Esta historia comienza en el cuarto año y se desvía del canon oficial.
Se actualiza los domingos.
Harry Potter: El Cuervo entre el Ciervo y la Nutria.
Es una historia alternativa que narra cómo Harry se enfrenta a los desafíos del torneo con la a...
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Enfermería de Hogwarts
Martes 24 de Noviembre 1994 – 11:22 am.
Cuando las puertas de la enfermería se abrieron dando paso a una camilla donde se encontraba un herido Harry Potter, se escucharon exhalaciones alrededor. Ya había algunos alumnos curiosos que se habían adelantado a los sanadores observando al chico que parecía estar perdiendo mucha sangra. Sabían que llevarían al campeón a la enfermería, así que se apresuraron a ocupar las mesas del fondo para ver llegar a los sanadores dirigidos por el profesor Dumbledore y Madame Pomfrey.
—¿Donde esta...?— Intentó decir Harry sin éxito mientras veía a un lado como la larga barba del directo era agitada a causa de la prisa que dominaba sus pasos.
—¡Guarda silencio muchacho!— Oyó decir a madame Pomfrey al otro lado— Necesitas guardar tus fuerzas.
La camilla por fin se detuvo y sintió como uno de los sanadores le comenzaba a lavar las heridas en el brazo mientras la señora Ponfrey se ocupaba de su cabeza.
—¿Cómo está él Poppy?— Pregunto el director endureciendo la mirada.
—Tiene suerte de no haberse desangrado en plena arena Albus, pero estará bien. Por lo que veo no será necesaria trasladarlo a San Mungo— Respondió la enfermera sin apartar la vista de las vendas que estaba colocando— Sin embargo, necesita descanso después de la poción que le voy a dar. Solo puedo administrarle un calmante por ahora. Su cuerpo aún esta bajo los efectos de dos pociones más. Su hígado no resistiría un tratamiento más fuerte.
—Sin duda el muchacho estaba preparado no solo con su varita para esta prueba— Comentó Albus mirando a Harry que ya estaba profundamente dormido por los efectos del calmante.
—Mañana estará despierto y mas recuperado Albus, no te preocupes.
—Ciertamente es un alivio— Comentó Dumbledore —Lo dejamos en tus manos entonces— Dijo el director haciendo una seña a todos los curiosos para que salieran de la enfermería— Me asegurare de tener una pequeña charla mañana temprano, cuando nuestro joven Harry haya descansado lo suficiente— Dijo Dumbledore cerrando la puerta de la enfermería.
En cuanto Dumbledore cerró la puerta, se vio asediado por un grupo de estudiantes que querían forzar su entrada al recinto médico. Entre ellos estaba los que el director sabía que eran los mejores amigos del muchacho, Ron Wrasley y Hermione Granger, acompañados de otros alumnos de la casa Gryffindor.
—¿PROFESOR COMO ESTA HARRY?— Gritó Hermione— ¡DEJEME VERLO POR FAVOR!
—¡NECESITAMOS ENTRAR PROFESOR, DEPRISA!— Continúo el pelirrojo sin dar tiempo a responder. Y eso desato una horda de gritos de los otros estudiantes que quería saber el estado de Harry.
—¡Queremos ver a Potter!— Se escuchaba al fondo.
—¿Esta muerto Potter?— se oyó la pregunta al fondo.
