▪︎ 2

325 19 2
                                    

Nikki.
La fiesta estaba bien, pero algo hacía falta en ella y era la estúpida de Angie. Me dejó el otro día plantado en el muelle por irse a Nueva York y todavía la muy perra se siente mal porque no le contesto las llamadas y no voy a su casa. Ella me corrió de vivir con ella todo porque su maldita amiga odio que dejara el lavamanos lleno de tinte negro.
Estoy tomando directamente de la botella de whisky mientras veo a unas rubias de senos grandes que me miran y me sonrien. Siento que Vince me da un golpe en el brazo y me apunta con la mirada la puerta del departamento, veo a Angie que acaba de entrar.

- ¡Angie! - Grito mientras me acerco a ella y dejo la botella en la barra de la cocina. Ella me ve seria.

- Eres un idiota Nikki, como te atreves a ir a mi trabajo para decir que soy una perra. - me reclama molesta.

- Estaba enojado aquel día. - me enojo de hombros y su expresión se vuelve seria.

- ¿Solo eso? Osea... casi pierdo mi empleo por tu culpa.

- No creo que te haya importado tanto ya que te fuiste a Nueva York... ¿por cuantos días? - le digo molesto. - Fue una puta semana Angie, una puta semana que no sabía nada de ti y te fuiste sin avisarme.

- Quise explicarte pero no respondias las llamadas.

- ¿Y para que las iba a responder? - me cruzo de brazos.

- Eres un imbecil, Nikki.

- ¿El imbecil soy yo? Tu te fuiste sin avisarme y me dejaste en aquel muelle esperando como un idiota.

- Contigo no se puede hablar. - suspiro. - Sabes... no se como he venido hasta acá para hablar contigo cuando a ti te da igual nuestra relación.

- ¿Qué es lo que quieres que yo haga?
¿Acaso querías que fuera a buscarte? Yo no busco a nadie.

- Qué te disculpes por haberme dicho perra con mi jefe. - responde y yo solo sonrió.

- No pienso pedir disculpar de algo que no me arrepiento de haber dicho.

- Eres un... no se que estoy haciendo aquí. - da la vuelta y sale de nuevo por la puerta. Voy detrás de ella y la tomo del brazo. - Sueltame, Nikki.

- Pues ya que estas aquí... deberías quedarte al menos por lo del otro día.

- No me voy a quedar aquí contigo en esta fiesta.

- Mierda... - suelto su brazo bruscamente y ella solo me mira furiosa. - Sabes que... has lo quieras.

- Vete a la mierda, Nikki. - la ignoro y entró a la casa.

Tommy se acerca conmigo de inmediato.

- ¿Qué acaba de pasar con ustedes dos? - pregunta curioso.

- Deja de andar de puto chismoso y ve detrás de ella.

- ¿Qué? Pero...

- solo dile que no se vaya y ya. - escupo molesto y Tommy por alguna extraña razón me obedece y sale del departamento.

Vuelvo a tomar la botella de la barra pero al darle un trago me sabe realmente amargo, Angie me ha disgustado la noche con sus reclamos estúpidos.
Me voy a mi habitación para inhalar un poco de cocaina, mi lugar seguro donde nadie mete sus narices y donde no tengo que compartir de mi droga.
Hago unas cuantas líneas sobre un plato extendido e inhalo. Me acuesto sobre la cama boca arriba y siento que vuelo sobre la cama. La mejor sensación del puto mundo ya que la música de afuera se ha dejado de escuchar al igual que las personas allá afuera. Mi coraje de hace rato se ha desvanecido y ahora solo pienso en una playa, en aquella playa donde solía correr y jugar.

Brooklyn Baby. [Nikki Sixx]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora