Tom. El castaño vuelve a lanzar un gruñido, agarrando la cadera de Lucy.

— Lucy.. —susurra. Su respiración entrecortada contra el cuello de la joven solo conseguía excitarla más.

— ¿Hmm? —murmura la rubia, sin girarse. El agarre de Tom a su cadera se hizo más fuerte, a medida que ella repitió el movimiento una vez más.

Estaba tensando la cuerda y no sabía cuándo podría parar.

Tom cerró sus ojos con fuerza a medida que notaba su miembro endurecerse inminentemente contra el cuerpo de Lucy. Esta era consciente y él lo sabía. Sabía que lo hacía queriendo.

— ¿Estás cómodo? —pregunta la rubia tras segundos en silencio. Tom carraspea su garganta y asiente contra su cuello, manteniendo su mano en su cadera con firmeza.

Estaban jugando con fuego y se iban a quemar.

Tom luchaba por no ceder a sus impulsos, pero la chica se lo estaba poniendo complicado. Estaba excitado y ambos lo sabían. La necesidad de tacto se hizo cada vez mayor, siendo imposible el controlar sus instintos.

Apretó sus caderas contra Lucy, en busca de más fricción. Esta lanza un jadeo, apretando sus caderas más contra las de Tom.

— Joder —jadea Tom, sintiendo como Lucy se restregaba contra su anatomía.

Guiaba los movimientos de la joven agarrando su cadera, hundiendo sus dedos en los pliegues de sus huesos. Lucy disfrutaba del contacto, aunque no era suficiente ya que había ropa de por medio.

El miembro del mayor cada vez era más notorio, creciendo bajo el tejido de los pantalones. Necesitaba atención.

Lucy se gira, quedando frente a Tom. Este respiraba de forma irregular y tenía sus labios entreabiertos. Se miraban a los ojos, ambos excitados.