Lucy's point of view.
— ¡Fin! —exclamó Tom una vez que conseguimos cerrar la maleta que me llevaría a París. Yo me había tenido que subir encima para que esta pudiera cerrar— Sigo sin saber para qué necesitas tanta ropa.
— ¿Y si me apetece ir elegante?¿Y si me canso de ir elegante y quiero ir más cómoda? Nunca se sabe si me va a apetecer cambiarme —expliqué bajo su atenta mirada confusa— Los hombres os ponéis una cosa y ya está, simple.
Tom haría eso, pero seguiría siendo el más guapo del planeta. Solo que.., no lo diría.
— Se caerá el avión solo por tus maletas —carcajeó en lo que ponía en pie la maleta y caminábamos hacia la puerta de mi apartamento.
Habíamos estado yendo y viniendo de su apartamento para coger cosas que necesitaba; mi neceser, mi champú, mis cremas.., todo.
Hoy era treinta y uno de diciembre por la mañana y el vuelo era el mismo día uno por la mañana, por lo que estábamos a menos de un día de estar volando de nuevo a la capital francesa.
Y yo pasaría la última noche del año con Tom.
Miles de mariposas revoloteaban en mi estómago causándome hasta nauseas. Estaba emocionada y a la vez.., me sentía vulnerable. Con Tom me siento como la única chica en este mundo, le dejo en sus manos toda mi confianza y amor.
Y no quiero arrepentirme de ello.
Bajamos hasta la puerta del edificio, donde estaba el coche aparcado a tan solo unos metros.
— Por cierto, yo no tomo uvas —comenté. Me miró confuso y elevó una ceja— No me gustan.
— ¿Y qué se supone que vas a tomar cuando llegue el momento? —me preguntó con gracia.
— Mi madre solía darme skittles —dije recordando las navidades a su lado. Ya sabéis, cuando no me odiaba por haberme enamorado de su marido— Vosotros tenéis uvas, yo skittles.
— Está bien —carcajeó Tom— Compraremos.
Conducía por la ciudad con mucha soltura, bajo mi atenta mirada. Su perfil parecía tallado por los mismos dioses, era increíble. Sin embargo, lo que más me llamaba la atención, era su piercing en el labio.
Adictiva a como me hace sentir en pleno beso.
— ¿Qué miras tanto? —preguntó sin quitar la vista de la carretera, esbozando una sonrisa ladeada.
— A ti —respondí segura, sin dejar de mirarle— Eres muy guapo.
Tampoco estaba mintiendo, ¿no?
— Tú tampoco te quedas atrás, preciosa —respondió con ese tono de voz que me volvía loca— No hay mujer más bella.
Era suya, completamente suya.
Tras varios minutos llegamos a su apartamento, con cierta dificultad, ya que mis maletas pesaban un poco y Tom, quien tiene más fuerza, fue el encargado de subirlas.
— Sigo pensando que es mucha ropa —comentó en lo que subíamos en el ascensor.
— Pero tienes que admitir que me queda bien —dije con una sonrisa en lo que elevaba mi mirada para clavarla en la suya.
— No llevar nada también te queda muy bien.
Joder, pues que me quite la ropa ahora mismo.
El ascensor llegó a la planta donde estaba el apartamento y esta vez, sí que ayudé a Tom a llevar una de las maletas.
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STEPFATHER (TOM KAULITZ)
FanficSu padrastro y siete años mayor que ella, ese es Tom Kaulitz, el nuevo marido de su madre. Aunque eso no será mucho impedimento para la joven de veintidós años, Lucy Smith.