67 13 0
                                    

— Trabajas demasiado.

— Solo hago el deber al que me comprometí, querido.

— Wow, lo haces sonar como un contrato.

— No sería el primer contrato que firmo. — Contestó Aziraphale.

Tenía dolor de cabeza, las horas de trabajo le habían pasado a cuenta y ahora debía soportar lo enfermo que estaba por el estrés. Crowley estaba a su lado, ambos en el sillón con la televisión a bajo volumen pues el ruido fuerte hacía comer más al albino; ya habían cenado así que pronto se iría a dormir.

El contrario abultó sus labios, parecía algo dolido por esa indirecta. Aziraphale supo que si quería acabar con una conversación podía usar el recordatorio de la situación, pero tampoco quería abusar de eso.

— Mm... Ahora que me acuerdo... — Habló él, Aziraphale se le quedó mirando, reposando su cabeza en la almohada que fue acomodada anteriormente por Anthony — Espérame, déjame hacer algo.

Miró cómo él se retiraba a la cocina, como era un ángulo muerto, no podía ver lo que hacía. Por eso se quedó ahí, esperando entender lo que decía la televisión; sin mucho éxito.

Felizmente el contrario regresó con una taza humeante, sonreía orgulloso y no tardó en florecer un aroma a hierbas.

— ¿Que es eso?

— Un té de flores.

— ¿Desde cuándo haces eso, Anthony? — Preguntó curioso, le echó un vistazo al pequeño jardín.

— ¡No le hice nada al jardín, lo juro! Me lo regaló una amiga, quizás te cuente de ella más adelante, ahora mismo... Ten, te sentirás mejor con esto.

Estuvo dudoso, podía contener veneno pero quizás eso era mejor que seguir con el mundo dando vueltas. Tomó un sorbo degustando el sabor, no estaba mal, así lo bebió al completo.

Después de un rato, se sentía mucho más tranquilo, aunque gracias a la atención que su acompañante le ofrecía pudo ser el principal factor.


•◦✿──────────────────

Gimme Love!!  [Ineffable Husbands]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora