CAPITULO 36

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Hades

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Hades

—¿Qué haremos cuando despierten? —pregunta el tío Arseniy cruzado de brazos al frente de nosotros.

Estamos los cuatro en la sala, pensando en nuestro próximo movimiento. Cuando Alvize despierte y logré quitar las cadenas, no dudará un segundo para buscarnos y degollarnos por lo que le hicimos.

Observo la ventana y son aproximadamente las 5 o 6 de la tarde... El tiempo se esta pasando más rápido de lo que pensé.

—Lo principal será que no descubra que estás de nuestro lado —comentó Leto cerrando la puerta dejando a su compañera dormida.

—¿Qué pasa con eso? Es su vida al fin de cuentas —habla Ares sentado en una de los sofás sin preocupación.

A su lado estoy yo, serio y pensativo mientras analiza un tipo de labial que encontró en el suelo. ¿Han traído mujeres para tener sexo acá? Que asco.

Se me hace conocido ese labial.

—Alvize no tiene piedad con nadie, fue capaz de enfrentar a nuestro padre que era un sociópata sin tratamiento psicológico —responde Arseniy con una botella de agua que sacó de su maleta—. Creo que desde ahí empezó su adicción por los licores.

—¿Cómo era Alvize de pequeño? —le sigue preguntando Ares.

Leto toma asiento al frente mío con una botella de tequila, se ve cansada y con ganas de matarse ahora. Mi mirada cae en sus ojos, tiene su brillo apagado, como si no fuera ella.

Cuánto quisiera que esto no pasará y simplemente fuéramos felices... Si es posible juntos.

—Era un adolescente de catorce años, con una mente fascinante. Todos los profesores que le dictaba clases hablaban maravillas de él cuando era la entrega de los boletines escolares, sus calificaciones eran impecables y era un ejemplo a seguir de muchos estudiantes, hasta que un día conoce a un rival digno diría él.

—¿Digno? —pregunto algo interesado en la historia.

Servirá de algo si podemos encontrar el punto débil de un psicópata. Todo psicópata tiene su capricho o su debilidad. Alvize no será la excepción.

—Erik Watson era su rival digno en la secundaria —responde ella destapando una botella de tequila de mi padre.

Le da un largo trago bajo nuestras miradas. Se nota desde lejos el estrés y las pocas ganas de seguir... No sé si el licor logre hacerle efecto por su condición.

—Veía a mi padrastro con un rival ya que ambos eran buenos en todo lo que hacían... Eran conocidos como los chicos con inteligencia fluida o general —dejó la botella de tequila a sus pies.

—¿Qué es inteligencia fluida o general?

—Es un tipo de inteligencia que te ayuda en todos los aspectos, te ayuda a sobrevivir y eres bueno en todo, a veces sin necesidad de experiencia en los campos de conocimientos —responde Arseniy por mi—. Ellos eran populares e inteligentes en su adolescencia y por eso, Alvize no soporta ver a alguien que quisiera ocupar su lugar y menos al saber el pasado de Erik.

Maldición RotaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora