part 1

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— Cuéntanos, ¿qué tal Europa? —preguntaba su madre mientras pinchaba con el tenedor la comida del plato.

Pasta, su comida favorita.

— Es todo tan diferente. No sé, cada país tenía su cultura y sus costumbres, era maravilloso estar rodeada de tanto arte —respondió Lucy con una gran sonrisa. Europa realmente había sido un descubrimiento— Pero sin duda, el país que más me gustó fue Alemania.

— Tom es alemán —comentó la mujer, lanzando una pequeña carcajada— ¡Qué coincidencia!

Claro que lo era.

Los hombres más atractivos eran alemanes, y lo había comprobado.

Tom y Lucy conectaron miradas. Este esbozó una sonrisa ladeada y pudo jurar que hasta le guiñó el ojo de nuevo.

— ¿Ah, sí? —preguntaba Lucy algo sorprendida. Tom asiente, sonriéndole.

— Kaulitz es su apellido —comenta la mujer— Y ahora también el mío.

Tom lanza una carcajada ante el comentario de su madre. Lucy sonríe, aunque de una manera incómoda.

Hasta su apellido era atractivo.

— ¿Qué te gustó de Alemania? —preguntaba Tom tras unos segundos en silencio, clavando sus ojos en la rubia.

Esa mirada iba a matarla y solo llevaba en aquella casa dos horas.

— Berlín era mi ciudad favorita —comienza a explicar Lucy bajo la atención de Tom y su madre— Los edificios, la gente.., tanta educación. Es todo muy distinto a como son las cosas aquí.

— Sobre todo la comida —explicaba ahora Tom— Las salchichas son nuestra especialidad.

Lucy se atragantó ligeramente al oír aquello. Puede que no lo hubiera dicho con doble sentido, pero para la rubia, lo fue. Comenzó a toser, agarrando el vaso con la mano para beber agua.

— Hija, ¿estás bien? —preguntaba su madre con preocupación— Bebe agua.

Esta asiente al mismo tiempo que bebe algo de agua y traga todo lo que había quedado atascado en su garganta. Suspira cuando ya ha pasado todo, mirando a Tom fijamente.

Este sonríe de lado en lo que mantenía el contacto visual con ella. Algo en esa mirada le insinuaba que el comentario contenía doble sentido escondido.

— Sí, la comida alemana está muy bien —continuó diciendo Lucy— Me gustaría volver pronto.

— En navidades iremos tres días a Berlín —anuncia su madre, sorprendiendo a la rubia— Para conocer a la madre de Tom, Simone. Es importante que también conozcamos a su familia, ¿no?

Lucy asiente, sintiendo como los ojos de Tom estaban sobre ella a cada instante, a cada segundo. Lejos de incomodarla, empezaba a agradarle.

¿Cómo no? Es un hombre atractivo, demasiado. Podía ser su padrastro pero, vaya padrastro.

Continuaron comentando el viaje de Lucy por el continente europeo. Gwen, su madre, prestaba atención a su hija y sonreía al oírla tan ilusionada. Tom, por otro lado, solo la miraba en silencio.

— Voy a subir a darme una ducha —anuncia Tom una vez que la comida ha acabado y estaban recogiendo los platos.

Gwen asiente, llevando los platos a la cocina para fregarlos después. A pesar de tener dinero para contratar a alguien que lo hiciera, la mujer lo consideraba una pérdida de dinero y de humildad. Fregar platos no es una tarea ardua y les hacía vivir en los años noventa de nuevo.

STEPFATHER  (TOM KAULITZ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora