Capítulo 23: El Baile de los Tres Magos

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Mazmorras de Hogwarts

Sábado 20 de diciembre 1994 – 08:16 pm

Harry se sentía nervioso y avergonzado mientras esperaba en el pasillo frente a la sala común de Slytherin. No podía creer que hubiera aceptado al final ir al baile con Emely Gracee. Todavía no estaba seguro que lo había impulsado a invitarla. Quizás era el hecho de que se sentía muy aislado de las otras personas desde que comenzó todo este revuelo con su nombre en el cáliz de fuego. y saber que su mejor amiga ya tenía pareja para el baile no ayudo mucho a su situación. Sin mencionar que llego tarde para invitar a Cho, que desde hace algún tiempo se sentía atraído por la chica. Así que después de una decisión precipitada, estaba esperando que al menos todo saliera bien con Emely.

Se veían estudiantes rezagados de Durmstrang pasar por el pasillo buscando a sus parejas de último minuto. Se supone que la recepción comenzaba a las ocho de la noche, pero la gran apertura con los campeones y sus parejas, era treinta minutos después de la hora. La profesora Mcgonagall le había indicado que debía estar en las puertas del gran comedor con su pareja muy puntuales. Sin embargo, no había señales de Emely todavía.

Con cada minuto que Harry pasaba esperando, más nervioso se sentía. Comenzó a sospechar que quizás todo era una trampa, que Emely solo quería humillarlo y por eso había montado todo ese teatro para burlarse de él. Puede que estuviera molesta porque la información que le brindo su padrino no fuera de utilidad o quizás todo había sido planeado por Malfoy. Pero eso no tenía mucho sentido después de las últimas semanas que había convivido con la chica. Se habían compartido secretos y tenían una relación de amistad extraña, donde la confianza no era la protagonista precisamente. Sin embargo, Harry podía decir casi con total seguridad que la chica de Slytherin no buscaba hacerle daño.

Harry suspiro y miro su reloj. Faltaban diez minutos para la hora de entrada de los campeones y Emely todavía no había salido de la sala común de Slytherin. Harry se preguntó si Emely lo había dejado plantado, si todo había sido una broma cruel para hacerle perder el tiempo. Tal vez Emely ya estaba en la entrada del gran comedor con los demás esperando por él. Eso era algo posible. La chica nunca había mostrado signos de tomarse el baile muy en serio. Que Harry quedara mal ante todos era algo que ella podía ver como una inocente broma. A Harry todavía le costaba comprender del todo el sentido del humor de la chica por lo que, si eso resultara ser así, para Harry sería terrible. Harry sintió un nudo en el estómago sin saber qué hacer. Se sintió tentado a irse. De olvidarse de Emely y del baile y simplemente desistir. Si alguien le preguntaba que paso al día siguiente, diría que se enfermó o algo así. Pero antes de que pudiera moverse, la puerta de la sala común de Slytherin apareció en el muro y Emely salió al pasillo.

La chica de Slytherin estaba deslumbrante con un vestido blanco que resaltaba su figura y su cabello negro parecía más oscuro que la noche. Sus ojos brillaban con una mezcla de malicia y seducción. Emely se acercó a Harry con una sonrisa y le tendió la mano.

—Hola Harry Potter. ¿estás listo para el baile?— Le dijo con una voz dulce y venenosa.

Harry sintió un escalofrió recorrerle toda la espalda. Emely era hermosa, pero también tenía esa personalidad desafiante que le causaba conflicto. Harry se preguntó si todas las chicas de Slytherin serían así como ella. El chico quedo tan deslumbrado por la forma de vestir de su compañera que por un segundo casi olvida que estaban algo retrasados.

—Emely... estas...— Intentó decir Harry, pero las palabras se atoraban en su garganta. La observaba de arriba abajo sin dar crédito a sus ojos. Harry nunca pensó que Emely se esforzaría tanto en verse tan bien para el baile.

—¿Hermosa? ¿Radiante? ¿Cómo si la mismísima Morgana Le Fay hubiera decidido acompañarte al Baile?— Emely dio una vuelta para exhibir su vestido por todos los ángulos— Lo se Harry, por eso tarde tanto. La belleza se hace esperar.

Harry Potter: El Cuervo Entre el Ciervo y la Nutria.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora