61 13 0
                                    

Estaba preocupando, eran las nueve de la noche y todavía no llegaba el pelirrojo. Se removió en el sofá, quizás le había sucedido algo pues no había llamado después de la salida del trabajo.

Se sobó las sienes, no debía pensar las peores cosas, tenía que ser positivo aunque le costase. Quizás cuando menos se lo esperara llegaría.

La puerta se abrió asustándolo, ahí vio a Crowley llegando con una sonrisita que jamás había visto antes; apretó los labios sintiendo sus músculos tensarse, por alguna razón se molestó.

— Eres un idiota. — Fue lo que salió de su boca, haciendo que Crowley dejara su mano a medio levantar y su expresión se deformara.

— ¿Ah? ¿Por qué? ¿Qué hice? — Hizo un gesto entre confundido y ofendido.

— Porque no avisaste que ibas a llegar tan tarde. — Se levantó, cruzándose de brazos — Dijiste que llamarías y no lo hiciste.

Crowley pareció titubear, se sobó la nuca apegando su mentón a su propio pecho.

— Pensaba que te molestarías si te llamaba otra vez... Lo lamento, no era mi intención preocuparte.

Hubo un silencio agobiante. Aziraphale bajó la mirada, ya no sabía qué decir, se había enojado sin razones y ahora seguramente había arruinado el ánimo del contrario.

— ¿Estabas con Anathema...?

— Sí.

— Entonces no dije nada... Iré a mi cuarto, buenas noches.

No lo miró y se encerró, a veces pensaba que el más infantil era él mismo por actuar así cuando solo estaba preocupado.

•◦✿──────────────────

Gimme Love!!  [Ineffable Husbands]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora