Lo que nos Une (Jinx omegaverse Dan x Jaekyung )

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Una hora y media, en el mismo sitio, con las ventanas cerradas, el aire acondicionado puesto, sin una palabra intercambiada entre ambos y con cierta fragancia ya danzando en el ambiente... pues era bastante incómodo. O eso era lo que pensaba Dan.

En su cabeza solo había una cosa. Necesitaba un baño, y de forma urgente. Se sentía asqueroso.

Era como si su cuerpo necesitaba expulsar todos los fluidos en su cuerpo o era porque... miró de reojo. Acaso Jaekyung lo estaba provocando, pues había sentido sus feromonas regarse junto al olor a leche de él.

Se llevó las manos al rostro. No lo podía creer, pero al parecer no se equivocaba, porque increíblemente la sonrisa en el rostro del alfa no había desaparecido aun cuando tenía los ojos cerrados. Como si estuviese preparando un pastel que se moría después.

Ya había visto como se ponía cada vez que le chupaba hasta el alma, sobre todo su pecho, como si lo que soltara fuera lo más dulce y adictivo del mundo. Y no podía negar que después se sentía mucho más aliviado y la producción era temporalmente menos.

Apretó los labios y miró hacia el otro lado cubriendo su vientre con sus manos. Su pecho se apretó. Aún estaba molesto y dolido. No era como si pudiera borrar todo de golpe, aun si había una justificación de por medio. Los últimos días habían hecho mucha mella dentro de él. No podía ceder tan fácilmente.

Fue entonces que escuchó a Jaekyung gruñir ligeramente.

-Ahora porqué estás triste- lo miró por el rabillo del ojo dándole a entender que sus feromonas habían cambiado, y él las había olido- No hice nada, no me he movido en todo este tiempo.

Dan no supo por qué, pero aquellas palabras le hicieron que soltara una leve carcajada. Al parecer los últimos días no solo habían hecho mella en él, sino también en el alfa. No era que Jaekyung hubiera cambiado mucho, sin embargo... él lo conocía y era como si estuviese siendo más atento y teniendo más cuidado con sus acciones.

-No, nada- sonrió ligeramente- solo recordé algo, pero ya lo olvidé.

-Eh, ponte de acuerd...- mas no pudo terminar pues el sonido de la bocina del auto de atrás lo interrumpió.

La fila había comenzado a moverse y Dan suspiró de alivio. Al parecer llegarían pronto a su destino, y lo necesitaba, ya había notado que la mancha sobre uno de sus pechos se estaba haciendo notable, e intentaba ocultarlo con su brazo.

Jaekyung manejó un rato más hasta que Dan vio como giraba en un lado de la carretera y cogía un camino alejándose de la principal. Pensó que era un desvío para llegar más rápido a su destino hasta que se detuvo.

Pestañeó con duda.

-¿por qué nos detenemos aquí?- lo más extraño es que no había nadie por ningún lado y al menos faltarían algunos kilómetros para llegar a la ciudad que se veía a lo lejos. Si el auto se había roto tomaría otro tiempo considerable para que llegara la ayuda. ¿Y qué haría en todo ese tiempo?

Comenzó a ponerse nervioso hasta que... vio la mirada de Jaekyung. Oh no, pero un chillido fue lo que salió de su boca cuando el respaldar de su asiento cedió hacia atrás y quedó recostado. Antes que pudiera protestar Jaekyung apareció sobre él, mirándolo con un brillo en los ojos que reconoció... más bien, recordaba haber estado en una escena similar dentro de un auto, lo que esta vez en vez de haber un consolador entre sus piernas había una toalla sanitaria que para ese momento ya necesitaba ser cambiada.

-Espera Jaekyung- llevó sus manos al pecho de él, pero sus muñecas fueron agarradas y puestas sobre su cabeza fácilmente aguantadas por solo una mano de él.

-Crees que puedes llegar el auto de feromonas, a olor a esto...- dijo metiendo su mano por debajo de la ropa de Dan hasta llegar a uno de sus pechos y apretar por encima del sujetador- y que no ocurra nada.

Las mejillas de Dan se sonrojaron, pero en vez de protestar o forcejar soltó un gemido lastimero que hizo alzar una ceja a Jaekyung.

-Como que estamos muy sensibles aquí abajo- el alfa apretó un poco más humedeciéndose la mano debido a que el sujetador ya había llegado a su tope.

Jaekyung se encontró relamiéndose y más cuando agarró el borde de la camisa de Dan y la corrió hacia arriba. La mancha en el sujetador era blanca y tendedora. Y el olor, demonios, casi le hace perder la cordura. Con un ágil movimiento abrió el cierre delantero de la prenda y las dos partes cayeron a cada lado del cuerpo de Dan con un sonido sordo.

Los dos pezones hinchados sobre la aureola rosada y húmeda con el líquido blanquecino quedaron expuestos como si estuvieran esperando a ser chupados. Y ante esto la pupila de Jaekyung se volvió diminuta y sus ojos danzaron entre el negro y el dorado.

Era un festín lo que estaba delante de él. Se encontró salivando.

-Jaekyung- protestó Dan todo rojo y avergonzado, sobre todo por la adrenalina de estar a la intemperie, aunque el auto tenía los parabrisas oscuros, y sobre todo... porque la relación entre ellos estaba tensa.

Algo que, al parecer, en ese momento no afectaba tanto al alfa, pues este alzó levemente la mirada hacia él.

-Dijiste que no tocara el cachorro- se relamió un colmillo y sonrió- y no lo estoy haciendo.

Acto seguido su boca engulló uno de sus pezones.

No lo perdones tan fácil Dan, que coma pero que sufra.