Vizcaíno © (Omegaverse, romance, erotismo y mafia). #PGP2024

Capítulo cinco: Verdades - Parte 1

¿Qué tiene que ver el tiempo en eso?

El tiempo no es más que un exponente de la duración del desconocimiento.

¡No me habléis de eso!

Llegan momentos que nos arrastran directamente a lo más hondo de la persona, al centro de un torbellino que nos produce en el alma.

—Claudia por Arnold Zweig, escritor y novelista alemán.

—Enzo. —Dante llama con suavidad al chico que se encuentra sentado en la parte trasera del auto distraído. —¿Estás bien? Sé que no te gustan mucho los autos.

—Sí, bien. —responde sin expresión alguna y con aquella voz tan suave y tímida.

Enzo Vizcaíno ¿Vizcaíno? Sí, el apellido de la familia lo lleva el chico que afortunadamente fue visto por el abuelo del joven Lorenzo en las calles de Rusia a los 10 años, harapiento y sucio, buscando comida en una caneca de basura. Aquel joven de tez blanca, pulcra y profunda debido a su albinismo, el cual a su vez mutó de manera particular, pues sus ojos color amarillo no fueron afectados por aquella carga genética tan compleja. El difunto señor Vizcaíno encontró al chico observándolo desde una esquina, cerca de una cafetería en Rusia; cuando lo vio, el chico, ahora siendo hombre, recuerda que al ver aquel par de ojos ambarinos, observarlos tan paternales, conmovidos y alegres, empezó a llorar desconsoladamente, dejando que aquella voz que rara vez se escucha, saliera completamente herida de su garganta, una que llevaba días sin tomar agua fresca y comer una buena comida. Tan pronto el chico empezó a llorar, el anciano se acercó suavemente a él y le ofreció un emparedado, el más grande que jamás había visto, y un vaso gigante, o eso es lo que recuerda, de un batido de mango, tan fresco y frío.

Con suavidad acaricia su cabello largo, suspirando suavemente mientras observa los árboles pasar rápidamente y la suave y amable luz del sol en la mañana. "El medicamento", asiente al recordar el medicamento que debe tomar para su corazón, el cual padece de fibrilación auriculares, una arritmia común en la cual las aurículas, es decir, las cavidades superiores del corazón, laten de manera rápida y descoordinada, lo que puede llevar a su corazón a presentar la mayoría de las veces palpitaciones o sensaciones de latidos irregulares, sentir fatiga, dificultad para respirar y mareos o sensación de debilidad.

Para ello, el viejo Vizcaíno lo había llevado al médico en aquel entonces a la fuerza, pues el chico nunca había visto a un médico y las cosas que escuchaba en las calles de ello no eran los mejores comentarios y críticas. Resultó dicha patología cardiaca y además de eso el hecho de que el chico dispone de un coeficiente intelectual tan alto que fue necesario en el futuro que estudiara una carrera completa en la universidad de ingeniería informática.

Por otro lado, dicha arritmia cardiaca ameritó una serie de medicamentos que se redujeron a uno al pasar los años, SinusStabil, un medicamento diseñado para el control de la fibrilación auricular. Su fórmula avanzada dispone de propiedades anticoagulantes, antiarrítmicas y estabilizadoras de la frecuencia cardíaca en una sola cápsula y que en pocos segundos hace efecto en caso de crisis, cosa que no ha vuelto a darse hace años en la vida del muchacho.

—Rebeca... puede ser bastante molesta, pero es seria con su trabajo, así que si se sobrepasa contigo o definitivamente se te hace insoportable, solo llámame.

—Sí. —asiente con suavidad.

—¿No quieres saber algo más? —pregunta con cuidado, de por sí es difícil sacarle palabra alguna al chico.

—Sí.

—Genial, ¿qué quieres saber? —pregunta animado al ver la iniciativa del chico.

—¿Por qué las feromonas de Tiziano están en tu cuerpo? —pregunta sin dejar de verlo.