Joven, Hermosa e Inteligente
La Vencedora Perfecta... La favorita del capitolio... Ameera había sido bendecida con regalo que nadie más tuvo... al menos eso creían los Distritos... No era nada más que la marioneta perfecta, con mucho que perder y d...
Una vez fuera, se apaga la cámara y Caesar Flickerman me abraza
— Nos da gusto verte, eres perfecta Ameera
— Igual, me alegra estar aquí — me dirijo rápidamente a mi habitación y vómito lo que no he comido, esa palabra... perfecta... cómo puedo ser perfecta si estoy rota por dentro, y ese estupido apodo... reina? acaso es una especie de tortura psicológica, quieren que recuerde una y otra vez que soy una asesina, que maté a Camille, sin contar a Adrián y Luca, y a los demás tributos. Me quedo en el baño llorando, siento que no respiró...
— Princesita... pequeña Guerrera — Finnick me ve mal y me abraza, pero llega Haymitch y Effie. El se queda en el baño, mientras les sonrío
— Lo hiciste maravilloso linda, estuviste perfecta — odio esa palabras, besa mi cachete y sale
— Muy bien, creo que el Capitolio estará conforme con eso.
— ¿Por qué?
— El signo que hiciste para rendir honor a Marcus, Luca, Adrián y Camille y sus canciones, bueno... fueron vistos como rebeldía, el Distrito once, ocho y cuatro se revelaron, cuando ocurrió la muerte de sus tributos, fueron contenidos, pero... temen una rebelión contigo como su símbolo
— No te preocupes me encargaré de eso durante la gira, ahora quiero estar sola.--- Él asiente y sale
— Te admiro — dice Finnick
— ¿Por ser una reina mimada?
— Porque eres más Inteligente de lo que piensan. Sabes actuar bajo presión y eso te vuelve más peligrosa de lo que creen. Tambien eres más fuerte y valiente, de lo que cualquiera puede pensar
— No me siento así... ya no soy yo Finnick... ya no puedo ser yo
— Claro que sí, todo el mundo te ama
— Aman lo que creen que soy... lo que yo quiero que vean. El cabello es falso, la ropa es falso, toda yo.
— Es el Capitolio, solo falta la coronación y volverás a casa
— No sé si pueda...
— Claro que puedes, confío en ti.
— Finnick
— Tranquila... estás a nada de volver a tu hogar, con tu familia y podrás recuperarte
— No, no puedo, me sentiré una farsa...
— No lo eres, es momento de que te encuentres a ti misma Ameera
— Y si ya no te agrado? ni a los demás
— Ni volviendo a nacer me dejarías de agradar — me abrazó con fuerza — Estarás bien... tu familia te va a proteger, yo te voy a proteger, no dejaré que nada malo te pase.
— Gracias... Pero no me quiero despedir... ya no nos podremos ver
— Nos veremos el siguiente año
— Es mucho tiempo
— Tienes tu gira de la victoria y tengo planeado secuestrarte un día para que conozcas el distrito 4
— Estaré encantada
— Cuídate por favor
— Igual tú — besa mi frente y canta hasta que me quedo dormida.
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