CAPITULO 19

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-Debemos llevar mañana más granos a los pueblos de las fronteras. - comunico Aemma a su Maestre.

-Si mi Lady, su tía la solicita mañana temprano. - comento el Maestre. - Quiere hablar sobre su boda, la casa Hightower está presionando sobre la unión. - explico el mayor.

Aemma tomo aire y asintió.

-Gracias Maestre Pyter, descansé. - se despidió Aemma y salió al pasillo para llegar a su habitación.

En el camino sintió esa pesadez en sus hombros, alguien la vigilaba.

Llegó a su habitación y vio a sus sirvientas llenar la tina, necesitaba descansar.

-Listo mi Lady. - dijo su sirvienta que ha estado cuidándola desde que tiene memoria.

-Gracias Myrel. - Aemma se desvisto y entro al agua.

-Le lavare el cabello mi Lady. - aviso Myrel.

Aemma dejo que le lavara el cabello, había tenido una semana muy pesada con todas las nuevas funciones que tenía como futura señora del Valle.

-Veo tristeza en sus ojos mi Lady. - hablo la sirvienta.

-No te mentiré Myrel, hay una pesadez en mi corazón que no me suelta, sé que debo cumplir con mi deber, pero a veces quisiera dejarlo todo. - confeso Aemma viendo un punto fijo en la tina.

-Los problemas de corazón son difíciles de tratar. - hablo Myrel. -El príncipe Aegon jamás sería para usted, él tiene un deber con la corona, un deber con el Reino, no debió de meterse en su camino Lady Arryn, ahora debe pagar por ello. - dijo Myrel quitando las manos del cabello de Aemma.

Aemma abrió los ojos al escuchar esas palabras de su sirvienta más fiel, se quiso girar, pero Myrel tomo su cabeza y la metió al agua.

Aemma entro en pánico y quiso zafarse, pero sus pulmones ardían, necesitaba aire, pataleaba e intentaba alcanza a Myrel, lo más que pudo era arañar sus manos.

No sabía cuánto había pasado pero su cuerpo se fue debilitando y tuvo que dejar el agua pasar a sus pulmones.

Myrel vio que Lady Aemma ya no se movía, pero debía estar segura, con una mano tomo una daga lista para cortar la garganta de la niña que cuidó. Pero algunas personas no tenían lealtad, solo eran fieles al dinero.

Estaba lista para cortar la garganta cuando sintió como algo la atravesaba.

El soldado que había sido enviado por Daemon después de la visita de Aemma a Dragonstone donde le dijo que la vigilaban lo había dejado inquieto por ello había enviado a un soldado fiel a él para que cuidara a Lady Aemma Arryn.

-Mi lady. - una sirvienta entro y saco una daga debajo de su falda. -Aléjate de ella. - dijo la sirvienta Emyr.

-No le haré daño, fui enviado para protegerla. - dijo el soldado. -El príncipe Daemon me mandó a cuidarla. - dijo el soldado sacando el cuerpo de Aemma, aparto la mirada cuando la dejo en el suelo.

Emyr tomo una bata y la cubrió, le daba leves golpes en las mejillas para que reaccionara.

-No despierta. - dijo con pánico la sirvienta.

El soldado había buscado en los bolsillos de la sirvienta muerta y encontró un mensaje con el sello de una libélula.

Lady Aemma debe morir esta noche. - solo eso decía el mensaje.

El soldado miro a Lady Aemma y se acercó para dar presión en el pecho de ella, Aemma abrió los ojos y se puso de lado para tirar el agua de sus pulmones.

DANZA DE DRAGONESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora