CAPITULO 30

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Leto

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Leto

Momentos antes del incendio

—Leto, ¿podemos hablar?

Eso fue lo que me hizo levantar la vista de mi libreta. Encuentro a Hades, jugando con sus nudillos con ligero nerviosismo. Esta vestido de color gris, pero su camisa esta mojada.

—Hades, ¿volviste a vomitar? —cierro la libreta con algo de molestía.

Mi ceño se frunce cuando él asiente lentamente, sigue jugando con sus nudillos más nerviosos. No se acerca, se queda en su lugar con la cabeza apuntando al suelo, su largo cabello de color negro fuerte le cubre el rostro.

Me levanto con lentitud, dejo al lado mi libreta con el gato negro, sigue dormido porque le acaricie la cabeza, no me dejaba dibujar si no acariciaba su cabeza.

Con mis manos, tomó su cabeza levantándola con lentitud. Puedo ver sus labios ligeramente blancos y varias lágrimas salir de sus ojos sin detenimiento. Con la manga de mi saco negro, limpio sus lágrimas delicadamente, también lo hago con sus labios para que recuperen su color normal. Sus manos caen en su estómago, aferrándose a él. Estoy más que segura de que vomito más de dos veces.

—¿Te está doliendo? —asiente con la cabeza.

Agarro su mano y la entrelazo con la mía, salimos de las habitaciones donde dormimos todos los niños.

Nos dividen según el grado o a veces la edad. Hefesto, Ares y algunos venían de visita. ¿Cuándo tuvimos la salida pedagógica? Ese día nos reunieron con todos los niños de dichos Orfanatos, tuvieron que quedarse ese día mientras llegaba su transporte para llevarlos. En el caso de Hades, él se empezó a quedar por culpa de las peleas con Hermes... Hablando del innombrable, ¿dónde estará este intento de ser humano? Suele mirar todo lo que los demás hacen, aparte de abusador, es un entrometido en donde no es llamado. ¿Cómo sigo siendo su pareja? Está enojado conmigo.

Yo no hice nada malo, solo defendí a Ares de sus estúpidos e idiotas comentarios sobre su orientación sexual. ¿A él que le importa si le gustan los hombres o le gustan las mujeres?, ¡¿Qué le importa de su vida?! Si no le gusta nadie o le gusta todo el mundo, ¿qué tiene que opinar?, ¡sigue siendo la vida de Ares, no la suya!.

Lastimosamente eso llegó a los odios de Superior y... No me gusto mucho lo que hizo, termine castigada por insultarlo "De la peor manera", Solo le dije que madurará, porque para cumplir 11 años parecía un niño poniendo quejas de todo... Se lo escupí en otras palabras más, ofensivas para su poco intelecto y vocabulario. Ares también fue castigado, el de él fue el más mínimo, solo tenía que hacer pláticas sobre el compañerismo. A Hermes le tocó hacer más de una semana, ayudar a las chicas de servicios, más trabajos adicionales y terminamos conmigo. Solo hacer cuatro hojas llenas de planas sobre el respeto y presentar dos trabajos, nada fuera de lo usual.

Maldición RotaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora