Chapter 16

338 32 3
                                    

Sombras del Poder

Advertencia: Capítulo con contenido sensible, relacionado con abuso

Estimada Ameera

El chofer pasará por usted a las 8 en punto, la llevará y regresará cuando acabe. Por favor no se olvide de utilizar lo que viene en la caja roja.

Espero que disfrute su noche

C.S

Es corto, pero claro, sus mensajes siempre son así. Abro la caja y lo que hay dentro me da nauseas, es una minifalda a cuadros roja con el borde rojo de cuero, que no deja nada a la imaginación, un bra igual rojo a cuadros con arnés, dos moños rojos con lazo, una mini corbata y unos tacones de aguja rojos

Me pongo un abrigo sobre la ropa, me haré el peinado en el carro, y salgo rápido para que nadie me vea, pero no veo cuando me choco con alguien.

— Perdón — trato de pasar pero toma mi mano.

— ¿A dónde vas A? — no quiero preocuparlo y menos que me vea en este estado, así que trato de seguir pero su agarre, aunque no me lástima, es firme.

— Finnick, hola... ¿Cómo has estado? ¿Qué te trae por aquí?

— Venía a ver cómo estabas, pero... ¿qué traes puesto? ¿A dónde vas?

— Yo... mm... Sii... — hago señas sin saber que decir y queriendo huir de ahí, su aspecto divertido cambio a serio en un abrir y cerrar de ojos

— Ameera el presidente....

— sí, me envió una carta y la ropa que quiere que use

— Te acompaño y te espero afuera

— No, luzco ridícula, me siento avergonzada

— No sabes cuanto lamento que tengas que pasar por esto

— No te preocupes estaré bien, nos vemos cuando vuelva te parece? — asiente, aunque no suelta mi mano hasta que me alejo lo suficientemente, me mira con pensar mientras yo ingreso en el elevador, el carro me lleva a una mansión... Me dirigen a una habitación que debe ser de huéspedes, pero para ser de huéspedes es muy amplia....

En eso aparece un hombre que debe tener unos 45 años, aunque es evidente su tratamiento para evitar que se note su edad, como todos en el capitolio, se sirve un trago y me ofrece uno.

— Es un deleite por fin tener a nuestra reina aquí... Pero no seas tímida linda, quítate el abrigo, ¿recibiste mi obsequio para hoy? — me vuelvo muda, no soy capaz de pronunciar palabra, solo asiento con la cabeza, mientras me retiro el abrigo — Fantástico — pronuncia con un tono de lujuria, su respiración se vuelve pesada y se toma el trago, mientras me mira con deseo — Verte en los juegos es una cosa... pero tenerte aquí... a mi disposición y en ese disfraz, no tienes idea lo mucho que me prendes, siente mi polla, está dura por tí... esperando para que disfrutes con un hombre... — se acerca y me empieza a besar, mi cerebro y mi cuerpo se desconectaron, no soy capaz de moverme, ni resistirme, sé que no quiero esto, pero mi cuerpo no reacciona. Me guía hasta la cama, donde empieza a bajar por mi cuerpo, pero mi cerebro se desconecta con el ruido de la cremallera, mi cuerpo está en esa habitación, pero mi cerebro y mi alma no. Cuando todo acaba... él está satisfecho

— Eres aún más deliciosa de lo que imaginé — me susurra en mi oído y deja besos húmedos en mi cuello. Se levanta y saca del velador un collar de diamantes, me recompongo y me cubro con la sabana

Panems QueenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora