OneShots (Val X Riley)

𝓜𝓲 𝓱𝓮𝓻𝓶𝓸𝓼𝓸 𝓒𝓪𝓬𝓱𝓸𝓻𝓻𝓸

Riley era solo un cachorro cuando su manada la abandonó. Vagó sola hasta que fue capturada y llevada a un laboratorio. Los científicos vieron en ella un sujeto perfecto para sus experimentos. Entre ellos estaba el Dr. Ortiz, un hombre conocido por su frialdad y dedicación a la ciencia.

Valentina, la hija del Dr. Ortiz, era una niña curiosa y compasiva. Al ver a Riley por primera vez, sintió una conexión inmediata con el pequeño cachorro. Decidió nombrarla Riley y, desde ese momento, las dos se convirtieron en inseparables. Valentina cuidaba de Riley y, aunque estaba al tanto de los experimentos de su padre, su amor por el cachorro crecía día a día.

Los años pasaron y Riley se convirtió en un hermoso perro, mientras que Valentina crecía y seguía los pasos de su padre en el mundo de la ciencia. A pesar de los duros experimentos y las frías instalaciones del laboratorio, Riley encontró consuelo en la presencia de Valentina. Cada noche, Valentina se escabullía para pasar tiempo con Riley, llevándole comida y dándole el cariño que tanto necesitaba.

Riley, a su vez, era la compañera fiel de Valentina. Siempre estaba allí para ella, ofreciéndole consuelo en momentos difíciles y alegrándola con su presencia. Esta relación especial entre la joven científica y su cachorro se fue fortaleciendo con el tiempo, convirtiéndose en un vínculo irrompible.

A medida que Valentina crecía, también lo hacía su conflicto interno. Sabía que los experimentos de su padre no eran del todo éticos y que mantener a Riley en el laboratorio no era justo. Sin embargo, sentía una gran responsabilidad hacia la ciencia y hacia su padre.

Un día, mientras estaba sola con Riley en el laboratorio, Valentina comenzó a hablarle de sus sentimientos. "Riley, sé que esto no es justo para ti. Quiero que seas libre, pero no sé cómo hacerlo sin desobedecer a mi padre."

Riley, con sus ojos llenos de comprensión, lamió la mano de Valentina, como si intentara consolarla. Fue en ese momento que Valentina se dio cuenta de la profundidad de sus sentimientos. No solo veía a Riley como un amigo, sino que se había enamorado de ella, de la pureza y el amor incondicional que Riley le ofrecía.

Decidida a liberar a Riley y seguir su corazón, Valentina comenzó a planear su escape. Sabía que no sería fácil, pero estaba dispuesta a hacer cualquier cosa para darle a Riley la vida que se merecía. Durante semanas, trabajó en silencio, recopilando información y recursos necesarios para su huida.

Finalmente, la noche del escape llegó. Valentina esperó a que el laboratorio estuviera vacío y, con cuidado, liberó a Riley de su jaula. Con el corazón latiendo con fuerza, ambas se deslizaron fuera del edificio y corrieron hacia la libertad.

El mundo exterior era desconocido para Riley, pero con Valentina a su lado, todo parecía posible. Las dos se asentaron en una pequeña cabaña en el bosque, lejos del alcance del laboratorio y de su padre. Valentina utilizó sus conocimientos científicos para crear un entorno seguro y cómodo para ambas.

Con el tiempo, Valentina y Riley encontraron la felicidad que tanto anhelaban. Lejos de las restricciones del laboratorio y de la presión de la ciencia, pudieron vivir libremente y explorar su amor sin miedo ni juicio.

La vida en el bosque les enseñó a Valentina y a Riley el verdadero significado de la libertad y el amor. Juntas, enfrentaron desafíos y celebraron cada pequeña victoria. Riley, con su lealtad y amor incondicional, le mostró a Valentina una vida llena de alegría y propósito.

Aunque Valentina sabía que siempre estarían en peligro de ser descubiertas, su amor por Riley le dio la fuerza para seguir adelante. Juntas, construyeron un futuro lleno de esperanza y felicidad, demostrando que, a pesar de las circunstancias, el amor siempre encuentra la manera de triunfar.

Riley y Valentina vivieron muchos años juntas en su refugio en el bosque. Su historia se convirtió en una leyenda local, un recordatorio de que el amor y la compasión pueden superar cualquier obstáculo. Valentina, con su corazón lleno de amor por Riley, se dedicó a proteger a su amada compañera y a vivir una vida plena y significativa.

Juntas, demostraron que el verdadero amor no conoce barreras y que, incluso en los momentos más oscuros, siempre hay una oportunidad para encontrar la felicidad.