CAPITULO 20

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Leto

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Leto


Mi madre luce un vestido elegante. Ella quiere sonreír, pero no lo hace por mi mirada sin ningún sentimiento. Puedo dejar pasar las cosas, más, no olvido lo que me hicieron. Y no, no es que no pueda perdonar, si puedo perdonar, aunque siempre recuerdo el daño que me hizo una persona por más mínimo que sea.

Pero ella no se puede perdonar por todo el daño y dolor que ha causado.

—Él es mi papá; Erik y ella es mi madre; Amelia —los presento—. Papá ellos son Bernal, Axel, Igor y Thiago, ah, y una chica que se quedó porque tenía que contestar una llamada, Libia es su nombre.

—Es un gusto, muchachos. —saludó mi padre con respeto y una sonrisa— ¿Desean algo de tomar?

—No señor, muchas gracias —responde Axel amablemente, igual con una sonrisa.

—¿Van a salir? —pregunto al verlos tan arreglados, bueno mi papá no se ha abotonado su camisa y mi mamá, le falta el peinado y los tacones.

—Tenemos una cena de negocios, ¿vienes? —lo miró con disgusto y él se rio mirando a mis amigos— Tus amigos pueden venir. ¿Quieren?

Los observo y ellos solo se miran entre sí, algunos se negaron ya que tenían que irse a su casa, los únicos que aceptaron fueron Bernal y Axel.

—¿Vas a invitar a tu novio?

Trágame tierra y escúpeme en Marte, pero más rápido que la luz, por favor.

Mis padres se miran entre sí confundidos para al final mirarme para que les dé una buena explicación

—¿Novio? —pregunta mi padre de brazos cruzados, Axel busca mi mirada, aterrado por la pregunta de mi padre.

Si él está aterrado, yo estoy momificada.

No quería volver a pelear con mi familia, en especial con mi papá, no recuerdo haber peleado con él alguna vez, si lo he visto molesto que es otra cosa, aunque pelear de verdad, jamás, no me gustaría ni pensarlo.

—Es que Axel piensa que Katashi es mi novio porque nos llevamos muy bien papá, así que hace bromas —respondo algo nerviosa porque mi papá me está mirando con una ceja levantada para la explicación, afortunadamente asiente.

—Pues él es un buen muchacho, aun así, Elizabeth, si llegas a tener novio, ya sabes, no te distraigas de tus estudios, sabes de qué estudios te hablo y con la condición de presentarlo, para estar más seguros —me recuerda con diversión y sonrío.

Claro, mi carrera de abogada.

—Ya lo sé, solo que no estoy interesada en nadie, él es solo un amigo que me trata bien —confirmó con una sonrisa cerrada y con ganas de golpear a Axel, creó que cayó en cuenta porque se esconde en la espalda de Bernal.

Maldición RotaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora